Leyendo el artículo del camarada Elías Jaua, publicado en Aporrea con el título "Tomar la Iniciativa Política" . me vinieron a la cabeza muchas vicisitudes ocurridas desde las luchas estudiantiles a finales de los setenta y buena parte de los noventa; militabamos en la Juventud Comunista y luego en el MAS, el caso que sobrevino fue a propósito de la declaratoria del PCV de una política denominada para entonces de "Paz Democrática", la misma en alusión al abandono definitivo de la Lucha Armada, digamos que en esa transición se creó el UPA, como Partido de Masas, con el objetivo de llevar a cabo la lucha en la calle, por supuesto, en medio de feroz represión que los regímenes de AD y COPEI, nos impusieron para el desarrollo de otro tipo de lucha, guardando las distancias del caso, en aquella época eramos una oposición disminuida y si se quiere tímida ante los eventos que se presentaban; una dirigencia que daba tumbos y que no ofrecía salidas aún en el terreno electoral.
El parangón que señalo obedece primordialmente a que hoy somos gobierno y pareciera que estamos a la defensiva, cosa que el camarada Elías menciona como necesario cambiar el rumbo de manera activa y decidida, aunque es menester señalar que aunque se hable de Unidad, en este momento se abren compuertas inexplicables en cierto sector de la izquierda, al menos dicen serlo y esta valoración habría que ponderarla con humildad e inteligencia.
Hemos sido críticos en la materia económica, dada la inacción que observamos en la toma de medidas que no deben seguir postergándose, so pena, de llegar tarde a las soluciones posibles y en virtud de la creación de factores de virulencia que se están proponiendo por gente de la derecha radical, dados estos preceptos, urge activar ciertamente el aparato productivo, pero es en el mediano y largo plazo, ese mientras tanto que incluimos acá, podría ser muy largo si no se considera la aplicación inmediata de medidas en tres campos; uno el sistema cambiario, otro los precios y el tercero olvidarnos de considerar que el empresario que conocemos va a participar en la Emergencia Económica con sus aportes, siempre será una pequeña parte de los mismos y repito ya los conocemos.
En cuanto al valor del bolívar que en definitiva es lo que está detrás del tipo de cambio, hemos propuesto o sugerido (lo que más guste), el establecimiento de un Sistema Dual que permita el ejercicio digamoslo así, de la importación de ciertos productos esenciales, pero aunque dirigido fundamentalmente a insumos y materias primas necesarias para incentivar la producción nacional, y una equivalencia del bolívar respecto al dólar más alta que el valor actual Simadi, con ello, debe constituirse en forma inmediata un control de la banca pública y privada que permita filtrar los desvíos en cantidad de dólares aprobados que impida por una parte la fuga de capitales y por la otra férreos seguimientos a lo importado. Un software único para todos los bancos en el manejo y otorgamiento de divisas.
En cuanto a los precios, de todos, a excepción de los que continuarían subsidiados, una congelación pero con fecha retroactiva entre un año y seis meses de anterioridad, es perfectamente posible implementarlo, por supuesto la contabilidad e ISLR, sufrirían algunas migraciones internas antes que la derecha proteste esta medida.
Por último, el Decreto de Emergencia Económica, debe ir acompañado del pueblo y acá está el componente de la ecuación de ir a la calle a contrarrestar la amenaza de la derecha de volver a las guarimbas y otros efectos dañinos, la revolución bolivariana se defiende desde la calle, no solo en los cuarteles y en razón de todo, comenzar de una buena vez, no a reunir a pequeños grupos, sino el llamado a grandes movilizaciones en apoyo al presidente y al legado del comandante eterno y sobremanera de la sobrevivencia del proyecto bolivariano y revolucionario.
