Desde sus inicios al frente de la jefatura de Estado, el presidente Chávez confió en la capacidad de Hacer que poseía la juventud, representada en el movimiento estudiantil izquierdista y como esta se articulaba en términos de sueños y esperanzas transformadoras a su proyecto liberador. Ejemplo de esto, son muchos poseen nombres y sus accionar tributa a la edificación necesaria y demandada por el país, para la configuración de la Venezuela potencia. Cada uno de ellos desde sus trincheras Vicepresidente, Ministros, Viceministros, Directores Nacionales, Gobernadores, Alcaldes, Diputados, entre otros, fortaleciendo con una gerencia distinta, basadas en resultado el accionar Socialista gubernamental. Hay una manifiesta claridad en los procesos transformadores e interpretación del carácter ético y de valores de la que se debe impregnar toda tarea, proyecto, programa, metas, entre otros.
Seguramente algunos lectores difieren de mi por el contenido anterior, pero quiero dejar claro que mis líneas están orientada al reconocimiento de todos aquellos gerentes socialista, que registran en sus designaciones de cargo la demanda de honorabilidad de Patria. Esos que son capaces de traicionar el pensamiento liberador y toman con disciplina el trabajo encomendado, los dejo de lado, ya que le dan otra interpretación a sus responsabilidades gubernamental, a ellos el tiempo, la historia y sus hijos le demandaran sus actos de traición.
Frente a las adversidades esta generación de jóvenes en función gubernamental, tienen una tarea histórica de demostrar que el comandante Chávez no se equivocó al creer en sus capacidades. Les toca rectificar para reimpulsar procesos que tributen al éxito o a eso que el Gigante Chávez llamo el Vivir Viviendo o el Buen Vivir. No se puede vacilar en el intento y mucho menos permitir distracción en el combate de las ideas constructivas y rectificadoras de la política socialista. Se honra la memoria del Comandante con la transparencia laboral, organizando equipos de acompañamiento que puedan entender el significado, alcance, impacto, e importancia de las prácticas sistemáticas vinculadas con la eficiencia, eficacia y efectividad.
Adoptar un manejo de control de gestión significa la segura identificación de los vicios, burocracia y corrupción; estos últimos, elementos representa nuestra verdadera oposición, con el agravante que se encuentra localizados en nuestros espacios actuando como una especie de camaleón y fieras que muestran sonrisas de hienas, ocultando sus colmillos y agresividad devoradora de la presa, la cual lleva por nombre el asunto público.
Revindicar la moral y el espíritu de cuerpo hacia el deber cumplido tiene que ser el objetivo de todos aquellos funcionarios que se enmarca en esa generación de oro de la política, devolver la esperanza a quienes se han visto decepcionado por comportamiento antirrevolucionarios. No se trata de abandonar espacios conquistado, pues estaríamos frente a una actitud pasiva, que no es más que la retirada del espacio conquistado.
Es el momento de ver la acción de la retaguardia como una estrategia que lleva por táctica la contraofensiva y con ella el rescate de importantes cuadros que fueron tocados por cantos de sirenas. Es momento de revisar las estadísticas vinculadas al comportamiento electoral, ella nos representa la justificación de buscar nuevas formas para el reagrupamiento de la revolución bolivariana. Viva y gloria a la generación de Oro Chavista, nos tocó una tarea histórica que debemos vestir de gloria, por el triunfo de nuestro pueblo y amado presidente Chávez.