Para aquellos que piensen que la analogía Marx -Gardel del título es demasiado grosera, diré que soy respetuoso de la sabiduría, que el pueblo volcó en el tango y en Gardel. Luego analógicamente pienso, que Marx “cada vez piensa mejor” y que “cualquier cacatúa sueña con su estatura intelectual”.
El tiempo pasa inexorable, en 2018 se cumplirán 170 años del Manifiesto Comunista.
Mientras tanto se va engrosando la fila de politólogos, filósofos, economistas, sociólogos, escritores, periodistas y hasta lingüistas y psicólogos, que se han animado a enmendarle la plana a Don Carlos.
A propósito, cuentan de un director artístico teatral de la Ex Unión Soviética, llamado Arnold, prestigiado por la calidad de sus trabajos, que cuando algún artista de sus elencos, se le acercaba para proponerle” maestro, tengo una idea para mejorar esta escena”, el director Arnold le contestaba invariablemente , “le agradezco su preocupación, pero le pido por favor que no lo mejore… solo que no lo mejore”.
Creo que la misma respuesta, merecería esa larga fila de “mejoradores “de Marx.
Lo que no significa, que no hayan mejorado sus vidas personales, curiosamente la mayoría de ellos, son prestigiosos columnistas en los mejores y más importantes diarios internacionales, propiedad de las cadenas y monopolios de medios del capitalismo.
Sus libros, los imprimen las editoriales más importantes, y ocupan sillones académicos en las academias privadas, sobre todo las más prestigiosas.
¿A qué se debe esa “suerte” de Marx, de tener multitud de “mejoradores” detrás de sus ideas?
Suerte que no tuvieron ni tienen, otros pensadores, filósofos y aun científicos, en toda la historia de la humanidad.
No se recuerda una aglomeración de “mejoradores”, corrigiendo a Einstein, Voltaire, Hegel, Platón, Newton, Kant, Linneo, Mendeleiev etc.
Los Mejoradores de Marx actuales, surgen de las clases medias, son los profesionales del pensamiento, que emiten las academias del capitalismo, academias donde Marx es clasificado, como un utópico prácticamente irresponsable,
Son intelectuales, que extraen del capitalismo su fuente de existencia, cuando descubren que es negocio criticar y disminuir los méritos de Marx y que los capitalistas pagan bien esa colaboración.
Descubren además, que así se les abre la presencia en la Prensa y los medios del sistema.
Esa es la razón por la que los Mejoradores de Marx, siguen apareciendo y aun aumentando con el paso de los años.
Desde luego que esto no es casual,
Marx carga sobre sus espaldas, nada menos que el haber descubierto la trampa, en la que cayó la humanidad, con la asunción del capitalismo y más aún, nos dio la formula concreta de salir de esa trampa.
Su descubrimiento expone a una luz inocultable, los privilegios y los métodos de la acumulación, ejercitados por esa minoría insignificante, de los apropiadores de la riqueza de todos, y los explotadores del trabajo humano.
Expone crudamente la imbecilidad del sistema capitalista, que une a su injusticia básica, los métodos y la violencia implícita para mantenerlos.
Y advierte, que el haber transformado sin razón alguna, a la mayoría de los seres humanos, en asalariados de unos pocos ladrones privilegiados, los ha transformado en esclavos alienados, situación de la que solo saldrán, si llegan a concientizar su estado.
Y eso, los privilegiados y la clase dominante, no pueden tolerarlo.
Hace 100 años, un grupo humano basado en las ideas de Marx, realizo en Rusia la Primera Revolución, en la que una clase, la de los obreros y campesinos, desplazo del poder, de la posesión de los bienes y medios de producción, a la clase de los ricos ladrones. E intento construir una sociedad sin clases.
Y eso, les hizo llevar un buen susto a los apropiadores, durante 70 años, estuvieron agrediendo a estos revolucionarios, lo que incluyó el organizar y lanzar la Segunda Guerra Mundial, contra la Unión Soviética, que le costaron 60 millones de muertos a la humanidad.
Aun así no pudieron vencer a la Revolución, hasta que una serie de errores graves en la URSS, de los burócratas de tercera generación, que olvidaron a Marx y se dejaron ganar por los vidrios de colores del capitalismo, produjeron la involución circunstancial, del experimento social más importante del siglo .
Los 25 años transcurridos, desde esa involución de la ex URSS, nos muestra con claridad que el capitalismo está entrando en su fase final, lleno de contradicciones irresolubles.
No cabe duda, que las premisas de Marx son más actuales que nunca, ya que el sistema capitalista, no pudo en los años transcurridos, modificar la sociedad humana hacia una vida mejor, más justa, más armónica para todos los seres humanos por igual.
Las teorías de Marx, son tan objetivas, tan ancladas a las posibilidades y necesidades materiales del ser humano, basamento sobre el que se apoyan sus posibilidades espirituales, que nada podrán las confusiones, que intentan introducir los “mejoradores” de Marx, ni siquiera los va ayudar la tecnología de la informática y la comunicación, hoy un arma de doble filo.
El legado de Marx, sigue siendo el arma más poderosa, que las clases trabajadoras tienen a su favor.