Cómo quedó el escenario electoral tras la gincana de postulaciones de candidatos para las Elecciones Presidenciales del próximo 28 de julio?. Así lo veo yo.
1) Tenemos 12 candidatos inscritos. Maduro más 11 “candidatos de oposición” que finalmente contaron con la aceptación y autorización para ser admitidos de Maduro y el Partido-Estado. En estricto sentido, se puede afirmar que Maduro escogió 11 candidatos que le resultaron “potables”, es decir, inocuos e inofensivos en el sentido de que, desde su óptica, ninguno de ellos representa peligro alguno para su continuidad en el ejercicio del poder. Además, no fue aceptada ni una sola mujer.
2) Ninguno de los 11 potables participó en la Primaria opositora.
3) Ninguno de los candidatos de oposición llega al 10% en la intención de voto en ninguna encuesta. Algunos ni siquiera al 1%.
4) Cada uno de los 11 potables ha llegado allí para: a) reconocer el "triunfo" del candidato oficialista; b) admitir su propia derrota aunque estuviese seguro de haber ganado; c) legitimar los resultados que ofrezca el órgano electoral cualesquiera que sean; d) no reclamar jamás una victoria aunque tenga plena certeza, de haberla obtenido y e) por encima de todo, nunca denunciar un fraude, aunque no tenga duda alguna, además de todas las pruebas, que le permitirían hacerlo.
5) Quedaron excluidos todos los candidatos que tenían la más alta popularidad e intención de voto, así como aquellos que pudieran haberle restado votos de manera directa al oficialismo. Incluidos María Corina Machado, Corina Yoris, Leocenis García y Manuel Isidro Molina. Antes había sido excluido vía inhabilitación Henrique Capriles Radonski
*6)* Se acrecienta un clima de desconfianza, desmoralización, rabia contenida y frustración, muy proclive a incrementar la abstención.
*7)* Por si habían dudas, quedó clara la magnitud del control que ejerce Miraflores sobre el órgano comicial: es absoluto, totalmente fuera y contrario al marco legal, y ahora sin vergüenza alguna ni cuidados por las formas. Y, no hay que olvidar, que ese será el organismo que anunciará los resultados “el 28, el 28, el 28”.
En resumen, quedó estructurado un escenario que le permitirá al oficialismo atornillarse en el poder por 6 años más con el respaldo decidido de un conjunto de factores que se presentan al país y al mundo como “oposición” invisibilizando formalmente a las fuerzas del cambio político tanto por derecha como por izquierda. Se trata de un escenario en el que se ven claramente al menos 4 grandes características: Una multiplicidad de candidatos “de oposición” que garantizan la hiperfragmentación del voto opositor; un candidato oficialista sin competencia real y con claro ventajismo en cada aspecto, componente y fase del proceso; un órgano comicial trabajando decidida y desvergonzadamente para el triunfo oficialista y un clima proclive a la abstención, que por supuesto, favorece ampliamente al oficialismo; y la ventana electoral para el cambio político está cerrada hasta nuevo aviso. Queda por ver como reaccionarán aquellos factores excluidos arbitrariamente de todo el proceso, pero sobretodo, cómo reaccionará la sociedad venezolana frente al nuevo panorama. Discúlpenme los más optimistas, pero así es como lo veo.