Es tanto el interés del elector de saber a ciencias cierta cómo fueron los resultados, que mucha gente me ha llamado para que me dirija al CNE a buscar una copia impresa de la Gaceta Electoral con los resultados detallados del 28J.
Tengo ganas de ir a la sede del CNE a ver si consigo una copia para analizar esos resultados y hacer las proyecciones para las elecciones que se darán el próximo año, entre ellas las del Parlamento Nacional, gobernaciones y alcaldía.
Hay muchas expectativas sobre el anuncio del diputado Jorge Rodríguez de que van a cambiar todas las leyes electorales vigentes aprovechando su mayoría en la Asamblea Nacional.
¿Qué tendrán en mente modificar?
¿Será que van a eliminar el Artículo 155 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales que obliga al CNE a publicar los resultados en Gaceta Electoral 30 días después del Acto de Proclamación del candidato electo, y que es la única vía para garantizar el principio de transparencia en cualquier elección?
¿Será que habrá una evolución o involución electoral?
¿Será que lo que tienen en mente los promotores de modificar esas Leyes es para implantar un *Autoritarismo Electoral*, donde el partido de Gobierno decide quiénes son los partidos y candidatos que pueden participar y donde los resultados electorales pasaran a ser Secreto de Estado como ocurrió en las presidenciales del 28J?
¿Será que realmente vamos a una nueva época en el sistema político?
Lo cierto, es que la historia política venezolana tiene pasajes de abusos de poder y también tiene eventos de cómo han caído muchos de esos abusadores.
Yo en vez de modificar las leyes electorales más bien promovería dos leyes que están en mora desde 1999 cuando se aprobó la Constitución:
- Ley Orgánica de Fortalecimiento de la Democracia Participativa y Protección Social.
- Ley Orgánica de Ajuste Salarial multireferencial, como lo manda el Artículo 91 de Constitucional.
De ambas propuestas Leyes Orgánicas tengo en mis manos un borrador elaborado por el *Movimiento de Profesionales de Venezuela (Moproven)*, para ponerla a la orden del país.
¡Amanecerá y veremos!
(*) Experto electoral
