Desear un feliz año a otras personas, no debe ser una especie de requisito que imponen las costumbres y la cultura, después de sonar las doce campanadas, que de paso ya no se oyen y, entonces, son los medios de comunicación los que se encargan de eso ahora, aun cuando la persona lo sabe al ver su reloj.
En estos momentos, decir un feliz año pa ti, tiene su objetivo y va dirigido a Edmundo González; pues comenzar un año feliz no debe estar plagado de amenazas, ni de intentos vanos por querer juramentarse como presidente sin pensar que su intención ya de por sí, es un intento para que el año que viene comience a ser malo, después de tantas expectativas del venezolano por un supuesto resurgir económico.
El mayor deseo del venezolano para Edmundo es que no trate de quebrantar la paz que hasta el momento creemos que hay en el país. ¡Quédate quieto! Sobre todo el pueblo trabajador aspira mantener las esperanzas vivas en la posibilidad de obtener mejores ingresos en el nuevo año; pero, eso pasa por tener un país produciendo y en paz. El pueblo te desea que te comas tus hallacas en paz y que no te falte hielo para tu whisky.
Un feliz año pa ella, es el que en estos momentos se le puede desear hasta al peor enemigo y mire que María corina tiene meritos; sin embargo, ¡Feliz año María Corina! Mucha gente te agradecería, si te calmaras un poco, y dejaras a un lado las ansias de poder si no has hecho nada bueno para obtenerlo. El pueblo te desea tranquilidad, que te olvides de Trump, que te olvides de pedir sanciones para el país, que te olvides de manipular a Edmundo, que te olvides de la unión europea, etc.
Si ustedes se calman y asumen su derrota electoral y dejan de pensar en cosas malas para el país, en intervenciones militares, en saboteos, en guarimbas, en atentados, posiblemente el año 2025, sea un feliz año pa todos.