El Partido Revolucionario del Trabajo, PRT El Partido de Los Trabajadores, es un Partido de Cuadros Políticos, que asume el marxismo – leninismo, como ideario, tiene presencia en todo el territorio nacional, forma parte de la alianza de Partidos del Gran Polo Patriótico Simón Bolívar, además de otras alianzas como la Unión Popular Revolucionaria Antiimperialista, UPRA.

Para conocer más acerca de esta organización aludimos a su Secretario Político Nacional, Otto Van Der Velde quien accedió para hablar de este tema y otros de la realidad política nacional e internacional.

-¿Cuál es la apreciación del Partido Revolucionario de los Trabajadores, PRT, sobre la situación actual?

- En lo internacional se trata de una situación difícil. La burguesía del mundo, decidida a lo que sea con tal de salvar al sistema, no se parará ante derechos humanos, democratismo o cualquier sentido moral, justo lo vemos en el Medio Oriente, en África y en más de una nación latinoamericana. Están en juego poderosos intereses imperialistas, y  el gran capital nacional e internacional.

Así mismo, ante  ese panorama de mayor expoliación de la clase obrera internacional y de las masas, de competencia internacional por mercado y una carrera armamentista desatada, se acentúa el peligro de guerra mundial pero también de respuestas revolucionaria del pueblo. Vuelve la llamada guerra fría. EEUU, el fascismo Israelí y la OTAN provocan al planeta y exhortan al terrorismo, esto hacen en Siria, Irak, Afganistán y  Libia. Al mismo tiempo, crece la oleada antiimperialista de masas, el proletariado asciende políticamente en las movilizaciones internacionales. Europa, Asia y el propio Estados Unidos hierven socialmente. El capitalismo no logra reponerse de la crisis de estructura que padece desde el año 2007-

-¿Como incide esa situación en Venezuela y el área latinoamericana-caribeña?

- Latinoamérica,  sobretodo Venezuela,  no escapa de la crisis capitalista ni a las provocaciones dirigidas por el gobierno de Obama y cumplidas al pie de la letra por sus socios de Fedecámaras-Venamcham. Ante esto, el proceso revolucionario venezolano y latinoamericano debe pasar a una segunda fase más profunda de lucha  política, si quiere conservar el terreno político-social conquistado. La dirección y el programa proletario están llamados a orientar, centralizar y dirigir los próximos objetivos de liberación y socialismo. A su paso, la crisis mundial capitalista ha demolido y ridiculizado las propuestas del reformismo.

-Pero también,  ésta crisis mundial del capitalismo ha revelado como insuficiente el asistencialismo. Personalmente considero el esfuerzo del Presidente Nicolás Maduro, y le agradecemos sus gestos de amplitud con el PRT, desestabilizando en plena TV maniobras electorales injustas y sin razón contra los derechos autónomos del PRT, venidas de algunos grupos del propio Comando Nacional de Campaña Bolívar- Chávez. Es obvio que dicha conducta daña la política de aliados y sus tareas revolucionarias.

No olvidemos que descontando la votación propia del PSUV, el resto de los partidos del Polo y las organizaciones revolucionarias aliadas, aportaron una apreciable cantidad de votos que hicieron posible  los triunfos del Presidente Chávez y de Nicolás Maduro,  aunado al dominio revolucionario de alcaldías, concejos y gobernaciones. Basta revisar la estadística del CNE para entender esto.

-¿Qué programa propone el PRT para ésta coyuntura electoral?

-Proponemos, a nivel de consignas y documentos de calle, nuestro programa de profundización revolucionaria, que marca la diferencia en ésta coyuntura. Nuestras propuestas son realistas, apunta a quebrar la estructura del capital monopolista, incluyendo el financiero, que conforma la punta de lanza del imperialismo y de la conspiración interna.

-El boicot económico-político es una estrategia de agitación peligrosísima de la gran burguesía local. Por ello la hiperinflación, el desabastecimiento y el paramilitarismo deben ser atacados en sus fuentes, es decir, donde se forman y distorsionan los precios, donde se organiza el acaparamiento a gran escala y la financiación del paramilitarismo. Se entiende que hablamos del capital monopolista industrial-financiero y los mecanismos de importación relacionados.

Proponemos entonces,  Abolir los monopolios de FEDECÁMARAS-VENAMCHAM, control estatal de la importación, mano dura a la fuga de divisa, congelación rigurosa de precios, con base al año 2012 y suplantar el viejo Estado burocrático-capitalista por un nuevo Estado obrero- comunal. No hay nada descabellado en estas propuestas. Son necesarias y posibles incluso constitucionales, según el artículo 113 de la Constitución Bolivariana que prohíbe los monopolios.

Estas medidas cortaran el oxígeno al gran capital explotador, por tanto a la conspiración y el paramilitarismo, afectando la fuerza burguesa  generatriz de la llamada guerra económica. Que no es otra cosa que la puesta en escena del plan político de la coalición imperialista EEUU, la OTAN e Israel contra el progresismo latinoamericano pero sobretodo contra Venezuela, su petróleo y los recursos naturales del país.

Es claro  que las medidas anticapitalista estructurales, se relacionan con el problema del Estado, del viejo Estado que hay que abolir por nuevas formas estatales de organización popular, formadas al calor de la lucha política de clase en Venezuela como el control obrero en materia de los grandes medios de producción, el poder popular de las comunas del campo y la ciudad, diversas organizaciones de masas que constituyen los embriones del nuevo Estado popular.

Aunque desde el año 70 luego de la heroica jornada armada de los años 60, ya habíamos planteado estos temas como política del frente MPDIN-PRTV (Partido Revolucionario de los Trabajadores de Venezuela) Esta  propuesta marxista no la hemos  inventado nosotros; incluso los Presidentes Chávez y Maduro, han hecho referencia al asunto desde sus puntos de vista, con aquella célebre frase del viejo Estado que no termina de morir y del nuevo Estado que no termina de nacer.

Los papeles más consecuentes del olvidado III Congreso del PSUV (capítulo, formas de propiedad y Estado)  igualmente plantearon el tema. Además se trata de una vieja consigna del movimiento comunista, de los revolucionarios y del proletariado local,  desde los años sesenta cuando menos. Ahora bien, si medio siglo después el nacionalismo revolucionario plantea esas cosas ¿por qué no los marxistas leninistas? No hacerlo sería como poner la carreta adelante y los bueyes atrás.

-¿Y qué nos puede decir de la unidad revolucionaria?

La coalición revolucionaria de nacionalistas y socialista ha sido clave para el proceso revolucionario y hay que consolidarla al máximo viéndonos como aliados consecuentes que hemos sido del Polo Patriótico, consideramos que el trato político recibido por el PRT de un sector del Comando Nacional de Campaña, deja mucho que desear. Un sectarismo estrecho y desconsiderado domina ese sector. De ello hablaremos en detalle en otra ocasión. También formamos parte del frente Unión Popular Revolucionaria Antiimperialista –UPRA- importante unidad revolucionaria que agrupa organizaciones de talla como Los Gayones, Insurgencia Comunista, los Comunero, el Movimiento Ana Soto y decenas de colectivos sociales de gran poder de convocatoria.

Otto Van der Velde, culminó esta entrevista manifestando:” Trabajamos para que los resultados electorales del 6 de diciembre sean favorables al proceso revolucionario y su unidad. Probablemente haya variables interesantes en esos resultados, lo cierto es que la lucha de clases se intensificará en el 2016, nuestro Partido, así como  el proletariado y las ideas socialistas, esperan jugar un papel significativo en los combates hacia el socialismo y la liberación nacional que se avecinan”.