Abre una esperanza para la lucha del pueblo contra esa empresa ecocida
En el discurso de rendición de cuentas del Presidente Medina ante la Asamblea Nacional el 27 de febrero del presente, sin duda alguna el aspecto más destacado y celebrado por la población dominicana lo fue la postura enérgica del mandatario con el aspecto económico del contrato suscrito con la Empresa Pueblo Viejo Dominicana Corporation filial de la Empresa Minera Canadiense Barrick Gold, el cual califico de inaceptable.
Su postura en ese momento en verdad que dignifico la Patria de Duarte y los Trinitarios, su popularidad alcanzo los niveles más altos registrado por gobernante alguno, esto entusiasmo al pueblo dominicano, la esperanza volvió a ondear con nuestra enseña tricolor.
Tras bastidores palaciegos acaloradas gestiones, lo vulgar domino sobre lo racional, las intimidaciones estuvieron en el trasfondo en cada una de las reuniones de las comisiones creadas por ambas partes, el Estado Dominicano y la Barrick Gold. Incluso la sangre empapo al comité político del Partido de la Liberación Dominicana, se enfrentaron en posiciones cerradas sus dos principales líderes de esa organización, Danilo y Leonel.
Finalmente el 8 de mayo, el Gobierno presento una especie de documento donde anunciaba formalmente que se había llegado a un acuerdo con la empresa minera, estuvieron presentes, el Presidente de la Republica de Dominicana Danilo Medina Sánchez y el Presidente de la Barrick Gold Manuel Rocha. Fue notorio que había tensión en ese momento, sin embargo, el hecho fue que ante lo anunciado, que la nación percibiría mejores ingresos con el actual acuerdo que con el pasado, todo el pueblo expreso satisfacción, valoro la actitud del Presidente Medina, incluyendo a los de posiciones más radicales, como yo, acompañamos la iniciativa del Presidente Medina de colocar a la empresa en la necesaria actitud negociadora, emplazada por la voluntad de un gobernante que entendía al igual que la mayoría de los dominicanos, que la enmienda al acuerdo del contrato con la Placer Dome (dueños originarios de la concesión minera de la reserva fiscal de Montenegro luego de una licitación realizada por el Estado Dominicano), constituía una flagrante estafa de nuestros preciados recursos auríferos.
Se anunció que lo convenido entre las partes iría al congreso para su conocimiento y aprobación. Esto no ha sucedido aun. Pasaron los meses y con estos la inquietud de la sociedad en torno al tema, la Barrick Gold y su equipo político evidentemente empezaron con sus habituales conspiraciones, no era verdad que le saldría fácil al Gobierno el asunto con ellos. Al arribo de tres meses sin que se enviara al congreso el nuevo acuerdo del Gobierno con la Barrick Gold, empezaron las incoherencias del Ejecutivo, de manera informal Pina Toribio Consultor Jurídico del Poder Ejecutivo, expreso que el nuevo acuerdo ya estaba casi listo para ser enviado al Congreso. Igualmente escuchamos a Guarocuya Félix Director General de Impuestos Internos decir que del nuevo acuerdo el Estado Dominicano solo percibiría un poquito más de beneficio con relación al anterior.
Luego de estas dos declaraciones, el Ministro de la Presidencia Montalvo hizo anuncio oficial que aún estaban dentro del plazo establecido de los 120 días para la preparación del documento definitivo y que enviarían al Congreso el nuevo acuerdo con la Barrick Gold antes del 7 de septiembre.
Lo que vino fue diferente, muy distinto a lo anunciado. A principios del mes de septiembre anunciaron un acuerdo definitivo, ¿y es que no era definitivo el anunciado y celebrado el 8 de mayo? En lugar de enviar la pieza convenida al congreso que era el paso a seguir, lo que se anuncio fue otro asunto. Y para colmo brillo por su ausencia el Presidente Danilo Medina.
Uno de los problemas que refleja mayor nivel de preocupación para el pueblo dominicano es precisamente el que recibe mayor censura de los medios de comunicación, “gracias a las buenas relaciones públicas” realizada por la empresa minera canadiense. Las inconsistentes declaraciones del Poder Ejecutivo respecto al tema, la desinformación con la cual han manejado todo lo relativo al proceso de renegociación del Gobierno con la Barrick, diluye la credibilidad del oficialismo de todo cuanto nos está diciendo.
Me pregunto ¿Es que el Presidente Danilo Medina no tiene sensibilidad humana como para poner su esmerada atención en el problema de la contaminación que está produciendo ya esta empresa minera ecocida? ¿No son dominicanos los niños y niñas, las mujeres, los envejecientes, la juventud y los hombres que están siendo condenados a la muerte por la contaminación asfixiante que los condena a una vida infernal? ¿No debería el Presidente Danilo actuar con la debida responsabilidad sobre un problema del cual el no tuvo nada que ver cuando fue creado y si pudiera casarse con la gloria ayudando al pueblo dominicano a evitar una de las mayores catástrofes ecológicas de todos los tiempos registrada en nuestro territorio?
Lo que no admite discusión es que el modelo minero de la Barrick ya ha dejado secuela devastadoras al ecosistema donde han operado, de enfermedades, contaminación de las aguas y hasta la muerte de seres humanos. Al Presidente Danilo Medina, al ser humano extraordinario que conozco, y que estoy plenamente seguro de su compromiso con el bien y de su alta sensibilidad humana, le aconsejo que mire al modelo Barrick Gold de Pascua Lama, en la frontera Argentina-Chilena, que lea el libro “El Mal” de autoría del ex diputado argentino Miguel Bonazo. Y que investigue la última sentencia de un tribunal Argentino paralizando las actividades de la minera por violación a más de 23 artículos de la legislación ambiental y otras leyes de esa nación.
Un hombre que prometió gobernar con la agenda que le imponga la sociedad, que este seguro que la sociedad impondrá en su agenda, entonces el gigantesco problema que tenemos con esta empresa arrogante, mafiosa y ecocida que se enquisto en nuestra hermosa naturaleza legada por Dios como una fuerza demoniaca que amerita de un urgente exorcismo para recuperar el alma limpia de nuestra nación.
La ausencia del Presidente Danilo Medina al supuesto acuerdo definitivo con la Barrick Gold firmado el 5 de septiembre, la interpreto con mucha esperanza, me recuerda el caso de Bahía de las Águilas, cuando se anunció el proyecto, el Presidente tampoco asistió. Puso sus oídos en el corazón del pueblo, y le dio marcha atrás a todo lo anunciado. Sé que el Presidente Danilo Medina está colocando sus oídos en los cientos de familias pobres marginadas que han reclamado ser reubicadas de los alrededores de la mina de pueblo viejo, sé que el Presidente reflexiona lo que si sería su posición definitiva con la empresa minera que tanto daño nos ha traído, más del que imaginamos los dominicanos, y sé que Dios lo terminara fortaleciendo para tomar su mejor decisión en este caso.
Su ausencia en el acuerdo definitivo apunta con toda claridad que pese a los anunciado por su gobierno de acuerdo a la evaluación de las comisiones técnicas responsabilizadas en manejar el asunto, nos revela que Él no está del todo confiado en esos acuerdos, la verdad que desde el punto de vista de las nomenclaturas complejas que se manejan en el contrato, los dominicanos necesitamos ser alfabetizados en estos temas, ni el Presidente que es un Tecnócrata del más alto nivel puede entender con facilidad las complejidades de este sector. Bueno pero debería sentirse consolado cuando el mismo presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Entidad Financiera Privada) declaro recientemente que no entiende cómo funciona el mercado mundial del oro.
Desde aquí nuestras mejores y más sentidas oraciones a Dios para que ilumine la mente y el alma del hombre humilde de Arroyo Cano, el discípulo del político más moral que ha tenido la Republica de Dominicana, Juan Bosch y el hijo de Padres que le infundieron el temor a Dios, y que sin sentirse avergonzado se ha declarado temeroso del Todopoderoso.
Que la ausencia de Danilo Medina al acto donde se firmó el acuerdo definitivo con la Barrick Gold sea la presencia infinita de su ser verdadero en el corazón del pueblo que padece las maldades de esta explotación minera y su militancia eterna en los ideales de los hombres y mujeres que nos legaron la Patria.