Condecoración Colanta
La semana pasada nos sorprendió el Presidente Chávez defendiendo a Colanta de Venezuela. Ya nos había sorprendido, en vísperas electorales, haciéndole un guiño al triunfo de Älvaro Uribe a la vez que decía que no podía opinar sobre Carlos Gaviria, el candidato de la izquierda colombiana, porque no lo conocía “personalmente”, como si cuando opina sobre Simón Bolívar lo hiciera porque lo conoció personalmente…
¿Qué es Colanta de Venezuela?
Se trata de una empresa colombiana, con sede en Medellín, que instaló una cooperativa en Venezuela donde no paga impuestos y le hace competencia desleal a las empresas venezolanas.
Colanta está integrada por poderosos hombres de negocios colombianos y de medios de comunicación, también colombianos (ver más adelante “Colanta en
Colombia” que señala cómo Colanta es una empresa paraoligárquicamilitar).
Los funcionarios colombianos de Colanta en Venezuela no tienen visas de trabajo y viven en Medellín. ¿Cómo es que la Superintendencia de Cooperativas de Venezuela les legalizó a Colanta? La empresa comercia con sus productos lácteos en territorio venezolano y ni siquiera cumple con los estándares para el consumo humano. Tiene dos años en Venezuela y sólo ha sacado divisas. La Corte Primera de lo Contencioso Administrativo y la Sala Constitucional acaban de admitir en Venezuela las denuncias contra Colanta. El Ministerio de la Producción acaba de ordenarle a la Superintendencia abrir proceso administrativo para determinar si Colanta violenta la Ley de Cooperativas.
Pero Chávez, en rueda de prensa, defiende a Colanta (y ya sabemos lo que significa un guiño de Chávez en Venezuela) y ofrece apoyarla económicamente.
¿Por qué? Por la simple razón de que el corredor geoestratégico - constituido por las tierras de Colanta - parte de cercanías del Zulia en la frontera, cruza todo el territorio colombiano y llega a inmediaciones del Mar Pacífico (ver mapa al principio de este correo) y ES POR AHÍ POR DONDE "mi amigo Alvaro Uribe", como lo llama el Presidente Chávez y el presidente venezolano proyectan pasar el oleoducto que llevará el
petróleo de Venezuela a la salida del Pacífico.
¿Qué es COLANTA en Colombia?
Esta cooperativa lechera emplea en Colombia a un gran número de “soldados-campesinos”, organización paramilitar creada por el Presidente Alvaro Uribe Vélez como nueva versión de las “Convivir”. La cooperativa fue bautizadaCOLANTA, en referencia y asociación a la leyenda celta de Avendal, en la cual el mítico rey Ventar, para luchar contra las fuerzas del mal (hoy los llamarían “terroristas”), conformó un consejo de defensores del reino al que autoproclamó “Colanta”.
¿Cómo fue posible que a una cooperativa lechera le dieran, en pleno siglo XX, el nombre evocador de un grupo combatiente del siglo V? Sencillamente porque dicha cooperativa es una organización encubierta para agrupar paramilitares bajo la sofisticada modalidad denominada “soldados-campesinos”, que se financian, ya no con la explotación de sembradíos de coca, sino con la producción de leche y la elaboración de sus derivados, a la vez que ocupan terrenos geoestratégicos[1][1] para conformar un muro de contención entre el norte y el sur de Colombia, respondiendo a la táctica norteamericana de dividir los territorios en conflicto para debilitarlos, tal como se hizo en Yugoeslavia y como ahora se pretende concretar en Irak, dividiendo al país en tres partes. Además, en el sur del país Colanta forma una barrera en la frontera entre el Ecuador y Colombia.
¿Quién gerencia y dirige a “Colanta”?
El currículo del gerente de Colanta es más que diciente y está en un todo acorde con los propósitos de la Colanta del siglo V y de su nueva versión, la colombiana de los siglos XX y XXI. En efecto, Jenaro Pérez Gutiérrez, el gerente, es subteniente de la reserva. A lo largo de los últimos 20 años ha recibido múltiples reconocimientos del Batallón Contraguerrilla No. 4, quien lo condecoró por su apoyo y colaboración a su Unidad Táctica. Recibió la condecoración “Servicios Distinguidos” de
manos del Director General de la Policía Nacional en reconocimiento a la “colaboración incondicional” y apoyo blindado a la Institución Policial.
Es miembro destacado de la Asociación de exbecarios del Centro de Estudios Cooperativos de Israel y miembro del Comité Directivo, Capítulo Antioquia, de egresados del Batallón Miguel Antonio Caro, MAC. Además, es colaborador de los diarios más derechistas del país, la República y el Colombiano. En representación del Partido Conservador ha sido concejal municipal y diputado departamental de Antioquia, miembro del Congreso de Colombia y Presidente del Concejo de Medellín en el período en que Alvaro Uribe Vélez se desempeñó como Gobernador de Antioquia[2][2]. Es, además miembro del Directorio Nacional Conservador desde 1994 y coautor del libro “Hacia un Nuevo Modelo Colombiano” escrito igualmente por Mariano Ospina Hernández, hijo del expresidente Mariano Ospina Pérez, gestor del genocidio contra el pueblo gaitanista a partir de 1946. Ospina Hernández posee en su casa un salón consagrado a coleccionar piezas del régimen nazi y de su orientador ideológico, Adolfo Hitler. Ha sido la única empresa lechera condecorada con la Cruz de Boyacá (ver fotografía en el inicio de este correo).
La opinión pública antioqueña – y altas personalidades del mundo político que me lo han confirmado – señalan al presidente de la Junta Directiva de Colanta, el señor Guillermo Gaviria, a quien afectuosamente llaman “el Negro Gaviria”, como instigador de la masacre de La Chinita, en la que a mediados de la década del noventa, en la región de Urabá en el departamento de Antioquia, fueron asesinados 36 campesinos militantes de izquierda. Varios ciudadanos señalados como miembros de las FARC fueron condenados a cerca de diez años de prisión, sin que la justicia les hubiera podido comprobar su participación en el crimen.
En el mapa de Colombia que aparece en cabeza de este correo se muestra en amarillo las zonas lecheras que conforman la cooperativa COLANTA. El gráfico se bajó de la página web de Colanta, el cual fue suprimido inmediatamente después de que hice la denuncia a través del canal 8 de Venezolana de Televisión en abril de 2004
El corredor que conforman las tierras cooperativizadas de Colanta, que comprenden los departamentos de Córdoba, Antioquia y Boyacá, fue construyéndose a partir de la década de los setenta. Fue entonces cuando se inició una fuerte campaña que propugnaba por la independencia de Colombia del departamento de Antioquia (como ahora en Venezuela se propugna por la independencia del Estado del Zulia).
En aquel momento en Colombia se buscaba separar el sector más desarrollado industrialmente a fin de conformar una barrera de contención para obligar a la guerrilla a concentrarse en el sur del país.
Un corredor estratégico
Haciendo pasar el oleoducto por las tierras de Colanta los soldados-campesinos (modalidad paramilitar) cuidarán el oleoducto, no habrá litigios con los dueños de la tierra porque el paramilitarismo no se opondrá y etc, etc,
Pero esas maniobras inescrupulosas nunca tienen buen fin. Si Chávez tiene una "estrategia" a mediano plazo, Uribe+Bush la tienen a largo plazo. Una
vez terminado el oleoducto se procederá a concretar la anunciada independencia del Estado del Zulia que, aliada a Colombia, constituirá un
emporio petrolero, el de mayores reservas del mundo, con salida al Caribe y al Pacífico y con desembocadura del oleoducto en cercanías del
programado canal Atrato-Truandó.
Moñona para los gringos. Sin necesidad de invasiones costosas, como la de Irak, dominarán el emporio petrolero más grande del mundo con
unasituación geográfica envidiable.
Ahora entiendo todo
Ahora entiendo muchas cosas. Todos mis proyectos bolivarianos en Venezuela, que comenzaban con gran entusiasmo por parte de los compañeros venezolanos, al poco tiempo se esfumaban. Los compañeros desaparecían, las simpatías se escondían tras el silencio y uno a uno los proyectos se frustraban. Quién sabe qué les dirían, pero el fondo era claro: mis denuncias sobre Colanta entorpecían el proyecto; mis denuncias sobre la penetración de los paras a la Disip eran MUY inoportunas; mis señalamiento sobre la presencia de una reconocida agente de inteligencia del ejército colombiano que se pasea, hasta hoy, como Pedro por su casa en el Palacio de Miraflores y en la Embajada de Colombia en Bogotá no podían ser más inoportunas, pues yo demostré, pruebas en mano, quees el enlace con los paras…
Estoy dispuesta a pagar las consecuencias.
Van a caerme carros y carretas encima (¡qué no me dirán!... o qué no me harán…)porque no guardé silencio cómplice, ya que bien sabido es que la única norma aceptada es la del cuento del “vestido del emperador”.
Pero el asunto es que yo soy colombiana y creo, además, que el pueblo tiene que conocer el trasfondode esos acuerdos de "alta política" que benefician a la macroeconomía de algunos poderosos en detrimento del pobre pueblo colombiano en manos del fascismo y que a la larga será también el desastre para el pueblo venezolano.
Cordialmente, GLORIA GAITÁN