La coherente política exterior Rusa (2)

Fortalecimiento de la paz y la seguridad internacional

Para mantener y reforzar la paz y la seguridad internacional, la Federación de Rusia se enfoca, entre otros artículos, en (Decreto N-229):

  1. El uso de medios pacíficos, especialmente la diplomacia, la negociación, la consulta, la mediación y los buenos oficios, para resolver disputas y conflictos internacionales, resolviéndolos sobre la base del respeto mutuo, el compromiso y el equilibrio de intereses legítimos

  2. La intensificación de los esfuerzos políticos y diplomáticos, encaminados a impedir el uso de la fuerza militar en violación de la carta de la ONU, especialmente los intentos de eludir las prerrogativas del Consejo de Seguridad de la ONU, y de violar las condiciones del ejercicio del derecho inmanente de legítima defensa, garantizado por el artículo 51 de la Carta de la ONU

  3. La federación de Rusia cree que, sus Fuerzas Armadas pueden ser utilizadas de acuerdo con los principios y normas universalmente reconocidos del derecho internacional, los tratados internacionales de la Federación de Rusia y su legislación. Rusia considera el artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas como un fundamento jurídico adecuado y no sujeto a revisión para el uso de la fuerza en legítima defensa. El empleo de las fuerzas armadas de la Federación de Rusia puede estar dirigido, entre otras cosas, a la ejecución de tareas para repeler y prevenir un ataque armado contra Rusia y/o sus aliados, resolver crisis, mantener o restablecer la paz, de acuerdo con una decisión del consejo de seguridad de la ONU.

 

En cuanto a prevenir y repeler un ataque armado contra Rusia, se exponen a continuación los argumentos del embajador ruso en Chile Sergéi N Koshkin, sobre las amenazas que se venían tejiendo desde el año 2014, desde Ucrania y la OTAN sobre Rusia, extraídos de su artículo "La guerra en Ucrania es de vieja data" publicado en el diario chileno El Mercurio.

Veamos una breve secuencia, el conflicto en Ucrania viene antes del 2014, pero es en este año cuando se desencadena en cuestión. El nacionalismo ucraniano radical se instaló en Kiev a raíz de un golpe de Estado, que derramó mucha sangre y donde se perdieron miles de vidas, en ese entonces se lanzó una fuerte ofensiva, contra la población civil del sureste de Ucrania, la población del Donbás rusoparlantes en su mayoría.

La fórmula acordada de paz en el 2015 entre Kiev y las repúblicas del Dombás, y consagradas en los acuerdos de Minsk aprobadas por el consejo de seguridad de la ONU, resultó ser solo una forma de tener tiempo para que Ucrania repotenciara sus capacidades militares.

Testimonios de estos objetivos han sido dados públicamente por Angela Merkel, ex canciller de Alemania, Petro Peroschenco mandatario de esos tiempos en Ucrania, y el expresidente francés François Hollande.

El verdadero objetivo final era arrasar a la península de Crimea, que se había integrado a la Federación de Rusia, en forma completamente democrática.

Al mismo tiempo, los países de la OTAN desplegaban sus bases militares y laboratorios biológicos secretos en las proximidades de las fronteras con Rusia, con entrenamiento y soporte militar constante para las fuerzas militares ucranianas.

Como ya se ha señalado las fuerzas armadas rusas pueden ser utilizadas para repeler y prevenir un ataque a Rusia, el propósito de la operación militar especial en Ucrania es defender el territorio de la Federación de Rusia.

Enfatiza el embajador Sergéi N Koshkin, que Moscú jamás ha rechazado una solución negociada del conflicto en Ucrania, siempre y cuando tales negociaciones sean bien intencionadas y serias.

Sin embargo, tanto Zelensky por Ucrania como los halcones de occidente que están por detrás, detestan la idea de paz, ellos insisten en seguir peleando hasta el último ucraniano.

Al confrontar los hechos con el nuevo concepto de la política exterior rusa, se revela que ninguna de las acciones de la nación de origen eslavo, está aislada, ninguna es espontánea, improvisada o emocional, todo el accionar ruso es apegado a sus leyes internas y respetuosas del derecho internacional.



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José F. Medina


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