Evidentemente no soy una connotada columnista afín al gobierno. Pero sí me considero afín al Gobierno Bolivariano, cuando lo presidía Hugo Chávez, y ahora que lo preside Nicolás Maduro, como deben haber percibido mis fieles y agudos lectores.

Luego de leer el artículo del Arado y el Mar, y sólo porque hablaba del bloqueo a Aporrea www.aporrea.org/medios-alternativos-y-comunitarios/a301695.html, me convenzo que hago muy bien en no leer los artículos de estos compañeros. Sin ánimos de ofender, considero que sus escritos destilan odio y más odio, sin conocer yo la historia pasada de ellos en la política, que de alguna forma debe haber llevado a tanta pasión en negativo.

No es mi idea analizar tanta denuncia que en tal artículo se molestan en hacer del gobierno actual, aprovechando la penosa situación del bloqueo a Aporrea.

Todos los que escribimos aquí en este portal debemos defenderlo, aunque sólo sea por agradecimiento de que nos publiquen todas nuestras reflexiones, buenas algunas, regulares muchas, malas. Y no sólo me refiero a las mías, sino la de todos los articulistas que aquí nos apoyamos esgrimiendo la libertad de expresión y nuestro íntimo deseo de comunicarnos.

No debo ser para nada una connotada articulista pues nadie me ha pedido dejar de publicar aquí, aunque soy afín al gobierno si bien con frecuencia uso un martillo de terciopelo como acertadamente un comentarista me hizo notar, en contraposición con su mandarria.

Entonces me pongo a pensar, según la acusación del arado y el mar, ¿quiénes son connotados, afines al gobierno, que han dejado de publicar?

De la única que recuerdo es Carola Chávez, muy leída en otros años, que no he visto más nunca asomarse por acá, y usa el portal de El Mazo Dando para sus interesantes y bien escritos artículos, con los que a veces me topo.

Por supuesto Mario Silva, pero esa es una historia que conocen todos y es mucho anterior.

De Elías Jaua, ya no sé decir si es afín o no a este gobierno. Escribía mucho por acá, y creo que sigue haciéndolo con menor frecuencia.

Sin embargo, siempre veo en la portada de los artículos más leídos, a Pasqualina Curcio, a María Alejandra Díaz, a Roberto Malaver, por ejemplo.

Siempre presente y consecuente en Aporrea observo a Dante Rivas con su columna semanal, quien, al contrario de los que aran en el mar, es optimista, esperanzador, trae buenas noticias, muestra su trabajo de hormiguita en cualquier cargo que le toque. Es un articulista muy afín al Gobierno, positivo, trabajador eficiente, y buen comunicador. A pesar de que la compañera Amaranta, con sus cotorras margariteñas, no parece gustarle este personaje que trabaja con amor por Margarita, y a veces lo usa como chivo expiatorio. Pero no veo títulos de ella interpelando y exigiéndole algo a la gran cotorra del gobernador actual, quien realmente no parece hacer nada por la isla, como comenté en otro artículo reciente.

También vi recientemente a Adán Chávez presentando un artículo, hermano de Hugo Chávez. ¿Será que es chavista y no simpatiza con Nicolás Maduro entonces? Por supuesto que no.

Y disculpen no afinar la lista ni aumentar el número de los afines que apoyamos al Gobierno del Presidente Maduro, aunque eso no signifique que se sienta mucha preocupación por el presente muy incierto, las agresiones continuadas y abiertas de los vecinos como Colombia, Guyana y Brasil, en nuestras fronteras. Ni signifique negar un montón de dudas que nos inquietan y nos bombardean.

Ser afín al Gobierno Bolivariano no significa la falta de angustia que se siente porque el imperio no cesará en su intento de tener a Venezuela de nuevo como su patio trasero, habiendo logrado grandes avances a costa de la miseria del venezolano.

Según el arado y el mar, los afines al Gobierno no somos chavistas socialistas, ni hombres justos (¿y las mujeres?), ni revolucionarios que deben luchar contra el fascismo del gobierno, y sólo le faltó escribir réeeeeegimeeeen, como el mejor escuálido y opositor promedio.

Apreciados lectores, con chavistas así, no necesitamos otros enemigos, y buscan el Final Feliz, el cual asegura, hace apenas tres días, Leonardo Padrón, novelista venezolano muy opositor, que es un final de novela que se aproxima muy pronto en Venezuela, según declaró en una entrevista en la televisión mayamera.

¿El bloqueo a Aporrea? Muy lamentable, no lo entiendo, me gustaría leer alguna declaración seria al respecto. Si en realidad es aplicado, como todo parece indicar, no me cabe la menor duda de que los frecuentes artículos del supuesto corrupto Rafael Ramírez, buscado hasta por la Interpol, y por diputados que han ido hasta Roma para solicitar la extradición, han sido la chispa que incendia la tolerancia.

Muchos han pasado, durante mucho tiempo, por Aporrea hablando pestes del gobierno, para mi gusto, demasiados, y nunca, hasta ahora, había visto en Aporrea esta evidente limitación.

Así como bastó para que Globovisión, y otro canal saliera de la parrilla de Simple Tv para volver a disfrutar de muchas otras opciones de televisión, ¿por qué Aporrea no rechaza los próximos artículos de Rafael Ramírez? ¿Estoy pidiendo una herejía?

Me pregunto, ¿Aporrea, en bien de la libertad de expresión, le daría la misma posibilidad a hipotéticos escritores como Juanito Alimaña? ¿A Julio Borges? ¿A Leopoldo López? Traidores que han robado, siguen robando, y le hacen un daño extremo a Venezuela.

Es sólo una pregunta, con mucho respeto por este portal de comunicación que, como coincido (en este punto apenas) con el arado y el mar, es un reflejo muy valioso de la batalla de argumentos de la época que nos ha tocado vivir durante esta gran Revolución Bolivariana.

Mis mejores deseos para que se solvente a la brevedad esta lamentable situación en Aporrea, de parte de una articulista, no connotada, pero afín al Gobierno Bolivariano. ¡Agradecida!