Conocía de Marcelino Bisbal que era un destacado y acucioso investigador de las comunicaciones de manera general y en particular de la televisión de nuestro país, con una obra escrita de muy alto valor, entre la cual destacamos estos libros: “La Industria de la Comunicación, una maquinaria en movimiento” (1980), “Nicaragua, un caso de agresión informativa” (1984), “La Comunicación Interrumpida” (1990), “La Mirada Comunicacional” (1994) y “Del Desacuerdo Comunicacional a la Comunicación Democrática” (l994). Este último título fue publicado por la editorial “Pablo de la Torriente”, de la Unión de Periodistas de Cuba, la cual fue creada en diciembre de 1985.
No he leído toda esa obra, pero de lo muy poco que de ella conozco, me ubicaba al autor entre aquellos intelectuales que tomaban en serio su trabajo y tanto era así que más allá de que se le conociera en el país como un intelectual del montón, se le tenía como un agudo investigador muy respetable, jamás dispuesto a lanzar opiniones y menos aún a juzgar actuaciones en el campo de las comunicaciones si antes no se lo indicaba el resultado de una previa investigación objetiva y desprejuiciada del caso que fuere, la cual él mismo dirigía.
Hoy, con mucha sorpresa, le escuché decir en el programa de la periodista Elizabeth Fuentes del canal Globovisión (Tremenda Fuente), ante la pregunta de la entrevistadora acerca de su opinión sobre el canal de servicio público Teves que veremos una vez salga del aire el canal de Marcel Granier, lo siguiente (palabras más, palabras menos): “que eso no va a servir para nada, simplemente por que quienes han sido designados para dirigirlo y ponerlo a funcionar son ignorantes en la materia y tanto es así mi convicción de lo que afirmo, Elizabeth, que siendo yo un experto de alta talla en la materia, no me atrevería a formar parte de un equipo promotor de una televisión de ese tipo”.
No creo necesario agregar comentario alguno ante estas palabras de un personaje que creíamos era un auténtico investigador con letra mayúscula. Como dice el dicho, da pena ajena repetir lo que ha afirmado ante la próxima inauguración de Teves, sobre lo cual nada podemos opinar mientras no conozcamos lo que será su programación y menos aún lo que sería su calidad audiovisual de forma integral.
Pero bueno, ya sabemos con estas palabras del Profesor Bisbal que la disociación psicótica también hace su agosto en esas esferas del “saber científico”, en donde él ha sido factor muy importante.
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