Pratkanis y Aronson (1994) señalan que el gobierno de los Estados Unidos tiene un gasto de 400 millones de dólares en la contratación de personal encargado de difundir propaganda favorable a los Estados Unidos. Se realizan 90 películas al año, 12 revistas en 22 idiomas y 800 horas de programación de la Voz de América en 37 idiomas, la cual cuenta con una audiencia estimada de 75 millones de oyentes.
La población norteamericana con una población respectiva del 6% de la población mundial consume el 57% de la publicidad mundial. Entre los que mas gastan en este rubro son los fabricantes con un monto estimado de 45.000 millones de dólares anuales en publicidad y más de 60.000 millones al año en diferentes promociones de productos.
La propaganda electoral es de los más altos, Ferrer (1976), señala que “El costo de las elecciones presidenciales norteamericanas, además de no sustraerse a los efectos inflacionarios, ha ido en constante ascenso. 150 millones de dólares, 1960; 200 millones, en 1964; 300 millones, en 1968; 400 millones, en 1972”.
Según los comentaristas políticos de EEUU la campaña política de John F. Kennedy requirió una aportación de 30 millones de dólares y a Rockefeller, en 1968 le costó 6 millones de dólares para gastos de infraestructura de campaña.
Todo ello sin contar con otros tipos de consumos publicitarios como los ejemplares de anuncios por correo, los que se realizan a través de llamadas telefónicas y otros, aproximadamente una de cada doce familias cuentan con un miembro que trabaja como vendedor.
En Internet existen más de 3000 periódicos y revistas de acceso libre y gratuito, asimismo, emisoras de radio y cadenas de televisión, que según Ramonet (1998) si la información que se ofrece es gratuita hay factores que explican entonces “el déficit de calidad: la espectacularidad y la búsqueda del sensacionalismo a toda costa”.
Se observan también figuras que siguen un modelo de página Web que
utilizan los colores que integran la bandera de Estados Unidos, asimismo,
existen juegos de propaganda política en internet llamado “Dodgeball”.
Entre los años 1950 y 1960 Estados Unidos perfeccionó la coordinación de todos los modernos medios técnicos de intimidación mental: televisión, radio, prensa, cine, publicidad, carteles.
Hoy día con la presidencia de George W. Bush su administración es
comparada con la de Richard M. Nixon no sólo por el secretismo, sino
por el esfuerzo al ataque constante e influencia sobre la radio, de
esta manera lo señala Barrera (2006).
La difusión en radio y televisión pública es controlada por la estructura de sistemas de difusión pública en Estados unidos, la CPB es una entidad privada sin fines de lucro establecida en 1967 y financiada por con fondos gubernamentales, así lo expone Barrera (2006: 23).
La CBP fue presentada como un ente indispensable, tiene una misión dual: destinada a impedir intereses partidistas o comerciales y controla los dineros públicos a manera de contribuciones, ayudas y otros brinda a entidades nacionales.
La CBP está estructurada así:
- PBS Sistema de Difusión Pública (Public Broadcasting System) conformada por 348 estaciones de televisión en los 50 Estados de EEUU, en la PBS no se crean programas de televisión ni señal centralizada. Barrera (2006).
- NPR Radio Pública Nacional, creada en 1971 está conformada por 800 emisoras de radio, ésta si crea programas.
Tanto la PBS y la NPR no tienen una adhesión específica de programación obligatoria por lo que se adquieren programas de otros medios de distribución como Radio Pública Internacional PRI y Radio Pública Americana (American Public Radio).
Estos híbridos de radio reciben fondos gubernamentales y depende de aportaciones monetarias privadas y que permiten el patrocinio de organismos por ser estas agrupaciones de radio sin fines de lucro, sin embargo, esto es “una forma velada de comercialismo” Barrera (2006: 26). Otro aspecto de control es la cantidad de programas que adquieren programas cómicos y británicos “que poco tienen que ver con las preocupaciones sociales del día”.
Estos medios radiales y televisivos son medios para promover cambios acordes a la ideología de Bush y no permitir la difusión de espacios alternativos no partidistas como por ejemplo el caso en Irak.
Los murales y las protestas también se manifiestan con la propaganda
en EEUU, como objeto de crítica contra las políticas de gobierno que
incluye la pobreza y el hambre dirigidas hacia el presidente George
Bush.
Más recientemente, se observa incluso, con una exagerada antelación de ocho meses el inicio de la campaña y propaganda política de Hillary Clinton, quien además es apoyada por diferentes personajes de la farándula norteamericana como Elizabeth Taylor. Se muestra una foto utilizada en afiches en la figura 56 y en la figura 57 y 58, uno de los spots “Hillary for the President” (00:36), ó “26 Days in Iraq” (00:53) que desde hace nueve meses se difunden en EEUU por TV e internet.
Según información extraída del periódico “elperiodico.com” Elizabeth Taylor dona 1.781 euros para la campaña de Hillary Clinton el cual versa así:
“La actriz estadounidense Elizabeth Taylor está decidida a apoyar a Hillary Clinton en su carrera presidencial y ha anunciado que le donará 1.781 euros, el máximo que permite la ley. Taylor ha declarado que le gusta la forma de pensar de la senadora por Nueva York. "Es una líder sensata e inteligente con años de experiencia en el Gobierno, la diplomacia y la política", ha comentado la actriz.
El anuncio se produjo en medio de conjeturas sobre si Hollywood
brindará a la senadora la misma acogida que a su esposo, Bill Clinton.
Steven Spielberg y otras personalidades influyentes de Los Ángeles
están organizando un acto de recaudación de fondos para Clinton para
los próximos meses” (tomado de http://www.elperiodico.com
Los principales contrincantes de Clinton en la contienda electoral presidenciales 2008 son Obama y John McCain, ambos son senadores.
El precio de la palabra política y la propaganda electoral de EEUU tiene una tabla de valores y costos que se identifica y define de múltiples modos. Que se mide a escalas inimaginables, que los ceros que se incluyen sobrepasan los dedos de las manos. Sólo sabemos que los bondadosos aportes de financistas inescrupulosos jamás aportarían tales cifras para el bienestar social de la comunidad estadounidense, que según datos oficiales del informe de Seguridad Alimentaria Hogareña del Departamento de Agricultura, 10,4 por ciento de los adultos en EEUU y 17,2% de los niños pasaron hambre en 2006. En este año había 36,5 millones de pobres.
"Estados Unidos es la única nación rica que se permite tener gente que pasa hambre en su territorio", dijo el presidente de la organización no gubernamental Pan para el Mundo, David Beckmann.
Que esto nos deje la reflexión para la acción.
Misión Adelante, La Información es del Pueblo.
castillojohanam@gmail.com