El gobierno del presidente Chavista Nicolás Maduro, puso el dedo en la llaga; lo dijo de manera reiterada, llamo a los empresarios a respetar las leyes y normas legales. La oligarquía menosprecia al presidente y en especial al pueblo, y quieren llevarnos a la “guerra de perros” todos contra todos, tal y como lo diseño la CIA y refrendado en Colombia, por el narcotraficante Uribe Vélez, JJ Rendón, Julio Borges, Corina Machado y Guillermo Aveledo; el viernes 8 de Noviembre, el gobierno se desplego en un operativo, de control sobre las empresas vendedoras de línea blanca y otros artefactos electrodomésticos y paso lo que todos suponíamos; no se trataba de simples especuladores, eran atracadores disfrazados de comerciantes, quienes obtenían ganancias por encima del MIL%.
De inmediato, las hienas del fascismo, se activaron en defensa de los atracadores; olvidando un pequeño detalle, que la mayoría de las víctimas de esos atracadores, son precisamente seguidores de la oposición, son familias de la clase media alta, quienes por cierto, deberán recibir la devolución del dinero, que les habían robado los financistas de la mafia amarilla. Es indudable, que estos operativos deben continuar y cuentan, con el apoyo de los venezolanos decentes, independientemente de su postura política.
Ahora el presidente chavista Nicolás Maduro y el alto gobierno, tienen otro reto en lo inmediato, que es revisarse hacia adentro, porque es indudable, que para realizar esa cadena de delitos, necesariamente contaron con la complicidad de funcionarios públicos; como se explica de que cobraban IVA, pero que estaban exceptuados y que paso con las cajas fiscales y las facturas, o es que acaso la gente del SENIAT, no tiene como tarea vigilar esas empresas, en especial las que reciben dólares, para importar bienes y servicios. Igual ocurre con CADIVI, como unas empresas de maletín, con capitales irrisorios, con domicilios particulares, pueden obtener millones de dólares y nadie supervisa. No olvidemos lo que ocurre con las mafias en los puertos y aeropuertos, se habla de secretarias y funcionarios de bajos ingresos, que hacen ostentación de carros de lujo y propiedades, que jamás podrán justificar con sus legítimos ingresos. Tengo confianza en que el gobierno, actuara en consecuencia, con firmeza ante la corrupción.
Es indudable, que existe un plan macabro de los fascistas, la oligarquía y con participación de factores extranjeros; pero también es inocultable, la existencia de una corrupción desaforada y anti patria y es por eso, que se necesita con urgencia un sacudón anticorrupción y sacar de los puestos claves a los infiltrados, que todos conocemos y quienes no pierden oportunidad de confabularse, con las mafias para hacer dinero y sabotear al gobierno.
