La derecha opositora venezolana, aliada subalterna del gobierno imperial de los Estados Unidos, en su propósito de derrocar la Revolución Bolivariana durante sus 16 años de ejercicio del Poder, ha utilizado todas las estrategias políticas legales e ilegales, violentas y pacíficas, armadas y no armadas, internas e internacionales y la combinación de varias de éstas formas de lucha, con las cuales alcanzaron importantes resultados como la Huelga Patronal-Sindical de 10 de Diciembre de 2000, el Golpe de Estado del 11 de Abril de 2002 que colocó en la presidencia a Ramón Carmona "El Breve", el Paro de la Meritocracia Petrolera durante el 6 de diciembre de 2002 hasta febrero 2003, la Campaña "Con Mi Hijo No te Metas"de 2007 para frenar el cambio del programa educativo, las acciones de calle mediática-estudiantil contra la no renovación de la licencia de Radio Caracas Televisión, la campaña contra la reforma constitucional socialista, el llamado presbicitario de las elecciones de 14 de Abril ganada por el Presidente Nicolas Maduro, La Guerra Económica, la estrategia de "La Salida" guarimbera y golpista de febrero-abril de 2014 y La Transición con Golpe Militar de Febrero ded 2015 pero, pese a los grandes recursos financieros internos y externos invertidos, el colossal apoyo mediatico nacional e internacional, el descarado apoyo político y diplomático de la derecha regional y mundial y en particular, de los gobierno de Estados Unidos de América, Canada, el Reino de España y Colombia.
La combinación de formas de lucha – y de organización – es una antiquísima estrategia de lucha política de la que la izquierda mundial y, de manera particular la de América Latina y el Caribe, tiene una larga experiencia, por su su enfrentamiento con los regímenes coloniales, neocoloniales y dictatoriales e, incluso, contra democracias represivas que ensangrentaron los pueblos de la región en nombre de unas libertades que nunca garantizaron ni respetaron y cuyos resultados fueron fueron contrarios al interior de sus impulsores, por cuanto los Estados, desconociendo derechos y garantías civiles y políticas o, suspendiendo total o parcialmernte su vigencia, lanzaron contra las organizaciones populares toda su saña criminal hasta destruir sus estructuras, eliminar y/o encarncelar sus dirigentes y militantes y forzar el exilio a muchos de sus simpatizantes.
En sentido contrario, el sector de la derecha fascista venezolana liderizado por Leopoldo López Mendoza, asumiendo como cierto que los gobiernos del Comandante Chávez y del actual Presidente Maduro, por razones de principios democráticos y por el contexto internacional y regional, no se atreverían a suspender las garantías del ejercicio de los Derechos Humanos y decretar Estados de Excepción, decidió romper con el núcleo politico burgués original de Prinero Justicia y luego del fracasar en su intento de infiltrar al partideo un Nuevo Tiermpo al ser expulsado Leopoldo López Mneoza, finalmente decidió, bajo el mando , utilizar la estrategia de "Combinación de Formas de Luchas y Organización" - aprovechando el regimen constitucional y legal de libertades y garantías existentes en el país - , para lo cual dispusieron la creación de un partido político legal con proyección nacional, al que nombraron Voluntad Popular, dotándolo de una dirigencia pública encabezada por el "demócrata" y "pacífico" Leopoldo López Mendoza, participando en los procesos electorales nacionales, regionales y locales, incorporandose a las instituciones del Estado y desarrollando una amplia cobertura mediática que le serviría como fundamento de su supuesta condición de proyecto politico democrático, mientras construian paralelamente un aparato clandestine para la acción violenta en las calles y de proselitismo y captación de miembros en el seno de las Fuerza Armada Nacional Bolivariana; proceso que duró no menos de ocho (6) años.
Las estructuras legales de Voluntad Popular fueron penetrando en areas populares de las grandes ciudadades del país, conectándose con niveles altos y medias de la oficialidad en situación de retiro de la fuerza armada e importantes líderes estudiantiles de Unicversidades Privadas y Públicas, para construir, en paralelo a la organización legal y pública, una estructura de violencia de calle y de ataque a la fuerza pública, en capacidad de desordenar el funcionamiento de ciudadades importantes del pais que pudiera operar como movilmiento protestario de caracter reivindicativo y politico, con el uso limitado de la violencia no armada, mientras se creaban las condiciones "objetivass y subjetivas" en la sociedad venezolan, que hicieran políticamente justificadas, el uso de dósis superiores de violencia, incluso de grupo armados de ataque directo a las fuerzas de seguridad y orden público, hasta llegado el momento en que, profundizada la "crisis de gobernabilidad", pudiese pasarse a un estadio superior de la lucha armada, combianada con una acción militar golpista que desembocara en un verdadero Golpe de Estado, como salida definitiva de la "crisis", en favor de la la oposición de derecha y sus mentores imperialistas y neocoloniales que los financian y apoyan.
En ese cuadro, Leopoldo Lopez Mendoza y los dirigentes "legales" de su partido Vanguardia Popular y sus dirigentes estudiantiles, no aparecerían directamente vinculados con acciones abiertamente golpistas y violentas y, sus declaraciones a los medios, siempre estarían en la estrecha frontera entre el respeto al orden democrático y el llamado a ejercer el Derecho a la Protesta, como SALIDA al "desorden" de la sociedad y la incapacidad del Estado para remediarlo, con base a los artículos 5 y 350 de la Constitución ( Soberanía Popular y Defensa de la Constitución), por cuanto había que evitar la ilegalización del partido y su salida del escenario legal y garantizar que Leopoldo López Mendoza y los otros dirigentes de Voluntad Popular siguieran apareciendo como luchadores por la "Democracia y La Libertad", tanto dentro como fuera del país, lo que favorecería los apoyos de los gobiernos, partidos, movimientos y personalidades de la derecha venezolana e internacional identificadas con el derrocamiento, "por cualquier vía", de la Revolución Bolivariana y su gobierno chavista y presentarse como el liderazgo hegemónico de la derecha venezolana con posibilidades de asumir la responsabilidad de un gobierno de TRANSICION.
Sin embargo, a Leopoldo López Mendoza, sus compañeros de Voluntad Popular y otros grupos e individualidades de la derecha golpista nacional, nuevamente subestimaron la capacidad y experiencia del nobel presidente pero trajinado dirigente político de izquierda, dirigente obrero, parlamentario, Canciller y Vicepresidente del Consejo de Ministro para Asuntos Políticos, Nicolás Maduro Moros quien, al igual que su último maestro, el Comandante Hugo Chávez Frías, supo decubrir la estrartegia subversiva de la derecha, resistir sus provocaciones cuasilegales y golpistas encubiertas y derrotarlos, con el pueblo y la Fuerza Armada y los cuerpos de seguridad, en un largo proceso cuyo trágico resultado fue de 43 personas fallecidas, más de 800 lesionados y cuantiosos daños a la economía nacional y al patrimonio del Estado y de los ciudadanos y las ciudadanas, después de tres meses de Guarimba.
Con la sentencia que le impuso a, Leopoldo López Mendoza la "escualida" pena de 13 años, 9 meses y 12 dias de prisión, se cierra un nuevo ciclo del conflicto politico abierto en Venezuela con la victoria electoral del Comandante Chávez el 6 de diciembre de 1999 y se inicia un nuevo camino también lleno de tensiones y confrontaciones, por cuanto la burguesía interna y sus partidos, todos subordinados a los dictados del imerialismo, seguirán intentando derrocar a la Revolución Bolivariana mediante el uso de medios anticonstitucionales e ilegales porque estan más que convencidos que no existen ni existiran condiciones favorable para derrotar a un gobierno popular, democrático, bolivarianao al servicio de la mayorías, utilizando el voto democrático de los ciudadanosa y las ciudadanas.
La derrota de la Salida y la Guarimba Violenta y La Transición Golpista promovida por el Jefe contrarevolucionario Leopoldo López Mendoza, representa una gran victoria política para las fuerzas democraticas, progresistas y revolucionarias defensoras de la Rebvolución Bolivariana, tanto por que a supuesto mantener las instituciones democráticas y continuar al frente del gobierno y de las institucionbes del Estado Venezolano, como por la contribución que ello supone a la continuidad de los cambios democráticos, soberanistas y de Justicia Social en America Latina y el Caribe y su proyección en las fuerzas antimperialistas del mundo.