Es bueno aclarar primero que todo que escribir un artículo o cualquier otra cosa en Maracaibo desde hace una semana se ha hecho bastante difícil, porque de las 24 horas del día, en los últimos cinco días, son casi 20 las horas de apagón que sufrimos en casi todas las parroquias de la ciudad, situación que se extiende a muchos municipios de la Costa Occidental del Lago. No sólo no tenemos luz en nuestras viviendas, sino que se hace cuesta arriba encontrar un cyber que cuente con luz y que tenga señal de internet.
El ministro de Corpoelec tiene meses, y creo que ya son años, justificando con supuestos sabotajes terroristas todas sus fallas de gestión al frente de la industria eléctrica venezolana. En el caso zuliano, han venido argumentando que supuestos actos terroristas de sabotaje han cortado el cable sub-lacustre, y ahora han ejecutado una acción destructiva en medio del Puente Rafael Urdaneta.
Pero todos estos pretendidos actos de sabotaje nunca han sido denunciados debidamente ante los órganos de la justicia venezolana, o por lo menos no se conoce ante la opinión pública que la fiscalía, el CICPC, tribunales de justicia u otro organismo adelanten investigaciones y explicaciones sobre dichos supuestos atentados, sobre quiénes integrarían esos "grupos terroristas", por donde se movilizaron para ejecutar el sabotaje, si contaron con complicidad interna, etc.
Es de resaltar que el Puente Rafael Urdaneta, que atraviesa el Lago de Maracaibo y tiene unos 8 kilómetros de longitud, está custodiado en ambos extremos por la Guardia Nacional y el Ejército. Las Pilas 21, 22 y 23, donde se produjo el incendio que cortó la luz a toda la costa occidental, se elevan como a 100 o más metros de altura sobre el lago, y para subir por allí se necesitaría llegar en lanchas y subir por cuerdas imitando al hombre araña. Es decir, debe haber sido un "grupo terrorista" altamente especializado y con equipos muy sofisticados para haber llegado hasta ese sitio. Para remate, el gobierno tampoco ha explicado que fue lo que hicieron allí los "terroristas" para generar el incendio.
Finalmente, tampoco explica el gobierno porqué estos supuestos terroristas malvados están tan interesados en dejar sin electricidad a Maracaibo, ciudad en la cual pese a que sus pobladores mantienen constantes protestas y luchas gremiales, sindicales y comunitarias ante el desmadre que el gobierno de Maduro ha generado en todos los ámbitos de la administración pública, no es una ciudad con el potencial insurreccional que si tiene Caracas y que se ha manifestado varias veces en los últimos 100 años. Además de que Caracas es el centro del poder político, y un corte de luz en Caracas tiene repercusiones inmediatas en la "marcha normal de la nación", como se demostró con el reciente apagón de muy pocas horas que vivió la capital.
Estos terroristas despistados que le quitan la luz a Maracaibo en vez de actuar contra Caracas, y que además son tan secretos y sofisticados que ningún órgano gubernamental pueden detenerlos y ni siquiera identificarlos. Creo que ese grupo terrorista se llama INCOMPETENCIA GERENCIAL y sus integrantes son el ministro, los viceministros y demás altos cargos del ministerio de energía eléctrica.
Una explicación dada por ingenieros que fueron de Corpoelec indica otras razones distintas al "sabotaje terrorista": Según ellos, dos líneas principales que provienen del Guri y atraviesan el Lago quedaron fuera de servicio desde la madrugada del viernes 10 de agosto. La línea de 400 kilovoltios, que atraviesa de forma elevada (cabrias) se dañó debido a la sobrecarga constante a la que era sometida y a la falta de mantenimiento. "Nadie cortó ese cable, se desprendió por la sobrecarga extrema a que se someten los autotransformadores tanto en El Tablazo como en Cuatricentenario, más la contaminación, más la falta de mantenimiento (falta de lavado de las líneas, monitoreo). El cable muestra que está deshilachado, lo que evidencia que se generó un punto caliente en el mismo y por la sobrecarga se termina cortando el cable. El problema está en que la línea al desprenderse hace contacto con la estructura metálica de la torre y saca la línea de servicio", explicó un ingeniero electricista, consultor de análisis de riesgos eléctricos.
Corpoelec mostró ese viernes en un mensaje de twitter una fotografía de la avería, en la que se aprecia la línea caída sobre una de las torres que están en el lago y que sostienen el cable.
El problema que terminó de colapsar el sistema eléctrico de Maracaibo es que la otra línea que importa energía desde el Sistema Interconectado Nacional, de 230 kilovoltios, quedó fuera de servicio luego de que el ministro Motta Domínguez ordenara reconectar el cable que atraviesa el Puente, obviando las sugerencias de los ingenieros de Corpoelec que recomendaban esperar una semana y poder terminar las pruebas. La falla ocurrió porque no se realizó un trabajo exhaustivo de revisión de todo el cable entre las subestaciones Punta Iguana II (Costa Oriental del Lago) y Puntica de Piedra (Costa Occidental del Lago). "Al comenzar el proceso de puesta en servicio, ocurre un corto circuito y las protecciones (sistema computarizado) que estaban mal calibradas ven la falla, pero su programación les hace pensar que la misma ocurre en otro sector alejado y no actúan, por lo que la falla continúa con todo su poderío causando severos daños al cable por más de cinco minutos. La energía que alimenta la falla es de 230 mil voltios, se produce el incendio en el Puente y eso derrite lo que sea".
De esta forma, los municipios de la Costa Occidental: Maracaibo, San Francisco, La Cañada, Mara, Guajira y Jesús Enrique Lossada, quedaron dependiendo de los casi 300 megavatios que producen las plantas Termozulia, Rafael Urdaneta y Ramón Laguna, que son insuficientes para una demanda calculada por el ministro en 1800 megavatios y cuyo 80 % es sólo de Maracaibo y San Francisco. La opción de importar energía desde Colombia fue inhabilitada por Corpoelec.
Es por estas fallas evidentes de la gestión de quienes dirigen Corpoelec que Maracaibo tiene un déficit de más del 80% de la energía que necesita. Los apagones casi permanentes parece que se extenderán en el tiempo, mientras la improvisación de Motta Domínguez termina de destruir lo que existe como sistema eléctrico en el Zulia. Renuncia, destitución, cualquier medida que haga que se vayan todos los incompetentes de Corpoelec, es lo que demanda toda la población de Maracaibo, San Francisco y municipios aledaños.
(escribiendo este artículo se fue la luz el martes 14, por más de 20 horas, y se volvió a ir el miércoles 15 en la mañana; vamos a buscar mañana jueves 16 un mecanismo para enviar el artículo a aporrea).