Los recientes acontecimientos de la propuesta de ley contra la piratería en Estados Unidos, levantó las alarmas de la comunidad internacional con respecto a la vulnerabilidad de los servicios de internet y su dependencia de las grandes potencias. Esto nos lleva a la pregunta fundamental ¿Quién controla internet?, su respuesta debe ser explicada desde una perspectiva histórica, técnica y política para entender los riesgos que corre nuestra sociedad inserta en las redes de telecomunicaciones.
Primero es necesario conocer que INTERNET aparece como un proyecto del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, sobre la necesidad de crear redes de comunicación que pudieran ser sólidas en momentos de enfrentarse a guerras convencionales o inclusive nucleares, de tal forma que como primer argumento de la concepción de una tecnología que no es neutra, evidentemente esta herramienta que nos ocupa a miles de millones de personas hoy en el mundo surge fundamentalmente como una estrategia militar, y en consecuencia no puede olvidarse que para sus creadores pese a la popularización de la herramienta actualmente esta sigue estando al servicio de esos mismo intereses.
Una vez analizado el contexto histórico-ideológico entramos ahora en la composición técnica de la red de redes, que posee millones de servidores interconectados a nivel mundial, pero que posee una gran organización que agrupa trece grandes servidores raíces para el registro de nombres de dominio, indispensables para la comunicación mundial, que recibe el nombre de ICANN (The Internet Corporation for Assigned Names and Numbers), adscrita al Departamento de Comercio de los Estados Unidos, con sede en este mismo país. En el caso venezolano, encontramos ejemplos como la Red Académica Nacional (REACCIUN) que como enlace destacado se encuentra la Universidad Internacional de Florida, de allí que gran parte del tráfico de nuestras redes de comunicaciones tengan necesariamente que pasar por lo servidores Estadounidenses.
Por otra parte para el Gobierno imperialista norteamericano no ha sido suficiente la implementación de legislaciones como la Ley Patriota, que coarta la libertad de expresión, vigilando las operaciones realizadas a través de las redes de telecomunicaciones, o las acusaciones que le han hecho sobre la vinculación de los organismos de seguridad con las redes sociales como Facebook; sino que además pretende atentar contra las modalidades de compartición de archivos e intercambio de datos de las comunidades virtuales, y de esta manera atentar contra lo establecido en la declaración de Naciones Unidas que proclama al INTERNET como un derecho humano.
Sin duda los medios privados nacionales e internacionales han prácticamente omitido el tema, cuando hace poco tiempo con una doble moral nos decían que el Estado Venezolano pretendía controlar internet, sin embargo vemos como son los mismos intereses imperiales quienes atentan contra la libertad mundial, el cinismo imperialista pretende darnos clases de moral: nos hablan de paz cuando son los que más invierten en armamento y mayor cantidad de guerras desarrollan en el mundo, nos hablan de libertad cuando ellos atentan contra ella permanentemente, nos quieren decir que controlamos los medios cuando ellos por la vía de la fuerza lo han hecho. Sin duda el debate está abierto; hoy los medios nacionales no se acercan a las oficinas del Estado Venezolano a preguntar sobre esta polémica ley como en su momento lo hicieron con la Ley Orgánica de Telecomunicaciones, allí uno puede ver toda la subjetividad del asunto.
“Stop SOPA+PIPA”. Lema popular.
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