La escalada guerrerista y terrorista impulsada por el gobierno de los EEUU y apoyada por la mayoría de las instituciones y corporaciones transnacionales de ese Estado, debe ser criticada y condenada por ser un acto criminal contra nuestros pueblos del Sur y peligrosamente dañino para la soberanía, independencia y libertad de no ser detenida en lo inmediato. Para luego es tarde. Una demora ingenua o consciente ante tal panorama costará millones de vida a la humanidad porque tal pareciera que el demonio de la violencia enmascarada se ha apoderado de la Casa Blanca.
El gobierno estadounidense está haciendo uso ilimitado de las informaciones que por la vía del espionaje cibernético obtiene de los restantes países del mundo, en especial de los que desea "torcerle el brazo", es decir, "cambiar al régimen", violando cuanta norma internacional se lo prohibe. En esa tarea no existe diferencia alguna entre "demócratas" y "republicanos". Ambos partidos son formados por fuerzas con intereses priorizados en diferentes regiones del mundo. Por ello, la política exterior es el resultado de acuerdos negociados en torno a dónde, cada quien, va a extraer las mayores ganancias y van a tener los menores obstáculos, y al menor costo posible.
No hay plena y extendida conciencia en nuestras sociedades de las herramientas empleadas por el Imperio en contra de los pueblos y de los fines que ellas persiguen. Los grandes medios transnacionales mantienen a la opinión pública engañada, escondiendo las evidencias injerencistas y exaltando las decisiones "bien intencionadas" del imperio, sea con noticias, comentarios, películas, novelas, comics, u otra vía de influencia ideológica.
Las decisiones de política exterior de las últimas semanas, anunciadas antes de dar a conocer la nueva doctrina de la Estrategia de Seguridad Nacional, son muestras fehacientes de la disposición del presidente estadounidense Barack Obama, de actuar ante sus interlocutores con demasiadas cartas ocultas, es decir, actuar fingiendo y falseando la realidad, con intenciones malsanas y ajenas al derecho internacional público. Unas veces saludando y encajando el puñal por la espalda, otras sonriendo y mostrando las fauces ensangrentadas por las víctimas de Libia, Siria y Ucrania, sin el menor recato.
Trisol condena la escalada inamistosa del gobierno y congreso estadounidense hacia Venezuela, donde el pueblo de Simón Bolívar y Hugo Chávez construye el sistema social más justo y en la más plena libertad, democracia y justicia que el pueblo venezolano haya tenido jamás. Ha utilizado contra el pueblo venezolano cuanta herramienta innoble y maligna haya usado un imperio para desestabilizar a otro gobierno, en este caso Popular por naturaleza, como es el venezolano.
Trisol alerta a los gobiernos progresistas de la Región ante la evidencia de que el Gobierno de EEUU esta utilizando a empresas contratistas militares norteamericanas, para generar conflictos de alta envergadura política como el intento de magnicidio, con la velada participación de la empresa Blackwater, develado el 12 de febrero de 2015 por el gobierno bolivariano de Venezuela. Hecho que generaría conflictos entre los pueblos de Venezuela y Colombia, con el subsecuente efecto divisionista en la CELAC, lo cual fue precedido por una visita de expresidentes reaccionarios que se prestan al juego de generar enemistades entre pueblos hermanos a cambio de favores inconfesables. Aunque Venezuela está blindada con su unidad cívico-militar ante las agresiones de EEUU, es injusto y contrario al derecho internacional someter al pueblo venezolano a las consecuencias criminales de las operaciones encubiertas estadounidenses.
Trisol denuncia una vez más ante el pueblo estadounidense que la Casa Blanca sigue enarbolando ideas y empleando medios que son todo lo contrario a los valores expuestos en aquella Declaración de Independencia de los Estados Unidos de 1776, y poco a poco está convirtiendo a ese país en una gran hacienda esclavista con foros romanos de diversión de las corporaciones globales para elevar sus fabulosas ganancias e incrementar cada día más la pobreza.
La escalada bélico-injerecista de Washington va encadenando a ese país para actuar en consonancia con los intereses de su pueblo y lo está aislando más de América Latina y el Caribe, tal y como quedará demostrado en la próxima Cumbre de las Américas en Panamá donde EEUU pretenderá dividir a la región, fragmentarla y hacerla inerme ante sus ataques a Venezuela, pero encontrará la verdadera resistencia bolivariana extendida por el continente, única forma de sobrevivir y no ser engullidos por el águila imperial.
Hacemos un llamado a los pueblos de Nuestra América, en particular a los perjudicados por las consecuencias de los TLC con EEUU y participantes en la Alianza del Pacífico (alianza de oligarquías vendepatrias), a estar alertas para exigirles a sus gobiernos la dignidad que deben tener ante los intentos imperiales estadounidenses de "divide y vencerás". Esos pueblos deben saber que el futuro de la humanidad está en la potencia del Sur irredento.
Nuestra Asociación denuncia los dictámenes extraterritoriales, las leyes injerencistas, los sobornos desestabilizadores y los chantajes para dar golpes de Estado desde las embajadas de EEUU por ser herramientas que están usando las fuerzas ultraconservadoras y las encubiertas con apoyo lacayo en nuestros países para imponer la voluntad imperial al precio que sea necesario, siempre que no sea pagado por los EEUU quien roba abiertamente los recursos financieros depositados en sus bancos o en aquéllos que controlan.
La Tricontinental de las Relaciones Internacionales y la Solidaridad condena la acción de los fondos buitres contra Argentina o el show en torno a la muerte del fiscal Nisman contra la presidenta Cristina Fernández, por ser dos herramientas, además de las empleadas para desestabilizar a Buenos Aires, usadas para "torcer el brazo" a las fuerzas independentistas y nacionalistas argentinas que desde hace cuatro o cinco años vienen fortaleciéndose con las relaciones bilaterales establecidas con China y Rusia, y que reducen la hegemonía gringa.
Y ello debe ser enfrentado con fuerzas colectivas antiimperialistas o nacionalistas, en un bloque tricontinental (Eurasia, América Latina y África) debido a que las corporaciones transnacionales financieras, mediáticas y militares estadounidenses se juntan y negocian para caer con mayor fuerza sobre nuestros países y convertirlos en sus víctimas. La Organización de Cooperación de Shanghai (OCS), el grupo BRICS, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), la Comunidad de Estados del África Meridional (SADC), la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y Unión Euro Asiática (UEA) tienen el reto de no permitir que más ningún país caiga en poder del imperio estadounidense y de la OTAN.
La multipolaridad, sin alguna coordinación global antimperialista, está siendo aprovechada por EEUU para dividir las fuerzas antihegemónicas. Por lo menos, la ausencia de un bloque intransigente soberanista, le está permitiendo a EEUU llevar a cabo esos planes basados en el smart power o poder inteligente con operaciones encubiertas en varios países desde 2008 hasta la fecha (Honduras, Paraguay, Cuba, Ucrania, Libia, Siria, Nigeria, Mali, Argentina, Venezuela, Bolivia, Ecuador, México, Guatemala, Nicaragua, Haití, Malasia, India, Paquistán, Irán y hasta en Dinamarca) que tienden a desestabilizar los proyectos progresistas o nacionalistas, "desgastándolos" día a día, buscando reducir la legitimidad y la credibilidad ante sus electores.
En tal sentido, Trisol hace un llamado mundial a cerrar las cuentas bancarias de ahorro o corrientes en bancos estadounidenses y en bancos sometidos a la hegemonía yanqui de esos países aliados (Canadá, España, Francia, Gran Bretaña, Australia, Corea del Sur, Alemania, Japón, Italia, Bélgica, Noruega) con gobiernos dispuestos a emprender guerras junto a EEUU, tal y como se demostró el pasado año en el intento del imperio de invadir a Siria.
La agresión imperial contra nuestros pueblos es militar, financiera y comunicacional, a tono con la naturaleza de su dominación y de sus desgastadas fuerzas para enfrentar el avance económico y tecnológico de China, Rusia, India, Brasil, Argentina o Irán. Y en esas tres vertientes el bloque soberanista tricontinental debe presentar sus proyectos de defensa integral ante el agresivo imperio. La unidad civico-militar ya es un principio compartido y en plena aplicación por varios pueblos, y contra ella no puede atentar con éxito el imperio estadounidense. Trisol exhorta a formarla o a fortalecerla en aquellos pueblos que así lo requieran.
Hoy más que nunca recuérdese al visionario Libertador Simón Bolívar y con él afirmemos hoy: los Estados Unidos parecen destinados por la providencia a plagar de miseria y muertes al mundo. ¡Detengámoslo!.
¡Hasta la Victoria Siempre!
LOS MIEMBROS DE LA TRICONTINENTAL DE LAS
RELACIONES INTERNACIONALES Y LA SOLIDARIDAD
18 de febrero de 2015
Miembros Fundadores: Ernesto Wong, Rodney Coronado, Thais Marrero, Jesús David Rojas, Pablo Barreto, Edilia Mata, Attilio Folliero, Francesco Misticoni, Coral Bujanda, Leonardo Heredia, Marianny Rosado, Soledad Silva, Efrem Cuberos, María Narea, Edelmira García, Carlos Revette, Mireya Otero, Omar Berroterán, Nulsy Parra, Jesús Millán, Miguel del Pozo, Marbelys Mavárez, Danilo Benedetti, María Páez., Ricardo Gil Salamé, Ezequiel Siem, Nahir Valentina, Víctor M. Quintero, Jesús Hernández, Pedro Arias, Myriam Otero, Adrian Figueroa, Brenda Ojeda, Ronny Velásquez, Micaela Ovelar, Susana Rodriguez, Yolanda Brito, Yurimar Longart, Jesús Vegas, Nereida Herrera, Moraima Manjares, Gaspar Velásquez, Dagmar Peña, Josefa Méndez, Andy Corrales, Amarilys Gutiérrez Graffe, Xiomara Barrios, Franklin González, Jhony Martínez Acosta, Juan Miranda Trejo, Liliane Blaser, Carlos Ellis, Alicce Sanabria, Suyin Marquez Inojosa, Franklin Silva, Matteo Carbonelli, Ana Maria Irausquin, Maria Alessandra Diaz, Renier Hernandez, Leonel Méndez, Angel Abreu, Juan González Linares, Alfredo Viloria, Percy Alvarado, Eva Golinger, Ingo Niebel, Roberto Márquez, Marisela Gonzalez Becerra, José Martínez, Félix Roque, Adriana Carranza, Oscar Sánchez, Willian Villarreal, Francisco Torrealba, Richard Vélez, Tony Ugarte, Ivette Manosalva, Aurelio Gil, Erika Castro, Ana Teresa Perez, Geovanni Vargas, Rafael Orellana, Jean-Guy Allard, Melaneo Betancourt, Roosvely Aguilar, Luis Vizcaíno, Pedro Torres, Gerardo Argote y Leonardo Ramos.
Miembros Honorarios: Fruto Vivas y Miguel Eduardo Rodríguez Torres.