Cuando fuimos pequeños, primero de corta edad, luego de mediana edad y finalmente nos daban el título de adolescente; siempre nos decían, cuidado que en la calle hay peligro, cuidado con los carros, pendientes del vuelto cuando de comprar se trataba; cuida el guante de pelota; no te distraigas cuando desconocidos te quieren hablar, en fin mil y unas formas de advertirte ante cualquier adversidad, de hecho lo recibíamos como protección.
Hoy día, son muchas las cosas que a las mencionadas o algunas de ellas habrían que agregar para el mismo grupo etario que mencionamos, por supuesto que la gran diferencia está en la presencia de la tecnología como activadora, motora, distorsionadora, moldeadora, activa y reactiva, lo que hace que se crezca en un mundo siempre en tiempo real, básicamente por la velocidad de la información y lo cambiante de las situaciones de un país a otro e inclusive de la zonas internas en un mismo país.
Estudios revelan en todas partes, que la situación del muchach@, hoy día es mucho más reveladora y el manejo de información pertinente o no es alimento para el accionar día a día, de allí, que en la mayoría de casos no necesitan o no requieren la advertencia desde lo interno de la casa donde habita con padres, hermanos, ti@s, etc.
Esta introducción tiene mucho que ver con lo que está pasando hoy día, en relación a la incorporación a la política de la juventud, hombres y mujeres y otros con un poquito de mayor edad, que creen por convencimiento de su condición social, inducción o ejemplos admitidos de figuras emblemáticas que han destacado en política, lo que prefigura lo que conocemos como militancia política. Al respecto y partamos de la ubicación que domina la escena social como lo es la ideología; hoy en el mundo la tendencia es general de la polarización, los sectores llamados ni ni o entre dos aguas o en el medio, cada vez más evidencian el desgaste que ello ha implicado, el ser y no ser, en el juego político no está dando dividendos, el caso de Europa en países como España, Portugal y la misma Italia, el proceso que se está dando reclama definiciones acerca del como ver el mundo actual y enfrentar el ya declive del capitalismo que no obstante estar en la otra acera del debate, aún tiene la fuerza para imponerse por vía electoral, a través de la compra venta de conciencias y el bombardeo incesante todas las horas del día, que irradian en la juventud ideas del éxito y progreso como sistema: efectivamente eso está ocurriendo en estos momentos en Venezuela y países con gobiernos progresistas. Reclutamiento por llamarlo de alguna manera a quienes se convierten luego en punta de lanza, frentes de lucha de los dirigentes derechistas, que aboga por la destrucción de todo legado sembrado en la conciencia de los pueblos, porque no se trata sólo de derrocar gobiernos democráticos sino de extirpar toda señal que represente conquista social y avance en la situación personal de quienes fueron otrora excluidos.
Es por todo ello, que debemos asumir responsable y militantemente el compromiso de sellar que toda fecha en esta lucha debe fijarse como de reconquista, restauración si se quiere, retoma, asunción de lo perdido aún por poco tiempo como sucedió en aquella fecha memorable para los pueblos del mundo y en especial de Latino América, y debe consignarse ante la historia como el regreso o la defensa de lo que significó el día trece de abril de dos mil dos (2002).
En ese espíritu de lucha, fraternidad, de elocuencia sublime por la soberanía, la verdadera libertad espiritual y material del alma y cuerpo; es que debemos estar al frente en la calle, enfrentando a la contra revolución y enemigos internos y externos, definitivamente debemos aceptar que el imperio norteamericano nos ha declarado la guerra y no cesa en su empeño, inclusive más allá de Obama. será de esta manera, lo que sin posiciones dubitativas e izquierdismos disimulados, debemos combatir por la obra de Bolívar y la memoria de Chávez.
