27 sept. 2017 - La nueva orden ejecutiva del presidente de EEUU contra Venezuela, aunque especifica restricción de entrar a ese país a ciertos funcionarios del gobierno, extiende su aplicación a cualquier venezolano, con o sin visa, lo que implica por la vía de los hechos un nuevo régimen para los viajeros.
La orden, que argumenta la falta de información sobre los ciudadanos venezolanos para efectos de la seguridad pública de EEUU, permite someter a venezolanos que ya poseen visa, a medidas adicionales al momento de ingresar a ese país, “para asegurar que la información del viajero permanezca vigente”.
La medida se extiende a quienes soliciten visa de negocios o turismo, que ahora deberán someterse a más exámenes y requisitos por parte del consulado.
La nueva circunstancia que ha impuesto Trump, y que tendrá efecto el próximo 18 de octubre, configura un nuevo cuadro de relaciones migratorias que afectarían de manera indirecta a la familia venezolana con miembros viviendo en ese país.
El decreto de Trump también incluye a Chad, Irán, Libia, Siria y Yemen, y responde claramente posiciones políticas de EEUU, que pretende presionar con ellos a los respectivos gobiernos, afectando directamente a los nacionales de cada país.
Desde el año pasado, y según reporte del diario El Nuevo Herald, se han presentado muchos casos de venezolanos que al intentar entrar como turistas a EEUU por el aeropuerto de Miami, y sospecharse de que pretenden inmigrar, han terminado tras las rejas, en algunos caso durante semanas.
Los medios venezolanos pro EEUU han informado deliberadamente que la medida solo afecta a funcionarios del Gobierno.
