La situación actual del país me obliga, más que escribir a denunciar públicamente como revolucionario serio, algunas cosas que vienen sucediendo y que por más que levantemos las banderas en son de advertencias, los que tienen el bastón de mando no quieren ni pretenden escuchar el clamor de un pueblo que no quiere que de verdad desaparezca el amor y el verdadero legado del comandante Chávez.
Lo que viene sucediendo con el tema económico es sumamente preocupante porque allí esta la vida del ciudadano común y del que anda a pies, en donde a diario nos conseguimos con dificultades para obtener algún producto de la cesta y necesidades básicas, como revolucionarios no podemos aun que quisiéramos oculta esa realidad, pudiésemos decir y afirmar que es motivo por la guerra económica, de muchos frentes o del imperio mismo, pero la realidad es que entre venezolanos nos estamos devorando uno con el otro. Ya todo eso lo sabemos y lo hemos vivido a diario, claro está quienes hacemos o acompañamos a nuestras pareja a realizar las respectivas compras del hogar sabemos mucho mas de estas calamidades que se vive al momento de querer obstar por algún producto básico.
Lo anteriormente descrito es lo que se vive en el tema económico nacional, ahora bien existe un tema que va en crecimiento y que viene desencadenado un mal mayor, entre los que producimos, laboramos o hacemos productos o bienes para la nación, me refiero a los que a diario realizamos la faena de 8 o más horas de trabajo y mantenemos lo poco o mucho de la productividad en el país.
Me refiero a la clase obrera, sobre todo a la revolucionaria que se encuentra en las distintas empresas [Pública o Privada], que vive una presión por parte de los representantes del patrono motivado a el problema económico que se vive en la actualidad y que muchos de estos representantes se vienen aprovechando de ir implementando el sicoterror, al punto de amenazar a la clase obrera con algunos Organismos de seguridad del Estado, catalogando al trabajador como saboteador u terrorista.
El pasado 20 de mayo del 2015, una vez más en nuestro complejo refinador del Palito sucedió lo que en varias oportunidades los trabajadores hemos denunciado que no es otra cosa que la delicada situación que se vive en nuestras plantas, ese día se cayeron todas las plantas y áreas administrativas, que por seguridad se tuvo que desalojar a la mayoría de los trabajadores cerca de las 9am, y 20 días después, específicamente el 8 de mayo, nuevamente sucede lo mismo en donde esta vez los organismo del estado se llevaron detenido a dos camaradas tildándolos como saboteadores.
E allí mi indignación y preocupación ya que esta acción se realizo mas por justificación que por investigación, debido a que estos camaradas en el transcurrir los años de revolución han demostrado ser leales al proceso, 100% entregado a sus trabajo y responsabilidades, al punto de que entraron al club que nosotros denominamos Los sin familias, los sin plata, los cachuo, porque le hemos dedicado todo nuestros tiempo y nuestra vida para mantener la producción a como dé lugar y en gran parte descuidamos a nuestros familiares.
Ahora bien estos camaradas detenidos y cualquiera que esté cerca del acontecimiento seremos ahora los supuestos responsables de la caída de las plantas, es decir, si se cae el Gurí, Planta Centro u otra ocurrencia no deseada, pagaremos los artesanos, operadores, mantenedores u otro trabajador que no sean de la alta gerencia… El Mundo al revés.
Los trabajadores Petroleros queremos decirle al ciudadano presidente obrerista, Nicolás Maduro, que los mismos que apoyamos al comandante Chávez para el rescate de la Industria petrolera en el 2002/2003, somos hoy en día los que estamos llevando el coñazo parejo de los que hoy dirigen a la empresa, aprovechándose del poder que tienen políticamente para execrar aquel o aquellos que nos les enfrentamos por que de verdad queremos a nuestra industria, pero tenga usted presente Camarada presidente, que su talón de Aquiles, somos los trabajadores. Los obreros, los artesanos etc, y desde hace rato la representación del patrono que según esta con el proceso, le está minando las áreas para terminar de concretar lo que usted y yo sabemos que no es otra cosa que la clase obrera se revele y allí si estaría el gran peligro de la revolución.
