El 16 de octubre de 2014 ha pasado a ser una fecha de reafirmación de la excelente política exterior de Venezuela, tras su elección para ocupar un escaño como miembro del Consejo de Seguridad de la ONU, en la calidad de No permanente. Junto a Chile el país de Bolívar y Chávez representarán a América Latina y El Caribe (Abya Yala) en el 2015.
La campaña para ingresar a este período (2015 – 2016),comenzó en 2007, cuando Hugo Chávez decidió que debíamos estar allí para convertirnos en protagonistas en los organismos ONU. Veníamos de una dura batalla contra el imperio en el 2006 que quiso imponerse, sin lograrlo. La Revolución Bolivariana ha estado triunfando nacional e internacionalmente siguiendo las reglas, y desde allí ha dado fundamentales iniciativas para las transformaciones en beneficio de los pueblos. La Revolución en estos años ha logrado afinar un cuerpo diplomático combativo, comprometido con la Patria y sus grandes objetivos históricos como el de la Pluripolaridad, salvar al planeta y la paz para vivir en bienestar. Nunca antes de 1999 la Cancillería Venezolana había puesto tan en alto el nombre del país y de los ideales de Bolívar. La nuevos mecanismos de integración, la derrota del ALCA, las nuevas relaciones con los pueblos del mundo, exitosas cumbres y un activo relacionamiento país a país son solo parte de este cumulo de éxito de la política internacional de Chávez y Maduro.
En 2015, la ONU cumplirá 70 años, con la preocupación y propósito vital de los países de Asia, África y Nuestra América de refundarla. Venezuela ha de jugar un papel importante junto a los países del Sur que esta vez lucen unido en torno al gran objetivo histórico de una Nueva ONU que se adapte a este nuevo mundo.
Si bien es cierto que es la quinta vez que Venezuela ingresa al Consejo de Seguridad, esta es diametralmente diferente. No responde a criterios de rotación ni a ingresar a un organismo para hacer comparsa sino al accionar continuo de un gobierno responsable de su papel en el mundo.
Lograr el respaldo del Grupo Latinoamericano y del Caribe atiende a una política constante y coherente, a los avances de esta Revolución. Alcanzar el espaldarazo de 181 países soberanos y plurales políticamente, significa el respeto a un pueblo y a un gobierno cuya voz y acción positiva se sienten en todo el mundo. Somos una Nación pluralmente respetada. Es una verdad irrefutable y grande como el tamaño del 99 % del Planeta tierra. negarlo es negarse a si mismo.