Independientemente de quien, cuando, y como defina la estrategia general desde el punto de vista político, ésta, no será efectiva, si quienes deben aplicarla en la practica cotidiana no captan su importancia capital. Las prioridades son el factor que dan la mayor o menor atención a los asuntos que nos deben ocupar. Por ejemplo: enfrentar las arremetidas del gobierno Norteamericano, como ejecutor de las tácticas de los monopolios, Sion judíos, que ven amenazada su hegemonía con las políticas independientes de naciones como . Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Argentina, Brasil y ahora Paraguay. El rompimiento del esquema de dominación en parte, es un peligro para quienes siempre han hecho lo que les daba la gana. De ahí su acción de pretender destruir todo vestigio de revolución o cambio en el continente. Más aun, cuando ese mal ejemplo (según éllos) se expande por el mundo, y les desenmascara sus mentiras y pantallerias de falsos demócratas.
En el momento actual, pese a los desacuerdos en algunas cosas internas en Venezuela y el PSUV, el criterio de fortalecernos ante el enemigo principal es asunto de estrategia para la supervivencia frente al enemigo común externo y sus serviles internos. Inevitablemente la lucha por la definición de lo que queremos internamente en lo político, social y moral habrá de llegar. Pero debemos tener paciencia hasta que las condiciones apropiadas se den. Mientras tanto enfilar la artillería hacia el principal objetivo y sus instrumentos, es asunto de primer orden.
A pesar de las diferencias, justificadas o no, con quienes hoy son candidatos a gobernaciones, alcaldías y asambleas legislativas. El principal asunto radica en no permitir que los instrumentos enemigos (la oposición) , tomen poder, tan siquiera en la más pequeña y remota región del país. De los manejos abusivos dentro del partido, nos encargaremos después, y por mas que quieran evadirse o seguir cometiendo ilícitos, será menos dificultoso aplicarles la contraloría social.
Luego del 23 N, el poder político, contralor y social de la base, tiene que presionar para que se legisle a fin que se le de carácter sancionatorio a sus resoluciones en asambleas. Los batallones y los Consejos Comunales( en concordancia). Deben tener poder, para -mediante mecanismos legales establecidos- poder levantar expedientes que, avalados por la fiscalía, tengan carácter promuevan la posibilidad de destitución de funcionarios, a quienes se les comprueben delitos, tráficos de influencia y malos manejos del erario publico.
Por ahora lo clave y, muy importante para fortalecer el proceso, es trabajar por obtener los triunfos de todos los candidatos a los diferentes cargos públicos (gústennos o no). La depuración y deslastre interno, vendrá luego. Este es el momento del PSUV, ES EL MOMENTO DE DEBILITAR AL ENEMIGO PRINCIPAL Y SUS LACAYOS. Para lo otro ya vendrá el momento. Y si se produce una rectificación de los avaros y ambiciosos secuestradores del poder político electoral del partido: será mejor y menos traumático. Pero de que hay que asumir la tarea de acabar esa practica corrupta, de repartición por el cogollo del capital del voto del pueblo, hay que acabarlo. Tampoco es que hay que esperar años. No, esa es tarea de meses o menos, luego del 23 N. p e r o, e s i n e v i t a b l e.
Ya son muchos los abusos de poder de los cogollos dentro del MVR, ayer y el PSUV, hoy por parte de los mismos personajes, quienes de manera fraudulenta, se confabularon para seguir secuestrando la organización y se han convertido en el principal obstáculo del cambio real en Venezuela. Si de verdad les queda o han tenido algo de revolucionarios: es mejor que se aparten por las buenas, por que de lo contrario los sacaremos desde las bases. Pero no les vamos a tolerar mas que sigan secuestrando los cambios revolucionarios. ya el pueblo se cansó que sigan traficando con sus necesidades y los vejen con bozales.
PATRIA SOCIALISMO O MUERTE… VENCEREMOS.
javiermonagasmaita@yahoo.es