Una de las cosas que debe a todos los revolucionarios combatir a muerte es el sectarismo y la exclusión. Digo esto, porque ciertamente con los incuestionables triunfos del 15 de agosto y del 31 de octubre de 2004, Venezuela cambió para siempre, y la contundencia de estos triunfos nos hace ser más eficientes y de aplicar con mayor fuerza los postulados contenidos en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Pero observo con profunda preocupación como factores del proceso revolucionario, no solamente como se ha tratado de catalogar de los partidos principales que dan piso político al proceso (MVR;PPT,PODEMOS,PCV,etc.) sino también, aunque parezca mentira, de diversos movimientos sociales que lo respaldan. Los revolucionarios verdaderos considero, nos declaramos enemigos de las practicas sectarias y excluyentes, prácticas que precisamente hicieron que partidos como Acción Democrática, COPEI, entre otros estén prácticamente liquidados del ámbito político venezolano. Por ello, le doy la razón a nuestro Presidente y máximo líder Hugo Chávez cuando dice: “No puede haber revolución sin ideología revolucionaria”. La ideología es importante como sistema de valores que permitirá crear la necesaria conciencia de un colectivo para defender, no solamente a Hugo Chávez como líder, sino al proceso revolucionario que vivimos en Venezuela y de dotarnos del conocimiento y los instrumentos desde el punto de vista político para evitar las desviaciones, las manipulaciones de los enemigos históricos de este proceso y sobre todo lograr la unidad necesaria para consolidarlo y dar “El Salto Adelante”no solo cuantitativo sino cualitativo en los próximos meses por venir. Ciertamente este proceso en sus primeras etapas fue un movimiento aluvional en donde se colaron muchos oportunistas que tanto daño le han hecho a este proceso y ciertamente aún quedan algunos, no lo podemos negar. Pero así como eso es negativo, también es negativo cuando trabajamos solamente para beneficiar nuestro grupo y excluimos no solamente a partidos políticos sino a movimientos sociales importantes y nos peleamos entre nosotros mismos, mientras que la contrarrevolución trabaja a la calladita para colarse por los palos y sabotear y tratar de enterrar nuestro proceso. Por ello, a través de estas líneas, me permito llamar a la unidad a todos los factores revolucionarios, desde mis amigos y camaradas del MVR, PPT, PODEMOS y demás partidos aliados, como de las UBES, patrullas, Círculos Bolivarianos, sindicatos y demás movimientos sociales. Esto no quiere decir que todos tengamos que pensar igual, ciertamente tendremos criterios y ópticas distintas del proceso revolucionario, pero debemos expresarlas en el marco del respeto y no perdiendo de vista los objetivos estratégicos de la Revolución. Profundicemos y tomemos en cuenta más nuestras coincidencias y respetémonos en las pocas diferencias que podamos tener. Me despido por ahora, con un pensamiento acorde con este mensaje de uno de los pilares de nuestra Revolución, como lo es Simón Bolívar, y ojalá este pensamiento cada uno de nosotros, que nos sentimos revolucionarios verdaderos los hagamos realidad: “Unámonos y seremos invencibles”. Un abrazo bolivariano y revolucionario y hasta la próxima.
* Abogado y miembro emisora comunitaria Llovizna 104.7 FM. J_martorano@hotmail.com, juan_martoranocastillo@yahoo.com.ar
