Leo con asombro en Aporrea un artículo de un sujeto llamado (¿apodado?) Leandro Lev http://www.aporrea.org/trabajadores/a143094.html que me ataca en forma cobarde y mentirosa. Por desinformación y ligereza, o por vil encargo, el embustero me atribuye una posición contraria a la organización de los trabajadores y llega al extremo de poner en mi boca palabras que no he dicho ni diría jamás.
Pongo por testigos a mis propios compañeros y compañeras de trabajo de Ciudad CCS. A éstos les consta que en diversas ocasiones los he invitado a organizarse no sólo en defensa de sus derechos laborales, sino para acompañar orgánicamente la batalla política que estamos obligados a dar en la construcción de una sociedad sin explotados ni explotadores.
En lo personal, además, me alegra sentirme uno más de ellos en la lucha, desgastante y decepcionante, pero inevitable, contra el burocratismo y otros vicios que lamentablemente se reproducen, como la hiedra, en la Administración Pública, donde viejas mañas se aparecen en nuevos rostros, con códigos que por desgracia no se llevó consigo la vieja meritocracia petrolera.
Aprovecho para felicitar a Aporrea por sus 10 años. Que a veces se cuelen francotiradores y sicarios entre sus articulistas es el costo de apostar a la participación del pueblo. Sigan adelante.
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