Le hicimos llegar en días pasados al recientemente inaugurado Defensor del Lector de El Nacional, nuestra molestia por la persistente conducta de ese diario en decir falsedades a granel, medias mentiras y hasta esconder realidades y verdades, sólo si éstas hablan bien de alguna gestión que adelanta el gobierno del presidente Chávez.



Su diseño informativo y de opinión está marcado abierta y descaradamente por el deliberado propósito de desestabilizar las instituciones del Estado, pintando un país que está yéndose por el despeñadero, es decir, una Venezuela que ha sido despojada de los altos valores morales, culturales y sociales que le infundieron los prohombres de la democracia puntofijista a lo largo de más cuarenta años, por culpa de una sarta de incapaces y degenerados chavistas cargados de la mayor maldad, dentro de la estrategia inocultable de procurar el derrocamiento del gobierno bolivariano, por cualquier vía. No hay que olvidar que el golpe del Estado de abril/02, así como el paro terrorista y fascista de diciembre del mismo año y febrero del 2003, contaron con su respaldo más absoluto, lo cual lo signa con broche de oro en su editorial del 13/04/02, luego de que se auto juramentó Carmona Estanga como presidente de lo que, entonces, se dijo que era el gobierno de la transición a la “democracia” y, con ello, el retorno a los tiempos en que los venezolanos nos amábamos todos y lo que respirábamos era felicidad inacabable en cualquier rincón de la patria.



Son innumerables los casos que pudiéramos relacionar para comprobar lo que afirmamos, pero creemos que no hace falta, pues allí están las bien dotadas hemerotecas públicas para hacer esa constatación y la propia labor maravillosa que adelanta el Observatorio Global de Medios, Capítulo Venezuela, bajo el funcionamiento de experimentados y muy honorables periodistas venezolanos, a través de su página www.observatoriodemedios.org. ve



Pero veamos el mensaje que le hicimos llegar al licenciado Lucio Segovia, quien es el profesional que ha asumido en fecha reciente el papel de Defensor del Lector en el diario de Puerto Escondido, en donde el tema que le abordamos fue PDVSA y la venta de sus crudos a través de internet, así como le resaltamos, igualmente, esa misma conducta deplorable que tiene el medio de afirmar lo que no es cierto en sus primeras páginas y carecer de un mínimo de honestidad para reconocer que se equivoca cuando ello ocurre, publicando en la misma primera página las respectivas aclaratorias, para de esa manera saldar la falla fundamentalmente con sus lectores y, luego, con la misma empresa PDVSA, la cual desmintió al día siguiente que vendiera sus crudos a través de red, desmentido ese que sólo lo divulgaron, que sepamos, los medios de comunicación del Estado y, obviamente, los alternativos que respaldan este proceso revolucionarios de cambios que vive nuestro país:


Estimado Defensor:

Le saludo con la mayor cordialidad y le deseo el mayor éxito al frente de tan importante tarea que ha asumido en fecha reciente.

Me le acerco con esta observación que evidencia una clara política de ese diario de hacerse el loco cuando debe aclarar sobre las falsas noticias que publica y más aún si éstas desdicen o malponen al gobierno de Hugo Chávez, dentro de la táctica de atacarlo por todos los flancos de manera de socavar sus bases y por allí intentar derrocarlo. Un estrategia que mantiene inmodificable desde que apoyó y se regocijó con la juramentación de Carmona aquél funesto 11 de abril/02 (por favor, lo invito a que vuelva a leer la edición del día 13 de abril/02, la que, por cierto, es parte de mi colección que bien protejo).

Vea esta perla, lo cual no se corresponde con algo esporádico, sino que es persistente:

En la edición del 16/05/05 publica en primera página la noticia siguiente, Crudo venezolano sigue en oferta en portales de internet, como una confirmación de la información que publicó en la misma primera página de la edición del día anterior, bajo el título, Petróleo venezolano se vende por internet con precios de descuento.

Sigue luego el texto de la noticia sin dejar de asegurar que PDVSA usa la red para negociar sus crudos e igualmente deja traslucir la idea de que hay en eso corrupción al mayor, pues resalta que "observadores" (expertos ?) han asegurado que para perfeccionar negociaciones por esa vía se requiere la complicidad de altos ejecutivos de la empresa...(?)

Pues bien, al día siguiente, es decir el 17/05 PDVSA negó que realiza operaciones con sus crudos a través de internet y El Nacional del día 18/05, el gran diario que fundó Miguel Otero Silva, parece mentira (...!), hizo mutis, pues en su primera página de esa edición nada apareció de ese desmentido de la más importante empresa de todos los venezolanos.

¿Cómo se puede calificar eso?
¿No es acaso un falta grave a la ética?
¿No es eso un claro desequilibrio informativo sobre la base de la mentira, que es mucho más grave?
¿Dónde está la veracidad y donde queda el compromiso con los lectores?

Le reitero, mi estimado Defensor, que estas son cosas que suceden todos los días, desde que sus dueños y jefes editoriales optaron por transformar el periódico en un instrumento al servicio de una política de indecencias y saturada de las mayores iniquidades.