Antes de comenzar este intercambio cibernético, reciba usted un fraterno y revolucionario saludo bolivariano.
Quién suscribe, militante a tiempo completo de este inédito proceso de cambio reflejado en la construcción de un nuevo modelo de país más justo, igualitario y de un infinito humanismo, se dirige en este acto a usted, para plantearle un problema que me atañe en forma directa por la rigidez e inflexibilidad como castiga el ente que usted tan dignamente dirige en la toma de decisiones, sin medir la cuantía de hechos irregulares muchas veces ínfimo el daño que se puede incurrir en el erario nacional.
En enero del presente año, recibí una invitación de un grupo de estudiantes venezolanos quienes están estudiando en Rusia entre ellos mi hijo Miguel Ángel Maregatti Álvarez, quien cursa un postgrado en el área del petróleo y gas. La intención de esta visita es llevar el mensaje bolivariano de la revolución que estamos transitando, un análisis de la coyuntura nacional y las posibilidades ciertas y seguras de la reelección del comandante presidente Hugo Chávez.
Debo destacar que esta visita no tiene ningún apoyo de los entes gubernamentales, son recursos de mi propio peculio y el deseo inconmensurable de predicar el mensaje de nuestro líder.
La odisea que estoy viviendo con CADIVI es que me ha penalizado por un año por el exceso de US$ 10,46 por una compra electrónica por un engaño de una empresa de telecomunicaciones (llamada telefónica) la cual se me ofreció gratuitamente para luego ser cargada en mi tarjeta como consumo, siendo burlado en mi buena fe. Según mi operador cambiario este pago se reflejó el 12.01.2012, luego mi esposa me solicitó la tarjeta para comprar unos accesorios científicos para el laboratorio donde ella ejerce, dependencia estadal, compra que realizó por una necesidad urgente que aún estaría esperando debido a la burocracia y el burocratismo existente en algunas dependencias del Estado.
Esta compra está reflejada el 17.01.2012 y fue algo más de trescientos dólares llegando a un gran total de US$ 410,46., mi pregunta estimado compatriota Barroso: ¿el sistema no bloquea cuando la compra excede a lo autorizado que son US$ 400,00? Usted cree que existe dolo, o la cuantía de la irregularidad no me puede dar derecho a un acto de gracia de su parte, incomparable con tantos banqueros bandidos que se han llevado miles de dólares y han cometido hechos abominables por todos conocidos. Por todo esto expuesto apreciado compatriota, apelo a su sabiduría y buenos oficios y me dé la oportunidad de ir hablar de la nobleza de esta revolución a esos muchachos venezolanos y latinos quienes me están esperando.-