Me pondría la braga, casco y lente y me programaría para ir a cada una de las áreas de trabajo y escucharía a mis trabajadores y haría lo imposible y lo posible para que ellos en su estadía en nuestra industria fuesen más amena, les daría respuesta viable.
Realizaría cada quince días, asambleas generales con mis trabajadores para oír sus planteamientos ya sea en el plano laboral como en las mejoras de la producción de las planta, escucharía las nuevas ideas para optimizar las labores y estimularía a mis trabajadores.
El 2% del aporte de las contratistas o cooperativas que laboran en nuestras industrias y que lo dan como aporte para las ayudas sociales, crearía un pote de ayuda solidaria para mis trabajadores para ayudarlos en los momentos difíciles como por ejemplo; cuando se nos muere un familiar o por un familiar enfermo, ¿o a caso que los trabajadores y nuestras familias no somos también pueblo?, aclaro, no es que nosotros queramos que nos lo den todo , sino que ese aporte es para que el trabajador pueda solventar su penosa situación.
Con los buenos contactos que tengo buscaría unos convenios con las redes distribuidoras de alimentos del gobierno y le crearía a los trabajadores semanalmente un mercado a cielo abierto para que los trabajadores y sus familiares compren a buenos precios las necesidades básica de sus hogares, sin restricciones ni con ventajismo Balurdos.
buscaría con los bancos del gobierno acuerdos para créditos, ya sea para la compra de carros particulares o de trabajos pesados (camionetas, camiones, etc.), así como para que mis trabajadores inviertan en un negocio rentable, que pueda ayudar a su entorno familiar y a las comunidades en sí, ejemplo charcutería, panadería, librería, etc., total ese dinero prestado el trabajador lo pagara con sus sueldo y de lo que pueda producir en el posible negocio que creara, y le estaríamos dando productividad segura a la inversión solicitada.
Estoy casi seguro mis queridos lectores, que alguno por lo menos de los representantes de los directores o gerentes me va a criticar, ¿por qué no lucho para que todo lo que describo se cumplan?, pero aclaro; que en lo que describo digo textualmente “si yo fuese un director o gerente de una empresa del Estado creyente en el socialismo”, claro está, mis queridos camaradas que socialista ya soy, me faltaría tener el cargo de director gerente y aplicar lo descrito y por ser crítico, el cargo de gerente nunca me lo darían, pero alguien tiene que dar el primer paso o es que no aprendimos nada del gran maestro, quien fuese en vida El Comandante Chávez ¿?.
