En el documento titulado: REDES hace públicas sus reflexiones colectivas acerca de las postulaciones de candidatos a los consejos legislativos regionales, publicado en el diario VEA pág. 7 del sábado 11 de agosto de 2012, esta organización a través de su equipo de enlace nacional manifiesta una posición por lo demás interesante, destacando fundamentalmente su carácter colectivo de funcionamiento, que acata la línea que sube el movimiento popular luego del ejercicio cotidiano de la democracia directa, destacan sus deseos para que en el Polo Patriótico no exista ningún criterio excluyente o mezquino, que se escuche el clamor de las bases, exhortan a que no se repitan los mismos errores del pasado que tanto daño han causado, y aseveran que cuando el fin justifica los medios, el grande secuestra las decisiones, se traga al más pequeño imponiéndole sus pautas y obligándole a subordinarse por la fuerza triturando el principio de igualdad y respeto mutuo que debe privar entre los revolucionarios imponiéndose la doctrina del acuerdo mutuo y el “Agarrando aunque sea fallo”. Cuando esto ocurre, alegan en el documento publicado, casi siempre el pueblo queda afuera y no son tomados en cuenta los verdaderos líderes de las comunidades y aquellas organizaciones con trabajo orgánico en las bases del pueblo son desechadas a favor de pactos burocráticos y cupulares dando un triste espectáculo.
De acuerdo a Juan Barreto -Fundador y Dirigente de REDES- en su artículo La multitud ¿sujeto Revolucionario? Lenin dijo: “…El partido debe prefigurar a la sociedad que queremos. Cuando los intereses de las masas choquen con el horizonte cerrado de la partidización, debemos optar por las masas…http://www.aporrea.org/
A todas estas lo lamentable es que hoy día, transcurrido un año del pronunciamiento público arriba señalado, cuando REDES germinaba como la alternativa orgánica-horizontal al verticalismo, con las elecciones Municipales para el 8D se tira por la borda la teoría pregonada, hasta el punto que no permitieron a sus responsables locales la inscripción de candidaturas provenientes de “la Multitud” en diferentes Estados y Municipios del país mediante el bloqueo de claves electrónicas desde Caracas necesarias para acceder al sistema del CNE.
