Como dice "Santa" María Corina, los venezolanos queremos vivir en una democracia donde la mayoría sea verdaderamente la reina. Nosotros amamos la libertad de poder decidir nuestro futuro colectiva y mayoritariamente. Objetamos los deseos egoístas e interesados de los mal llamados líderes de la macilenta minoría.
Los venezolanos queremos la paz que produce del respeto a las leyes y a las autoridades. Aceptamos la realidad de que en política hay una mayoría y una minoría. Creemos en la transparencia de los resultados electorales que desde 1998 han reflejado consistentemente el tamaño real de ambas tendencias políticas. Por la tanto, creemos en la claridad de las reglas de juego.
Por eso, nosotros los venezolanos, angustiados y cansados por la orquestada "situación" política que de nuevo se avecina, no queremos permanecer indiferentes ni cruzados de brazos ante tal adversidad. Por tal motivo aceptamos el llamado de Súmate, con unas palabras mas por aquí y unas palabras menos por allá.
Todos los venezolanos que quieren que continúe la transparencia y la verdad, a encontrarnos y unirnos el próximo domingo 4 de diciembre en nuestros templos e iglesias en las misas o cultos que tengan lugar en el horario más cercano al mediodía.
Y luego, o antes si lo desea, ¡a votar por la paz y la democracia!
En graves momentos de la historia, las Iglesias han sido el lugar de encuentro, el refugio de los perseguidos, de los humildes, de quienes luchan por la libertad. Sin distingos de credos o ideologías, en esta nueva jornada de lucha por la libertad vayamos todos, familia, vecinos, amigos, y unidos demostremos a nosotros mismos y al resto del mundo, que a los venezolanos sí nos importa la justicia, la transparencia, la verdad y la paz, y que trabajamos por conseguirlas.
El domingo 4 de diciembre, ¡Levantemos nuestra voz en toda Venezuela!
Recemos y votemos, o viceversa. Compatriotas, llegó la hora de matar la culebra por la cabeza. Venezuela debe seguir su camino. Ya es hora de echar a un lado la carga que estorba, el peso inútil e innecesario. Esta es nuestra gran oportunidad para enterrar de una vez por todas a los cadáveres putrefactos de nuestro tristemente célebre pasado político.
Nosotros si creemos en la cristiana justicia de darle oportunidades a los mas necesitados. Por eso damos gracias al Señor, y a "Santa" Maria Corina por recordarnos de su existencia. Ante Dios TODOS somos ciudadanos. Recemos y votemos. Votemos y recemos.
La oposición de nuevo se "retira" de Venezuela. El pueblo no. Esta vez es cuestión de vida o muerte y ellos ya están muertos...
¡A votar! ¡Por la vida!
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