Luego de ya bastante tiempo de Golpe de Estado, en grado de frustración podríamos decir, se ha demostrado que la frase “hoy tenemos Patria” que lanzó nuestro Comandante Chávez aquel 8 de diciembre es bastante más que el sentido burlesco que han pretendido darle la burguesía y sus desclasados apoyadores. En efecto, las diversas manifestaciones golpistas, llámese guerra económica en cualquiera de sus expresiones; o guerra internacional, hasta llegar a las extremistas guarimbas; se han tropezado con ese muro que llamamos la Patria, esto es, con un pueblo empoderado y consciente del poder; hecho gobierno popular; alimentado y consolidado desde el punto de vista ideológico, además de muchos otros factores que develan que nuestro Líder eterno estaba en lo cierto.
A este respecto, es conveniente analizar un poco el papel del Poder Popular y dentro de éste el de la Comuna en la contraofensiva Revolucionaria que necesariamente debe seguir a las acciones de la Derecha. En este marco, comencemos a entender que las diversas instancias del Poder Popular son el verdadero Gobierno en el futuro inmediato, las grandes generadoras de los cambios por los que día a día luchamos; por tanto, un Golpe de Estado es en realidad un Golpe contra la Comuna, no lo perdamos de vista.
De esta forma, es hora que el pueblo organizado, acompañado por el Estado y las fuerzas de la Revolución, maximice y priorice sus esfuerzos en la construcción así como la consolidación del Estado Comunal. Alguno podría preguntarse acerca de los efectos prácticos de ello para frenar las actividad conspirativa. La respuesta es sencilla: La Comuna es la gran instancia que va a permitir al pueblo empoderarse verdaderamente de los modos y medios de producción, satisfaciendo de este modo sus necesidades básicas lo que produce independencia total de la actividad burguesa y por tanto el logro de la Soberanía plena.
En este sentido, cualquiera podría pensar que se trata de una utopía, que son metas que en todo caso son para el largo plazo y que concentrar esfuerzos en las mismas sería debilitar los flancos antigolpistas, nada más alejado de la realidad. Hoy día, la actividad del Poder Constituyente del Pueblo que como mil veces nos lo repitió Chávez debe ser permanente, se verifica como la fuerza que debe irrumpir en la realidad nacional como el gran paso hacia la construcción del Socialismo Chavista que tanto pide el pueblo.
Por ello, el fortalecimiento del Poder Popular, en especial desde el punto de vista económico es parte fundamental de la ecuación antigolpista ya que permitiría una población con mayores niveles de respuesta ante cualquier escalada contra la Patria. He allí la importancia capital de la Comuna.
Dentro de la realidad actual, debemos entender que quienes activan y desarrollan el proceso productivo nacional son las trabajadoras y los trabajadores de la Patria, los burgueses sólo se dedican a aprovecharse del trabajo del pueblo, quedándose con las ganancias de aquello que no han trabajado. Por tanto, es imperativo que el pueblo y la Revolución asumamos de una vez por todas la direccionalidad, así como el aprovechamiento de la producción nacional.
Desde esta perspectiva, se impone la consolidación organizativa, así como la inserción inmediata en el aparato productivo a través de la verdadera explotación de las potencialidades de cada una. En este orden, la creación, recuperación, consolidación o potenciación de unidades productivas de propiedad social permitirá al pueblo ocupar espacios vitales en la construcción de un sistema económico inmune a los deseos y directrices burguesas trasncacionales.
Es así como el Estado debe activar los mecanismos de organización, concientización, formación y financiamiento para el logro de estas metas en el menor tiempo posible, dándole la prioridad que en los actuales momentos requiere esta materia. Además, es hora de que el Poder Popular tome los espacios productivos de la misma forma en que lo hizo con el político, ocupando los espacios de dirección al tiempo que conformó las diversas instancias de autogobierno, en especial los consejos comunales.
Hoy es el día del Pueblo, es el momento de dar los pasos definitorios del futuro de la Patria. Nuestros hijos reclaman una herencia de Paz, Prosperidad y Soberanía (así con mayúsculas). Ese legado sólo lo podremos lograr en la medida que sigamos el que Chávez nos dejó, construyendo juntos el verdadero Estado Comunal.