La ingratitud es el crimen más grande que pueden los hombres atreverse a cometer (XXI)

El agente norteamericano, John Baptist Irvine, encargado por el gobierno norteamericano para le reclame a Simón Bolívar por la incautación de 2 naves, Tigre y Libertad, se ve en la necesidad de solo escribir a Bolívar, por cuanto el Libertador no lo recibe, en correspondencia por cuanto 2 enviados suyos a Washington D.C. no fueron recibidos por el presidente gringo. Míster Irvine envía varias cartas, una de ellas, fechada el 1º de octubre de 1818, le dice a Bolívar que Venezuela en los casos de las goletas Tigre y Libertad ha actuado ilegalmente. Bolívar le responde por escrito el día 7 del mismo mes y le escribe que va a desentender del penúltimo párrafo de la carta de Irvine por considerarla "en extremo chocante e injurioso al gobierno de Venezuela" y que para ello sería preciso usar el mismo lenguaje "contrario a la modestia y el decoro con que por mi parte he conducido la cuestión" También le dice, que no va a forzarlo a reciprocar los insultos, pero que aunque no lo hará, no va a permitir que, "ultraje ni desprecie al Gobierno y a los derechos de Venezuela" y finaliza la carta con unas palabras contundentes: "Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero, si todo el mundo la ofende" No obstante lo fuerte de la contestación al Agente estadounidense, Bolívar se despide con los usos protocolares de su elevada investidura, el respeto, la decencia y la alta responsabilidad que tiene al regir los destinos de Venezuela y su alta dignidad ganada en el escenario internacional. Ahora sigamos con sus fabulosos pensamientos en orden alfabético y continuemos con la letra L.

L

"La guerra civil se alimenta del despotismo y no se hace por el amor a Dios"

"La guerra es mi elemento, los peligros mi gloria"

"La guerra no vive de actos de violencia y de destrucción: no se hace por el amor de Dios"

"La guerra ofensiva no da espera después del primer triunfo"

"La historia de los infortunios y errores de la América es elocuente para los que saben leerla"

"La historia, que enseña todas las cosas, ofrece maravillosos ejemplos de la grande veneración que han inspirado en todos los tiempos los varones fuertes que, sobreponiéndose a todos los riesgos, han mantenido la dignidad de su carácter delante los más fieros conquistadores y aun pisando los umbrales del templo de la muerte"

"La igualdad no es lo más conforme con la obediencia"

"La imprenta es tan útil como los pertrechos y ella es la artillería del pensamiento"

"La impunidad de los delitos hace que éstos se cometan con más frecuencia, y al fin llega el caso de que el castigo no basta para reprimirlos"

"La ingratitud es el crimen más grande que pueden los hombres atreverse a cometer"

"La ingratitud me tiene aniquilado el espíritu habiéndolo privado de todos los resortes de acción. Si quieren mi vida, aquí la tienen, pero no mis servicios; pues ya no tengo valor para sacrificar mi nombre como lo tenía antes: éste es el primer efecto de la ingratitud"

"La instrucción es la felicidad de la vida; y el ignorante, que siempre está próximo a revolverse en el lodo de la corrupción, se precipita luego infaliblemente en las tinieblas de la servidumbre"

"La justicia americana sabrá siempre, sin embargo, distinguir al inocente del culpable"

"La justicia es la reina de las virtudes republicanas, y con ellas se sostienen la Igualdad y la Libertad"



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José M. Ameliach N.


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