El cruento golpe de Estado ocurrido el 18 de octubre de 1945 contra el general Medina Angarita, nacionalista, democrático, progresista y civilista, ocurre casi al final de su gobierno y desde entonces se fue desencadenando grandes desgracias para el buen vivir democrático, político y social del pueblo venezolano. Rómulo Betancourt, jefe del Partido político Acción Democrática, acompañado por el Mayor del ejército venezolano Marcos Pérez Jiménez, toman el mando al constituir una Junta de Gobierno, la cual es presidida por Rómulo Betancourt, quien unos días después nombra a Doctor Rafael Caldera Contralor General de la República. El gobierno de Medina Angarita había comenzado a introducir profundas reformas democráticas, como la legalización de los partidos políticos, las garantías para las absolutas libertades públicas e individuales, la libertad total de opinión y de pensamiento, la seguridad para las personas y sus bienes, pero también hizo reformas en la entonces vigente Ley de Hidrocarburos, ésto reconocido como la principal causa de su derrocamiento, con cuyas reformas se aumentaban los impuestos a la exploración, explotación y refinación petrolera. Algunos de los cambios tributarios que se operan con esta ley fueron los siguientes: El royalty o regalía petrolera se estableció en un 16,33%, es decir, la sexta parte del producto bruto extraído, lo que significó un aumento sobre las regalías en vigor que oscilaban entre 7,5% y 8,5%. La Reforma Petrolera de 1943 permitió unificar el régimen jurídico de las concesiones que se venían rigiendo por diferentes leyes, y también unificó los sistemas impositivos complaciente y diversos existentes, haciendo que las empresas petroleras pagaran en lo adelante los mismos impuestos.
Pero estas medidas nacionalistas y soberanas incomodaron a las empresas petroleras y al Departamento de Estado de los Estados Unidos, por lo que estos factores poderosos se dedican a ayudar económica y logísticamente a grupos de venezolanos conspiradores, entre los cuales no podía faltar el de la oligarquía criolla. La oligarquía criolla y el gobierno norteamericano no querían a Medina porque se opuso a sus desmedidos intereses de explotación de las riquezas petroleras del país; también algunos militares no estaban satisfechos por el carácter civilista y democrático de su gobierno; y los adecos porque sus posibilidades de llegar al poder por la vía electoral, en los comicios que estaban próximo a realizarse, eran prácticamente inexistentes dado el apoyo popular que los venezolanos le brindaban a Medina por su exitosa gestión de gobierno tanto en lo moral, político, social y administrativo. De manera, pues, que desde hace más de 70 años el partido Acción Democrática ha venido ocasionándole un daño terrible al pueblo venezolano y todavía pretende seguirlo haciendo, para lo cual buscó a su socio segundón COPEI y a otros grupos políticos con ideologías contrarias a la idiosincrasia venezolana para que lo acompañaran en sus apetencias siempre malsanas. No, no, Venezuela nunca más permitirá que la gente venida de A.D. y COPEI gobierne en el futuro este hermoso y gran país.
En seguida la enumeración de los pensamientos del gran venezolano, Simón Bolívar el Libertador, ahora con aquellos que comienzan con la letra R, y S.
R
"Recuerda en la opulencia a los amigos leales que conociste en la miseria; porque los tesoros se acaban y la amistad perdura"
"Renovemos la idea de un pueblo que no solo quería ser libre, sino virtuoso"
"Reside en la médula de mis huesos el fundamento de mi carácter"
S
"Saber y honradez, no dinero, es lo que requiere el ejercicio del Poder Público"
"Seamos los bienhechores y fundadores de tres grandes estados, hagámonos dignos de la fortuna que nos ha cabido; mostremos a Europa que hay hombres en América capaces de competir en gloria con los héroes del mundo antiguo"
"Se ha observado en la historia, que todas las guerras civiles ha vencido siempre el más feroz o el más enérgico, según la acepción de la palabra"
"Se han roto las cadenas, ya hemos sido libres y nuestros enemigos pretenden esclavizarnos"
"Según ciertos señores, nadie puede ser grande sino a la manera de Alejandro, César y Napoleón. Yo quiero superarlos a todos en desprendimiento, ya que no puedo igualarlos en hazañas"