Muchas veces hago una pausa antes de emitir mí opinión sobre temas sensibles cuando se trata de casos como el más reciente suceso donde perdieron la vida varios de nuestros hermanos venezolanos en Texas, Estados Unidos.

Buscar culpables a partir de la autoría material deja libre de responsabilidad a los verdaderos culpables y tiene el sabor amargo de que no sanará la herida de los hogares enlutados.

Las causas y consecuencias tienen varios instrumentos de medición desde la ciencia sociales, el movimiento demográfico es inmanente a la condición humana pero entorno al mismo se mueven intereses que influyen en su propia dinámica.

Visto desde nuestro ámbito espacial podemos afirmar sin temor a equivocarnos que todas las comunidades, parroquias y ciudades de nuestro país le deben su origen al movimiento permanente de personas tras la búsqueda del bienestar y esto aplica para todos los pueblos del mundo aunque hoy me refiriero a Venezuela.

Las pueblos tienen memoria histórica de las razones por las que la gente se organizó en asentamientos, por ventajas comparativas y competitivas representadas en el potencial acuífero, tierra fértil y ubicación geográfica que le daba condiciones de sustentabilidad. Pero ese proceso se fue alterando con el surgimiento de leyendas urbanas que generaron curiosidad en mucha gente que seducidos por las fiebres, se fueron tras la búsqueda de mejores condiciones de vida en busca de oro y en otros casos, tras la búsqueda del oro negro (petróleo).

Así podemos tener una idea más clara sobre el movimiento migratorio qué, en otrora fue desde otros países hacia Venezuela y desde que llegó Nicolás Maduro a Miraflores se invirtió la tendencia, pero está vez no es parecido al movimiento migratorio de extranjeros provenientes de países hermanos que llegaron huyendo de la violencia política y criminal, también llegaron muchos inmigrantes de países de otros continentes huyendo de la guerra y persecución política qué, donde curiosamente han desatado una sistemática acción criminal contra los venezolanos.

La gravedad del asunto no es tanto la ingratitud de los gobiernos y descendientes de quienes en algún momento de la historia necesitaron y encontraron en nuestra tierra y con nuestra gente la hospitalidad y solidaridad de la que no esperamos pago alguno pero por lo menos algo de respeto.

La cuestión es compleja y va más allá de lo visible, la mayoría de los ataques contra la venezolanidad proviene de enfermos psiquiátricos agravados por xenofobia, homofobia y todas las patologías que estimulan el odio.

Por esta razón es que dije al principio que con capturar al autor material de determinado crimen no se resuelve el problema de fondo porque primero tenemos que tomar en cuenta que ningún venezolano debió huir de nuestro país.

Todos sin excepción salieron del país buscando un sueño que se convirtió en pesadilla por diversas razones. Intentaré exponer mi punto de vista a partir de mi propia experiencia:

Todos las familias del país fueron y son afectadas por esta situación que tiene su equivalente al movimiento migratorio qué comenzó en Afganistán, Libia, Irak y otros países como consecuencia de los más recientes conflictos bélicos, es decir países en guerra.

Por experiencia la única idea que tenía sobre la migración era la del campesino que abandonó el campo para ir a vivir en la capital de la República o la que dio origen a la zona petrolera se la Costa Oriental del Lago donde el campesino dejo de trabajar la tierra por el sueño de trabajar en la industria petrolera que a su vez fue causal para que mucha gente de otros países vinieran a nuestras tierras provocando la mescla de racial, cultural y tradicional.

La experiencia que yo viví fue a los 17 años, me fui a vivir en Valencia en casa de mi tía Carmen Martínez en Naguanagua porque allá tenía más oportunidades laborales que en Cabimas y de ese primer viaje me fui a Trujillo al conuco de plátanos de mamá Cruz en los cienigos de Santa Apolonia, luego me fui a vivir en Caracas, viví cerca de un año en el hotel Ausonia diagonal al palacio de Miraflores y finalmente me mudé para Crema Paraíso, San Bernardino. Esto no incluye otros lugares del país porque mi estadía fue muy corta y lo que quiero destacar aquí es el porque de mi respuesta a la pregunta obligada de la gente que me conoce al saber que tengo desde mi primer hasta el cuarto grado de consanguinidad de mi núcleo familiar fuera del país: mi madre en Chile con dos hermanas y un sobrino, mis cuatro hijos mayores en Trinidad y Tobago, un hermano, dos hermanas y varios sobrinos en Colombia, una hermana y dos sobrinos en Brasil, además de otros familiares en España, Francia, Rusia, Estados Unidos y Siria.

Por eso cuando me preguntan ¿Porque no te has ido del país? incluso hasta mis familiares les digo lo siguiente: "Aquí soy pez en el agua, en otro país sería algo así como una cucaracha en gallinero".

El calor del hogar y de nuestra tierra es insustituible, incluso siempre me costó acostumbrarme a otra región y las veces que salí del país tampoco me animo a quedarme.

¿Porque con Chávez se fueron los ricos y con Maduro se van los pobres? Es muy poco lo que puedo hablar sobre el particular en tan pequeño espacio pero lo intentaré, con Chávez se fueron los que tenían deudas pendientes con la justicia y las empresas que perdieron el control de nuestras industrias básicas, de aquí se refleja la migración de capitales aunque la fuga de capitales continuó y continúa con la diferencia de que Chávez aplicó el control cambiario, control de precios y eliminó los privilegios de grupos económicos que no pagaban impuestos, Maduro está haciendo todo lo contrario.

Otro detalle qué es importante mencionar es que con Chávez la gente que salió del país fue por dos razones: unos por razones de salud, educación y la mayoría para raspar los cupos en dólares en un momento de locura que convirtió a los venezolanos en los más deseados por los pueblos vecinos.

Desde que llegó Maduro al gobierno se torció el rumbo de Chávez y lógicamente esto aceleró el plan conspirativo del imperio para instaurar un gobierno títere, así que apoyados en la derecha antinacionalista lanzaron varias ofensivas contenidas en la teoría del golpe suave para erosionar la base política de apoyo del gobierno y las bases de la estructura del Estado para activar "el uso de fuerzas convinados y derrocar al gobierno".

El gobierno norteamericano logró que la derecha en su torpeza instalará un supuesto gobierno paralelo que le daría la justificación para robar nuestras reservas y activos internacionales mientras se desató el bachaqueo, la especulación y el acaparamiento como expresión de la viveza criolla que no forma parte de nuestras costumbres pero que sirvió para generar zozobra, inestabilidad y depresión colectiva hasta el punto de que mucha gente vendió sus casas y abandono sus trabajos para irse a vivir alquilados en otros países donde terminaron sometidos a relaciones laborales semiesclavistas o el comercio informal.

Del binomio oposición e imperio surgió la campaña mundial contra los venezolanos criminalizando la venezolanidad y asociando nuestro gentilicio a las bandas criminales que se mueven en el bajo mundo. Esto provocó el movimiento permanente de personas que se movieron de país en país hasta el sumamente peligroso cruse de la selva de Darien.

Este tránsito entre frontera y frontera tiene referencias trágicas de personas desaparecidas y otras que fallecieron en el intento mientras la dirigencia del gobierno los banalizo en un tono cínico y burlón culpandolos de mercenarios.

Yo no imagino las cosas que deben pasar por la cabeza de la gente que se fue pero si vivo en carne propia la tristeza por la ausencia de mis familiares y amigos en el exterior, me costó mucho trabajo convencer a mi hijo para que regresara de Colombia y aquí lo tengo conmigo afortunadamente.

Hace días leí una nota de una entrevista de CNN en la qué Barack Obama se refiere a los venezolanos y en línea general dijo que: "los venezolanos que salieron del país son unos cobardes por no quedarse a luchar contra el gobierno".

Aquí viene otra de las razones: se supone que la derecha hizo la campaña contra la venezolanidad y solicito a gobiernos extranjeros la invasión de nuestro territorio además de las sanciones y bloqueo que al final le sirvieron como excusa jurídica a todos los gobiernos que nos robaron bajo el auspicio de la dirigencia de la oposición mientras el gobierno con una retórica ambigua, ataca públicamente a la oposición y al gobierno norteamericano pero al mismo tiempo, mantiene negocios con ellos en México, el tema es tan perverso que, Manuel Rosales, siendo uno de los principales ladrones de monómeros le entregaron la gobernación del Zulia mediante el sacrificio de sus propios cuadros en la región por parte del PSUV.

La dirigencia del gobierno y la oposición convirtieron en negocios la tragedia del pueblo venezolano, los alimentos, la medicina, bienes y servicios dolarizados.

Las sanciones y el bloqueo son causantes del sufrimiento de nuestro pueblo porque el gobierno socializó su impacto mientras privatizó la renta mediante el uso de métodos ilegales para evadir los controles que generan caldo de cultivo para la corrupción.

La acción criminal de los corruptos vinculados a los viejos y nuevos ricos superó a las sanciones y bloqueo porque el gobierno en lugar de proteger a los niños, mujeres, las personas de la tercera edad y los trabajadores, esta proteguiendo a los dueños del capital que no generan ningún beneficio a la sociedad que no sea la servidumbre en condiciones de semiesclavitud. Por eso es que nuestros hermanos huyeron y quiénes no lo han hecho, quieren huir del país.

Edwin Martínez Espinoza.

@edwinviene