Se nos va el año que con cierta innegable nitidez comenzamos a salir de la oscurana viendo más cerca y clara la luz al final del túnel. Sin desconocer y dejar de reconocer que aún persisten factores domésticos, internos y externos que le podrían dar al gobierno del presidente Maduro, si no una sorpresa fatal, sí un buen susto. Si bien el clima político está bien otros mejores han terminado mal. ¡¡Queda mucho por hacer!!
La gran "epidemia" de este siglo lo resulta una corrupción que ya parece estar muy próxima a enviar a los EEUU, y todos sus "vagones", por el desagüe. Aunque la que nosotros tenemos (y que no nos da para presumir) resulta de cuidado. Más que un reto, debemos con urgencia comenzar a combatirla más allá de ese "pao pao" en lo que han quedado todos esos escándalos que como "muertos" pesan y arrastramos.
El Zulia, y sobre todo Maracaibo, podría estar por explotar. Sus instituciones se han vuelto verdaderas "traga monedas". En su mayoría (todavía) en manos de los que nos llevaron al descalabro del 2021 (como gato pansa arriba se defiende). Buenos camaradas están llegando, otros desde su capacidad están esperando. Sea este Año que ya está llegando el definitivo. ¡Feliz y Venturoso 2024! ¡¡Y a su batalla TODOS...!!