"La libertad es siempre la libertad de

aquellos que piensan de otra manera"

Rosa Luxemburgo

La humanidad atraviesa un proceso dramático de anomia que amenaza con una catástrofe de dimensiones incalculables las cuales podrían afectar la vida en el planeta corto plazo.

Este fenómeno resulta, entre otras cosas, de la confrontación entre diversas concepciones del mundo que tratan de imponer sus preceptos, valores, normas de vida.

El capitalismo, como sistema hegemónico, desarrolla cada día mecanismos más eficientes de alienación para mantener su poder y gobierno en la sociedad mundial, inclusive, propicia enfrentamientos entre naciones para dotarlas de armas de destrucción masiva y las cuales deben ser canceladas a la empresas que las proporcionan generando una doble plusvalía, la plusvalía económica con el cancelación de dichas armas y la plusvalía ideológica con las cuales, no sólo retorna el capital invertido sino también la visión dominadora del capital sobre las clases sociales, en especial la clase obrera, el proletariado, que son la carne de cañón empleada en dichas confrontaciones.

El enfrentamiento bélico entre Rusia y Ucrania, con la participación indirecta de la OTAN, la UE y los E.U., con la destrucción de armamento, centros urbanos, muerte de miles de personas. La guerra no declarada de Israel y Gaza que ha ocasionado miles de palestinos muertos y heridos. Los enfrentamientos bélicos en Somalía, Yemén, Nigeria y Siria, Mynmar , Burkina Faso, actualmente son ejemplos que sustentan los que acá afirmo.

El resurgimiento del colonialismo forma parte de este escenario, situación que Gran Bretaña ha revivido con la ratificación de facto del despojo de las Islas Malvinas en Argentina.

La ratificación de las sanciones por parte de los E.U. contra Nicaragua, Cuba, Iran, Corea del Norte, Rusia, Venezuela, Siria entre otros constituye la evidencia más elocuente de lo que aquí afirmamos.

Venezuela, Cuba, Nicaragua, Chile, Argentina han sido ejemplo en latinoamérica de la lucha contra la dictadura del capitalismo.

Al igual de Fidel; Allende, Ortega, Perón, el genio y figura del Comandante Hugo Rafael Chávez Frías constituyen la evidencia de la lucha contra el imperio, del capitalismo, de la resistencia de los pueblos latinoamericanos contra el colonialismo, la explotación del proletariado contra la burguesía, el capitalismo.

La desaparición física de estos líderes constituyen acontecimientos que van en detrimento de la insurgencia popular contra la burguesía, el capitalismo, la explotación del hombre por el hombre el Estado y el capital.

Los avances en materia política y social en Venezuela han venido en retroceso dado el cerco económico y político del imperio y sus efectos en la población y sus posibilidades de construir un mundo más justo y equitativo.

Aunado a la amenaza de invasión por parte del gobierno norteamericano y sus aliados europeos Venezuela sufre un bloqueo de su economía y con ello un deterioro de la calidad de vida de sus pobladores.

No obstante, el reflejo del capitalismo se evidencia dentro de la estructura social del país con el fortalecimiento y la aparición de nuevos grupos de poder y el surgimiento de estructuras netamente capitalistas (zonas de exclusividad económica) lo que nos indica el reacomodo del capitalismo y la aparición de una burguesía emergente que maneja el aparato tanto productivo como político del estado.

El poder adquisitivo del venezolano de a pié ha venido sufriendo un deterioro inconmesurable de su calidad de vida, salud, educación, solaz mientras nuevos grupos de poder han aparecido controlando la economía (importaciones, exportaciones), estado, empresas privadas y estatales.

En los actuales momentos, dentro del escenario electoral que vive Venezuela, el enfrentamiento se presenta entre dos sectores de la sociedad venezolana. Por una parte aquellos que representan los intereses de la burguesía tradicional, al capitalismo tradicional, a la dependencia al imperio, por la otra la dependencia a los nuevos grupos de poder, a una nueva clase neoburguesa que lucha por mantener nuevas formas de control del estado, del gobierno del aparato económico.

Mientras tanto, el pueblo, la clase obrera, los campesinos, los trabajadores, empleados públicos, educadores, trabajadores de la salud, seguirán viviendo las ataduras de votar cada cinco años para elegir a aquellos que promenten el cielo y lo que hacen es repetir el mismo esquema de quienes lo han engañado en cada proceso electoral.

Hacer la patria libre o morir por ella.