Caracas, Venezuela - Aram Aharonian para Adital*- La clara decisión del
gobierno venezolano de asociarse al Mercado Común del Sur (Mercosur), a
pesar de significar un gran aliciente a todo el proceso de integración
sudamericano, encuentra objeciones en una oposición que espera señales
claras desde el Norte.

"Nuestro destino está aquí en el Sur", enfatizó el presidente venezolano
Hugo Chávez desde la ciudad brasileña de Manaus, Estado de Amazonas, donde
cumplió una exitosa reunión de empresarios de ambos países, antes de viajar
a Asunción del Paraguay para participar como invitado a la cumbre del
Mercosur.

"Estamos llamados a integrar aquí en Sudamérica un gran polo de fuerza
política, moral y humana, que es el camino de América del Sur", que según él
no está en contra de "ningún poder mundial" del este o del oeste.

Chávez aprovechó para destacar que también buscará la forma de fortalecer a
la Comunidad Andina de Naciones (CAN), que afirmó también que está
"trancada" y anunció que su país nunca aceptará integrarse a ningún acuerdo
de la CAN con Estados Unidos, "porque sería perder la gran capacidad
negociadora que tendríamos unidos todos los países del sur. La estrategia
tiene que ser unitaria".

Enfatizó que la propuesta que ha nacido en la CAN en ese sentido, adelantada
por Colombia "es contraria a la integración de Sudamérica y no la
compartimos. Venezuela no se sumará a ningún acuerdo bilateral con Estados
Unidos, porque la negociación debe ser en bloque. Ésta no es una posición
antinorteamericana, es una posición pro venezolana, para defender también a
los pueblos de la América Latina y Caribeña".

Cabe recordar que los nuevos presidentes de Brasil y de Argentina, Lula da
Silva y Néstor Kirchner, consolidaron el 11 de junio la alianza estratégica
entre los dos grandes países de la región y ratificaron al Mercosur como
prioridad: profundizar la alianza económica y política entre sus miembros
los dos grandes más Uruguay y Paraguay- y los dos asociados, Bolivia y
Chile. Y también fijaron la negociación en bloque con Estados Unidos y el
Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), en condiciones de equidad y
sin apuros.

Desde Manaus el presidente venezolano destacó que "vamos con nuevos bríos a
la reunión. Aspiramos a ser miembros y estoy seguro de que lo seremos", y
reiteró su apoyo a la integración de América del Sur, hacia adentro, en un
desarrollo endógeno", a la vez que insistió en que "es necesario un
desarrollo propio -en lo económico, lo político y lo social- de nuestras
particularidades que es la que constituye el modelo que se debe seguir en
contrapartida al neoliberalismo".

En un lenguaje quizá menos diplomático que Lula y Kirchner, Chávez reiteró
su rechazo al ALCA, con el que "no tendríamos ninguna garantía de
sobrevivir, nos invadirían con sus tecnologías. Los agricultores nuestros no
van a poder competir con los de Norteamérica", enfatizó.

Oposición reacciona

Esta posición desató una nueva ofensiva de desinformación de los medios de
comunicación y de la oposición. Por ejemplo, el matutino "El Nacional"
afirmó que "según los expertos, a Venezuela le conviene regularizar y normar
sus relaciones con Estados Unidos las cuales se llevan a cabo ahora sin
ventaja alguna para nuestro país. A no ser una razón de solidaridad con la
posición de Cuba, (o de simple adhesión) no existen otras que expliquen la
posición venezolana. Es el único país en la región que se opone".

Para la derecha venezolana, muy asociada a los intereses económicos
colombianos, la asociación de Venezuela al Mercosur no se ha debatido
abiertamente, como lo fue en su tiempo la creación del Pacto de Cartagena o
la Comunidad Andina de Naciones. Con la intención de impedir cualquier tipo
de integración que no sea bendecida por Washington, señala que no se han
examinado sus efectos sobre la economía venezolana, o sus implicaciones para
la presencia venezolana en la Comunidad Andina de Naciones.

Y en su audición dominical Aló Presidente, desde Manaus, Chávez alertó
también sobre posibles invasiones o intervenciones en la Amazonía. "Cuidado:
ese territorio es de todos los suramericanos".

*Aram Aharonian es corresponsal de Adital en Venezuela, presidente de la
Asociación Latinoamericana para la Comunicación Social y director del
mensuario "Question con Le Monde diplomatique"