Entre los intelectuales de la oposición es frecuente oírles decir que
el gobierno de Chávez es "enemigo de la inteligencia". No es necesaria
tanta modestia para defender posiciones ideológicas empantanadas en años
de desaciertos y fracasos. Las cúpulas que se precian de inteligentes
deben aceptar de una vez por todas su fracaso. El ascenso de Chavéz y la
estabilidad de su gobierno: es consecuencia del repudio tenaz de las
mayorías nacionales a las pretensiones de quienes se precian de
constituir "la intelligence"; es consecuencia del fracaso de esa
fraudulenta inteligencia y del repudio a su proyecto económico y social;
es el rechazo a la pobreza, el desempleo, la discriminación , la
injusticia, el privilegio, frutos todos ellos de la inteligencia que desde
siempre gobernó en el país. La estabilidad del gobierno a pesar de las
calamidades heredadas del pasado y profundizadas por el intento de
derrocamiento más funesto y perverso en la historia de la conspiración
política de Venezuela y de cualquier país, es la expresión elocuente del
respaldo de las mayorías, que ven en él, su gobierno y no, el gobierno de
cúpulas ensoberbecidas. Durante años, inteligentemente derrocharon la
riqueza, crearon la situación actual y para reconquistar el pasado, se
decidieron por el golpe de Estado; por el saboteó de la actividad
productiva; decretaron el paro patronal y con él lanzaron al desempleo a
centenares de trabajadores de todos los oficios, de todas las profesiones.
La inteligencia de Fedecámaras y la CTV, con su paro patronal de diciembre
y enero, creó la relación uno a cien: por cada burócrata saboteador
despedido de PDVSA (18.000). La estructura productiva del país quedó
resentida por la pretensión de derrocar el gobierno de Chávez, sin medir
las consecuencias de tan absurdo, macabro, inteligente plan: paralización
económica, desempleo, desabastecimiento, "¡ muérete chusma!" Al final,
tomaron de la propia medicina, se hirieron con las propias espuelas.
El despido de la meritocracia de PDVSA, flor y nata de la inteligencia
del país, según sus admiradores, es la referencia para decir que el
gobierno "persigue la inteligencia". Los hechos han demostrado que esta
meritocracia de la inteligencia delincuencial, ha sido derrotada el 13 de
abril y luego en el golpe de Estado petrolero, bancario y patronal de
diciembre y enero últimos; y cada día es derrotado el permanente golpe de
Estado mediático. El pueblo no se come el cuento de su trasnochado
discurso.
La forma como el gobierno ha derrotado todas las conspiraciones
tejidas en su contra, demuestra que la inteligencia no es privilegio de
unos pocos ni expresión exclusiva de minorías presuntuosas enfrentadas a
la inteligencia popular. ¿ En qué bando milita la inteligencia?
Tovar, julio del 2003.
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