El pasado día jueves, 08 de Noviembre de 2007, la Universidad Socialista del Pueblo (UNIVER-SO) le dio una calurosa bienvenida al embajador de Bolivia en nuestro país, Jorge Alvarado Ruiz, quien estuvo de visita en Mérida por dos días, cumpliendo con una apretada agenda. El día miércoles, 07 de noviembre, el Embajador participó en las actividades de inauguración de un ciclo de conferencias en el Centro Internacional de Desarrollo e Investigación Ambiental y Territorial CIDIAT, en el cual intervino el día jueves en la mañana en su cualidad de ingeniero geólogo, con una conferencia titulada "La Importancia de las Aguas Subterráneas en Venezuela". Una vez concluidas sus actividades en el CIDIAT, el Embajador fue recibido con alegría y entusiasmo por miembros de la UNIVER-SO con un almuerzo en el que estuvimos presente los integrantes y colaboradores del Comité Promotor: José Sant Roz, Juan Carlos Villegas, José Antonio Velásquez, Gilberto Perdomo, María Teresa Vielma, Carlos Ernesto Chávez, Franz J. T. Lee, Juan Veroes, Betty Osorio, Ricardo Moreno, Fabiola Durán, Tania Albornóz, Pedro Pablo Perreira, Carlos Montalbán, Elma Vielma, la Sra. Magaly y quien escribe, Jutta Schmitt.
Posteriormente, a las 2.30 de la tarde, el embajador Jorge Alvarado, acompañado por los mencionados integrantes de la UNIVER-SO, se trasladó a la Casa del Poder Popular donde dictó una conferencia sobre el proceso de transformación que vive la hermana nación de Bolivia, iniciado por el gobierno del presidente Evo Morales.
Previas palabras introductorias por parte de José Sant Roz, quien recordó la presencia viva del pensamiento de Simón Bolívar en el proyecto de la Confederación de Repúblicas Latinoamericanas propulsado en la actualidad por el gobierno revolucionario del presidente Chávez, y quien puso énfasis en la importancia de derrotar, de una vez por todas, la colonización cultural y mental a la que seguimos siendo expuestos los pueblos latinoamericanos y del mundo, el embajador Jorge Alvarado comenzó su intervención con un comentario sobre la ideología racista de las oligarquías bolivianas.
Señaló que las oligarquías bolivianas han perseguido en relación a los pueblos indígenas unas políticas de exterminio que se inscriben en el más extremo racismo y darwinismo social y que datan de finales del siglo XIX. Detalló que las oligarquías bolivianas siempre han considerado a los Indios como una 'raza inferior' que obstaculiza el progreso de Bolivia, por lo que habría que fomentar la migración de blancos anglosajones. Dijo que este racismo de corte fascista-nazista sigue vigente en la ideología de la extrema derecha boliviana hasta el día de hoy, lo que explica el odio visceral que tienen las oligarquías bolivianas a Evo Morales y al pueblo indígena que representa. El Embajador recordó que, al mismo tiempo, las oligarquías bolivianas siempre han sido serviles a los imperialistas; primero a los españoles y luego a los norteamericanos. Mencionó los estudios que han realizado algunos historiadores, quienes han calculado que con la cantidad de plata extraída de las famosas minas de Potosí podría construirse un puente de plata que llegaría de Potosí hasta Madrid, y que paralelo a este puente podría construirse otro con los huesos de todos los indígenas que murieron a causa de la explotación de su trabajo por la misma extracción minera. Recordó que las oligarquías no sólo se apoderaron de grandes extensiones territoriales que alcanzan miles y hasta millones de hectáreas, sino que también han llegado a controlar la explotación de los recursos naturales como los hidrocarburos y la madera. Enfatizó que con ello, el pueblo boliviano había perdido su soberanía y su dignidad y que ante este panorama Evo Morales ha tomado medidas para reivindicar y dignificar el pueblo boliviano. Explicó el Embajador, que en el pasado lo único que se hacía en materia político-electoral en Bolivia fue legalizar los candidatos presidenciales elegidos por los EE.UU. Sin embargo y con la llegada de Evo Morales al poder, se acabó el gobierno directo que solían ejercer los EE.UU. en Bolivia a través de su embajada. Recordó que la mayor parte de los presidentes bolivianos han sido militares que han llegado al poder por medio de golpes militares propiciados por EE.UU. y que el presidente de EE.UU. solía nombrar a los ministros bolivianos de la defensa y del interior, quienes nunca se instauraron sin un entrenamiento previo por la CIA.
Es por eso que la primera tarea de Evo Morales, como dijo el Embajador, era convocar a una Asamblea Constituyente con el objetivo de re-fundar a Bolivia para que no sea más nunca gobernada por las oligarquías ni por un gobierno extranjero. Señaló que aunque sí existe una mayoría, esta no alcanza los dos tercios necesarios para la aprobación de los distintos artículos de la nueva constitución, y aunque sí se hayan logrado unos "consensos" entre comillas, las oligarquías siguen poniendo obstáculos al proceso de la Constituyente, siendo los dos grandes temas el de la autonomía y el de la capitalidad. En cuanto al primer obstáculo, el embajador Jorge Alvarado detalló que las oligarquías exigen la autonomía de cuatro departamentos de la zona oriental del país, que son precisamente los que tienen la mayor riqueza en hidrocarburos, minerales, suelos y bosques. Viendo que están a riesgo de perder grandes extensiones de tierra como también el control sobre recursos importantes, y ante la decisión de Evo Morales de optar por la revolución agraria en la que la tierra debe ser entregada a quienes realmente la trabajan y la hacen producir para el bien del pueblo boliviano, las oligarquías bolivianas plantean la cuestión de la autonomía de los cuatro departamentos en términos engañosos, con el fin último de su secesión de Bolivia. Exigen que se realice un referendo preguntando a la población de los departamentos en cuestión, si está de acuerdo o no con la 'libre disposición de los recursos existentes'. Con ello insinúan que bajo el gobierno de Evo Morales ya nadie puede disponer libremente de sus bienes, cuando en realidad existe lo que se llama el 'derecho propietario', consistente en cuatro beneficios fundamentales para cada boliviano, a saber: el uso, goce, disfrute y disposición de sus bienes. Previa aclaración de que no se trata de una intromisión en los asuntos internos de nuestro país, el Embajador estableció una analogía con el caso venezolano donde sectores adversos al gobierno están insinuando de que con la Reforma Constitucional se quiere quitar a la gente sus bienes personales e inclusive sus hijos. Señaló el Embajador que el gobierno de Evo Morales no está categóricamente opuesto a la propuesta de la autonomía de los departamentos, sino que quiere extenderla hasta los municipios y hasta el seno de las comunidades para que el manejo del Estado se genere desde abajo, tal y como se está empezando a perfilar en Venezuela, donde los Consejos Comunales administran y ejecutan sus propios recursos, previa decisión en asamblea ciudadana a qué proyectos se destinarán. En cuanto al segundo obstáculo impuesto por la oligarquía boliviana - el de la capitalidad -, el Embajador explicó que históricamente su país se nombró Bolivia, en honor del Libertador Bolívar, y la capital en honor al Gran Mariscal de Ayacucho, Sucre. Después de la Guerra Civil los poderes legislativo y ejecutivo se instalaron en La Paz, quedándose Sucre con el poder judicial. Ahora las oligarquías bolivianas exigen el retorno de todos los poderes existentes a Sucre, más todo poder adicional que se llegue a crear en el marco de la Constituyente (un poder electoral, por ejemplo). Dijo que a todas estas, están amenazando con un golpe militar y se ha visto al embajador norteamericano viajar a Santa Cruz para reunirse con paramilitares colombianos y con sectores de la extrema derecha de origen croata, con un legado histórico racista y nazi-fascista.
En cuanto a los logros obtenidos por el gobierno de Evo Morales, el Embajador destacó la misma Ley de la Constituyente, la nacionalización de los hidrocarburos con la que el Estado boliviano se beneficia enormemente, ya que antes, un mero 18% de los ingresos provenientes de la explotación de los hidrocarburos llegaba a las arcas del Estado, mientras que ahora son más del 50%. Explicó ante una audiencia estupefacta, que hasta el año 2005, un monto de tan sólo doscientos mil dólares anuales había ingresado a las arcas del Estado, mientras que ahora son dos mil millones de dólares anuales, lo que significa que las oligarquías que solían manejar el Estado se robaron mil ochocientos millones de dólares anuales, recursos con los que ahora el gobierno de Evo Morales está financiando las necesidades más agudas del pueblo boliviano. En este sentido, el Embajador destacó primero, los bonos escolares para un millón doscientos mil niños bolivianos; segundo, la 'renta dignidad' que beneficia a toda persona mayor de 60 años independientemente de que si haya tenido un empleo fijo o no; tercero, la campaña de alfabetización llevada a cabo por el gobierno de Evo Morales con la ayuda de Cuba y Venezuela; cuarto, la atención médica prestada a la población boliviana tal como el Plan Milagro en cuyo marco se han operado de vista dos mil bolivianos, y la construcción de 43 hospitales en todos los rincones del país; y quinto, la mejoría y ampliación de la infraestructura del país. El Embajador recordó que a dos meses del gobierno de Evo Morales se aprobó una resolución de austeridad que rebajaba en un 50% el gasto de la administración pública, incluyendo el sueldo del presidente. Los recursos así liberados fueron destinados a los sectores salud y educación en beneficio del pueblo boliviano, históricamente excluido por las oligarquías bolivianas y sus gobiernos de turno.
Antes de terminar su intervención, el Embajador mencionó que para el pueblo boliviano la vida sin naturaleza es inconcebible y que los pueblos indígenas consideran imperante la defensa de la naturaleza. Los dioses originarios del pueblo boliviano venían de la naturaleza y es por eso que el dios impuesto por los españoles es inaceptable. Explicó que hasta hoy se rinde homenaje a la madre Tierra, la Pacha Mama, cuando todos los viernes se le rinde pleitesía con inciensos y con chicha, una bebida típica boliviana. A diferencia del sistema capitalista que coloca el capital por encima del ser humano y en el que la naturaleza no tiene ningún valor, el pueblo boliviano convive con la naturaleza, por lo que la política ambiental del presidente Evo Morales está impregnada del espíritu de lucha por la defensa de la naturaleza, sin la cual la vida humana no sería posible. Finalmente y referente a la situación difícil que actualmente atraviesan nuestros dos países, el Embajador observó que aún cuando Venezuela ya ha pasado por un golpe de Estado, ahora está nuevamente en peligro a raíz de la Reforma Constitucional que pretende profundizar el proceso de cambios. Señaló que en Bolivia las oligarquías actúan de la mano con el gobierno de los EE.UU. a través de la embajada norteamericana, y que se está tratando de aplicar una versión modernizada del 'modelo venezolano' para derrocar al presidente Evo Morales, por lo que es oportuno y necesario que nos unamos para generar una conciencia de solidaridad mutua entre nuestros pueblos. En este sentido enfatizó que es imperativo explicar a nuestros respectivos compatriotas la necesidad de la solidaridad y hermandad entre nuestros pueblos. Recordó en este contexto que la Revolución Cubana aguantó las arremetidas norteamericanas y el bloqueo económico heroicamente por sí misma, y en buena medida gracias a la solidaridad de los pueblos del mundo, específicamente los latinoamericanos.
Así fue como el embajador Jorge Alvarado Ruiz finalizó su conferencia con un llamado caluroso a la solidaridad entre nuestros pueblos hermanos, ya que los adversarios tanto externos como internos que se oponen tan ferozmente a los procesos de profunda transformación estructural de nuestros países, precedidos por dos líderes formidables como lo son Evo Morales y Hugo Chávez, son los mismos: los Estados Unidos de Norteamérica y las oligarquías y clases pudientes internas.
Luego y a manera de conclusión intervino Gilberto Perdomo con una breve y contundente charla sobre el momento crucial que vive Venezuela, recordando el Congreso Anfictiónico convocado por Bolívar para hacer frente a una invasión de los Estados Unidos de Norteamérica. Hizo un llamando a que respondamos con inteligencia a la violencia generada en estos días por los adversarios del gobierno ante la propuesta de la Reforma Constitucional, y concluyó llamando a combatir la ignorancia, adulancia y la mentalidad capitalista que todavía existe dentro de muchos de nosotros, para poder enfrentar con firmeza y claridad los grandes retos venideros. Advirtió a estar alerta ante la delación y traición en el seno de nuestro movimiento revolucionario y aconsejó sobreponerse a ello con altura, esto es, con conciencia y prudencia revolucionaria sin caer en el infantilismo izquierdista de la pequeña burguesía.
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