El 23 de Noviembre de 2008
a eso de la medianoche viendo un boletín del CNE me sentí en los años
noventa, vinieron a mi mente las canciones de Yordano, ritmos cadenciosos
(lambada, el meneito, la macarena, entre otros), e imágenes tan pavosas
como Gilberto Correa y Salserín, asi como en el nuevo circo y violación
de derechos humanos, me trasladé de inmediato a esos años, pero sentía
algo diferente.
Salí a la calle a ver si de
verdad estaba en los 90, le pregunté a un inadvertido transeúnte,
que realizaba su función según mejor le parecía, por la deuda adquirida
con el Banco Mundial y el FMI y a cuanto ascendía en estos momentos,
cambiando de función, ahora el oyente extrañado me dice que no sabe
de lo que estoy hablando, que esa deuda ya está pagada, contrariado,
pienso que está en un error, si hasta hace poco Carlitos Andres y
Ledezmita defendían pedir mas dinero a estos organismos internacionales
¿y ahora la pagaron?.
Contacto a la gente que tenia
Ledezma en la nómina de Fundarte, esos que solo aparecen quince y ultimo,
pero me dijeron que se encuentran “desempleados”, sigo contrariado
y preocupado a la vez, ya que se acerca el 24 de Diciembre y Toñito
acostumbra botar a los empleados de la alcaldía en esas fechas, amén
de que no le pagó a los jubilados porque según Antonio, la alcaldía
esta quebrada y hay que cerrarla.
Empezó a desvanecerse en mí
la idea de que estaba en aquella época democrática de los noventa,
al no ver torturados, “detenciones preventivas”, ballenas, ni brigadas
antimotines atacando a pensionados, estudiantes o todo lo que “hieda”
a lucha popular, esto no se parecía en nada.
Salgo de mi locura momentánea
y me doy cuenta que ha sido elegido nuevamente el hijo de Carlos Andrés
Pérez a la Alcaldía de la capital, veo como acepta el triunfo de la
mano de un CNE al cual había acusado de realizar comicios amañados.
El Ledezma democrático que participó en el golpe de estado de 2002
y detuvo de manera ilegal a trabajadores de la alcaldía libertador
lleva de nuevo las riendas de la ciudad.
No podemos permitir que individuos
de esta calaña recuperen espacios que ya les fueron arrebatados, espacios
que les permiten continuar su política de espaldas al pueblo beneficiando
a la burguesía, ya desde hoy 26 de noviembre podemos ver un ejemplo
palpable y es que la policía del Radonsky está realizando acciones
contra el pueblo revolucionario en el centro de Los Teques, conducta
que no es nueva y la pudimos apreciar en el 2002, pero parece que se
nos olvidó.
Definitivamente nos quedamos
sin memoria, necesitamos una nueva misión revolucionaria, hago un llamado
al heroico pueblo venezolano a conformar la Misión Tebokan!!!
“El que no tenga memoria que se haga una de papel”