Hoy, en la mañana, cerca de 200 trabajadores se concentraron en el portón de la fábrica Plásticos Vinílicos, de Villa De Cura, para asegurar el acatamiento de una nueva providencia de la Inspectoría del Trabajo de Aragua en favor de 19 trabajadores despedidos ilegalmente en esa empresa. Les acompañaban trabajadores de otras empresas del Estado Aragua, entre ellos los trabajadores de Pepsi-cola, que también fueron víctimas de despidos recientemente y el directivo del sindicato de esta última empresa, miembro de la coordinación regional de la Unión Regional deTrabajaores (URT-Aragua), Luís Hernández.
Los trabajadores han resuelto recurrir a la movilización sindical para obligar a los patronos al acatamiento de los reenganches, ya que no sólo violan la inamovilidad laboral, sino que se niegan a cumplir con las decisiones de reenganche ordenadas por las inspectorías del trabajo. Esta es una situación generalizada, que forma parte de la ofensiva patronal ordenada por los golpistas de FEDECAMARAS para descargar el impacto de los costos del paro-sabotaje empresarial sobre las espaldas de los trabajadores y trabajadoras. Al mismo tiempo, es una forma de seguir saboteando la economía y achacarle el desempleo al gobierno de Chávez.
Los trabajadores de la empresa Plásticos Vinílicos que habían sido despedidos, lograrron reincorporarse hace un par de meses, pero la empresa los volvió a desincorporar utilizando palancas judiciales. De ahí que la situación conflictiva se volvió a plantear nuevamente.
En vista del retardo en el cumplimiento de las decisiones de las inspectorías y de la burla constante de la ley por los explotadores, los trabajadores y sus organizaciones clasistas como la UNT y sus instancias regionales usarán su propia fuerza sindical para obligar a los patronos a cumplir con la ley y respetar los derechos laborales. El reenganche popular ha sido utilizado exitosamente en otras empresas, y consiste en que los trabajadores de la fábrica en la que se producen los despidos se movilizan con el apoyo solidario de trabajadores de otras empresas de la zona, así como de las comunidades populares circundantes, llegando incluso a la toma de las instalaciones.