20 de Feb. 2009. El ex director general de TVES, Esteban Trapiello, en una rueda de prensa este jueves desde la sede del Ateneo de Caracas, denunció presuntas irregularidades en el canal estatal, entre ellas que un 80 por ciento de su programación es extranjera y que se da poca participación y prominencia a los Productores Nacionales Independientes (PNI) venezolanos, así como la adquisición de diferentes programas con fuertes sobreprecios.

Esto provocó una respuesta de William Castillo en forma de comunicado a través del Sistema Nacional de Medios Públicos, rechazando las declaraciones de Trapiello, invitándole a colocar las denuncias en Fiscalía y asegurando que el canal ha solicitado auditorías internas y externas para certificar su funcionamiento adecuado.

La Televisora Venezolana Social (TVes) surgió en mayo de 2007 reemplazando en señal abierta a Radio Caracas Televisión (RCTV), canal golpista al que no se renovó su concesión. Desde la creación de TVes, numerosas han sido las críticas en torno a su programación, que no ha sido muy atractiva a pesar de los onerosos gastos en adquirir  series, telenovelas y películas en el extranjero. Las medidas tomadas por Lil Rodríguez, su primera directora (quien fue reemplazada semanas atrás por el vicepresidente de VTV, William Castillo) no han permitido subir sus índices de audiencia frente a las televisoras privadas Venevisión o Televen, y ni siquiera contra la propia VTV, que se mantiene como canal de información y opinión.

La rueda de prensa

Las declaraciones de Trapiello se emitieron en rueda de prensa efectuada en una sala del Ateneo, donde estuvieron numerosos productores independientes, varios de ellos de acuerdo con su posición. Se prolongó durante más de una hora y estuvo cargada con fuertes adjetivos y vocabulario soez, pero también presentó documentación que, al parecer,comprobaría parte de sus denuncias.

Declaró Trapiello que el canal no cumple la Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión, que exige se brinde determinado porcentaje de la programación a productores nacionales independientes (PNI) venezolanos. Algunos de sus ataques contra Castillo eran de índole personal y estaban cargados de adjetivos.

Aseveró que apoya plenamente al proceso bolivariano y que es socialista, pero que renunció a su trabajo como director general del canal luego de que sus superiores supuestamente le hubieran afirmado que viajarían a México y otros países a comprar programación para el canal, dado que la ofrecida por los PNI venezolanos no era de calidad. Indica que renunció el 17 de diciembre, pero que prefirió callar hasta ahora para no perjudicar la enmienda.

Denunció que algunos capítulos de telenovelas compradas por TVes en el extranjero "se pagaron tres veces más caros que lo acostumbrado en el mercado". A otras novelas hechas por TVes, como "Caramelo y chocolate", se les dio 65 mil bolívares fuertes por capítulo, siempre según Trapiello. Denunció que la señal de TVes no se podía ver por Internet.

Programas de Globovisión en TVes

Otro caso que denunció fue el del programa "Alta Densidad", de Carlos José Monzón, un programa de tecnología e Internet siempre orientado de forma capitalista y pro-empresarial, algo un poco alejado de la idea de promover el socialismo y el uso de las tecnologías para el beneficio del colectivo.

"Alta Densidad" se transmite desde hace varios años en el canal privado Globovisión. TVes, según Trapiello, contactó a Monzón para que hiciera un programa nuevo pagando 26 capítulos de los programas a 14 mil bolívares fuertes cada uno (aprox. $6.500), para luego comprar 56 programas de una hora, en segmentos de media hora, más a 26 mil bolívares fuertes por programa ($12.093), gastando Bs.F. 1.456.000 en total. Cuando la Consultoría Jurídica se dio encuenta, en base a denuncias, que el programa era  el mismo que el que se ofrecía en Globovisión, decidieron pasarlo a las 4 de la madrugada y recortar la cantidad de capítulos adquiridos, en vez de rescindir el contrato.

Audiencia

Aseguró el ex director general de TVes que, contrario a lo que se afirma públicamente, la directiva del canal sí toma en cuenta las mediciones de audiencia hechas a través de una empresa privada. Según esos datos presentados por Trapiello, TVes tiene menos de uno por ciento de audiencia, VTV tiene alrededor de 5 por ciento, Venevisión 36 por ciento, Televen 12 por ciento y la TV por cable un 28 por ciento. Trapiello también mostró un email supuestamente enviado a él por la Unidad de Audiovisuales de VTV, según la cual ningún programa de la televisora emitido en 2008 sobrepasaba el 0,9 por ciento de audiencia.

Opinión y censura

Denunció el criterio extremadamente rígido en algunos medios del Estado; se quejó de que, a  un documental sobre el cine venezolano que iba a ser vendido a Vive TV, se le pidió remover completamente cualquier referencia al actor golpista Orlando Urdaneta, quien luego de haber realizado una exitosa carrera como actor, decidió unirse al golpe de estado del 11 de abril de 2002. Actualmente vive en Miami, de donde ha dicho públicamente en reiteradas ocasiones que el presidente Chávez debe ser asesinado. Pero Trapiello defendió que sus películas y su labor en el cine venezolano no pueden ser borradas de la historia (n. del e.: ¡imagine que a Páez se le eliminara de los libros de Historia por su traición a Bolívar!)

Aseguró que en los contratos que se les pide firmar, se les estipula que "el contratado se compromete a no denigrar en espacios públicos ni privados ni en el contenido, de la producción de la Televisora Venezolana Social TVES. No emitir conceptos en contra de la filosofía que la inspira", lo que a juicio de Trapiello "es censura previa" que él se negó a firmar.

También contó Trapiello un caso parecido con la Liga Profesional de Baloncesto, la cual al parecer no será transmitida en TVes porque, supuestamente, uno de los equipos es propiedad de alguien relacionado con Henrique Capriles Radonski, fundador de Primero Justicia. "En cambio, TVes sí transmite la NBA", dijo refiriéndose a la liga de baloncesto estadounidense.

Señal de baja calidad

Respecto a los problemas con la señal de TVes, que tiene problemas de calidad con respecto a la de su predecesor RCTV, indicó que hubo algunos problemas de incompetencia por parte del personas técnico: por ejemplo, en algunos transmisores la señal de TVes era recibida y enviada vía DirecTV. El sistema de transmisión en Mecedores usaba una línea de transmisión compartida con Venevisión.

Trapiello aseguró que cuando el Presidente Chávez nombró a Lil Rodríguez como directora, "ella sabía que no podía con esa tarea" y el Presidente Chávez "ni la conocía". También lamentó Trapiello la quiebra del Stanford Bank, que -asegura- es el úncio banco que lo financió y le dio apoyo multimillonario para poder crear una productora en Palo Verde.

Reacciones

La rueda de prensa de Trapiello ha generado diversas reacciones. Para algunos simpatizantes del proceso bolivariano, su forma de emitir las denuncias le quita méritos a cualquier información que pudiera brindar; hay quienes dicen que él mantiene intereses ocultos en el conflicto.

Pero para otros, el que la rueda de prensa no fuera reseñada por ningún medio del Estado contradice el reciente mandato del Presidente Hugo Chávez, brindado apenas el 4 días atrás, de iniciar la Revisión, Rectificación y Reimpulso (RRR) en la administración pública. También se critica que TVes haya recibido una cantidad impresionante de recursos para adquirir producciones en otros países, aún cuando otros medios están más descuidados, entre ellos la recién trasnferida Ávila TV.

La Televisora Venezolana Social, TVes, ha sido blanco de críticas de la oposición debido a que surgió utilizando la frecuencia VHF del canal RCTV.

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