Prensa Aporrea (23/04/09).- El pasado domingo 19 de abril durante su intervención en la apertura del Museo y Centro Educacional sobre el Holocausto en la ciudad de Skokie, Illinois, el Expresidente de Estados Unidos de América, Bill Clinton, demostró su amplia simpatía con la causa judía, el Estado de Israel y las políticas que este, a través de su gobierno, ha dirigido a Palestina principalmente durante las últimas acciones bélicas escenificadas en la franja de Gaza.
Entre sus palabras destacó el relato de una conversación que tuvo con su actual esposa y Jefa de la política exterior estadounidense, Hillary Clinton, durante la cual le comentó que ella y el Presidente, Barack Obama, no asistirían al importante evento de la apertura del museo y que, en cambio, irían a la Cumbre de las Américas “a hacer las paces con Chávez”, evento que él consideraba una “fiesta de té” (Tea Party).
Esta referencia directa a la causa latinoamericana causo gracia entre los asistentes quienes, al finalizar la intervención, expresaron con aplausos su satisfacción dadas las palabras ofrecidas por uno de los líderes más significativos del Partido Demócrata quien no dudó en compartir el sentimiento de que “la tierra prometida de los judíos” es Israel.