16 de marzo 2010.-Faltaban pocas semanas para que Pedro Carmona Estanga se auto-juramentara como dictador, y en Barquisimeto, un Concejo Muncipal y un Alcalde, se encargaban de condecorar a aquel presidente de Fedecámaras, que revivió fantasmas de gorilas en América del Sur. Henri Falcón era ese intendente de la capital larense que participó en la propagandística ceremonia.
Pasó el golpe de estado del año 2002, y gracias a la recuperación de la democracia por parte del pueblo, la carrera política de Falcón continuó durante algunos años más como Alcalde del Municipio Iribarren y más recientemente como Gobernador del Estado Lara. Todo ello en el contexto más efectista que se pueda pensar. Con "grandes" festivales, hechos mediante millonarias inversiones, la propaganda sobre la "gestión Falcón" irradiaba desde Lara para casi todo el país. Mucho dinero invertido en traer a artistas internacionales, mientras proyectos como el Trasbarca quedaba por el camino.
En ese camino que ha transitado Falcón desde la condecoración a Carmona hasta ser aclamado desde las graderías de la oligarquía, recordamos en especial un hecho ocurrido en 2007. Ese año, la actriz y ex-miss Fabiola Colmenares había sido escogida como la figura de la farándula predilecta para ser promocionada como vocera en contra del presidente Hugo Chávez y del gobierno bolivariano. Precisamente ese año, Henri Falcón escogió a Colmenares para ser la "imagen" de la Feria Internacional de Barquisimeto.
Es paradójico, que cuando Barquisimeto es conocida como la capital musical de Venezuela, el señor Henri Falcón "vibrara" con "Top Festivals" donda la música larense ocupara lugares de relleno en las carteleras o nunca ocupara lugar alguno.
El Henri Falcón que hoy es seguido en cada una de sus actividades públicas por Globovisión, es aclamado por esos mismos que colocaron los valores de la venezolanidad auténtica en un rincón. La Venezuela de las apariencias y la banalidad, la frivolidad propia del mundo plástico de la burguesía que aún no asimila el golpe de haber nacido en este país.
El actual gobernador de Lara adorna su partida formal con frases como esta contra el presidente Chávez: “La ausencia de reflexión y de autocrítica es mucho más grave cuando se trata de un Jefe de Estado, que debe saber distinguir entre aquellas decisiones que están apegadas a la Constitución y las que sencillamente se distancian claramente de ellas”.
Falcón dice que: “Prefiero molestar con mi verdad, incomprendida en su momentos, antes que acompañar con el aplauso insincero, bastardo y cómplice el error del cual mañana tendríamos que arrepentirnos”. ¿Si la verdad del goberndor es acompañar sinceramente al proceso revolucionario, por qué no molesta a los enemigos del proceso? ¿por qué es aplaudido por quienes reclaman volver al pasado?