22 Mar. 2011 - Desde el pasado sábado, sólo Estados Unidos y Gran Bretaña han lanzado 159 cohetes “tomahawks” contra Libia. Los aviones de Sarkozy han bombardeado diversos lugares y los aparatos de Zapatero les han cuidado las espaldas, pero aún nadie sabe cuál es el sentido de sus acciones, no hay mando, es una guerra hecha por chiflados.
Obama dice que cede el mando, Sarkozy dice que él no es el que manda, Zapatero dice que él está a las órdenes de quién lo mande. Ni siquiera en la OTAN, el gran cartel de acciones mercenarias, hay acuerdo, pero mientras tanto, las bombas siguen cayendo.
El gobierno francés se muestra rabioso, obligan al muy partidario de la guerra, diario español Público, a decir “Francia se resiste a ceder el mando de las operaciones a la OTAN, para quien ve un papel secundario”. Mientras Ban Ki Moon justiffica los bombardeos, pero ni siquiera podría explicar que han logrado con la destrucción, más allá de plagar de muerte el territorio libio.
Los propios franceses no pueden explicar por qué atacaron de primeros ni para qué, ellos sólo tiran las bombas, el petróleo viene después. Zapatero dice que está urgido de proteger a los “civiles” libios, pero sus aviones se van a cuidar las operaciones de ataque de los caza de Sarkozy.
Obama urge a la OTAN tomar el mando. Su agresión de chiflados demuestra que aún no se han puesto de acuerdo para repartirse el botín.