8 de diciembre de 2013.- Los 19 procesos electorales realizados en Venezuela desde 1999 hasta la fecha, incluyendo las elecciones municipales de hoy, “han beneficiado al pueblo tanto moral como éticamente y desde el punto de vista de la construcción de un futuro seguro”, aseguró el analista político Ernesto Wong Maestre.

Entrevistado por el Correo del Orinoco, sostuvo que todas y todos formamos parte del pueblo, “incluso los que tienen cargos de dirección política”, y a su criterio, “eso se percibe con mucha claridad al analizar esa interrelación que hay entre las fuerzas militares y el pueblo”.

Estos procesos electorales, agregó el experto, “han ido legitimando un camino que está claramente expresado en el programa de la patria” planteado por el presidente Hugo Chávez, discutido ampliamente “por toda la población que está dispuesta”, y convertido en ley durante la gestión de Nicolás Maduro.

CONCIENCIA SOCIAL

Refiere Wong que las elecciones municipales de este 8 de diciembre “van a reflejar el nivel de conciencia social que tiene en este momento la ciudadanía”, tanto del lado revolucionario como del opositor.

“Si observamos detenidamente lo que ha pasado a lo largo de los últimos 14 años en las 18 elecciones que se han realizado, podemos ver que hay una mayor conciencia ciudadana, y eso es producto de la confianza que se tiene en el sistema político que se ha ido transformando desde 1999”, asintió.

Dijo que en todo ese tiempo “se ha estado formando un sistema político que da garantía al voto y a cualquier persona para participar en este proceso”, por lo cual considera que hay “una expresión clara de la democracia participativa y protagónica que se ha ido consolidando a través de los años”.

En su opinión, “la ausencia de manifestaciones violentas, como las que se suscitaban durante la Cuarta República, da a entender que en la actualidad la ciudadanía ha venido acomodándose y aplicando el concepto de participación protagónica y participativa que se encuentra expresado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”.

Wong, quien además se desempeña como docente en el Instituto de Altos Estudios de la Defensa Nacional, destaca que al ejercer el derecho ciudadano, el cual forma parte de los siete ámbitos que establece la Constitución, se le está brindando mayor seguridad al país y a las ciudadanas y los ciudadanos que en él habitan.

IMPORTANCIA HISTÓRICA

Según el investigador y catedrático, las elecciones municipales de este domingo tienen una “gran significación” para las venezolanas y los venezolanos, marcada por dos características básicas.

En primer lugar, señala que hay que tomar en consideración la finalidad básica del evento. “En estas elecciones se eligen los cargos de esas estructuras político-administrativas que forman las grandes células de la nación, que son los municipios, y que van a legitimar al Poder Popular”, apuntó.

Además, indicó que hay que tener en cuenta su ubicación en el contexto histórico: “Es un momento que va a marcar una pauta en toda Venezuela”.

También es importante considerar que estas son las primeras elecciones municipales en 14 años de gestión revolucionaria sin la presencia física de Hugo Chávez.

BLINDAJE Y SEGURIDAD

El sistema electoral venezolano es un sistema blindado, sostiene Wong, para quien la efectividad de esta estructura ha sido comprobada durante las últimas 18 elecciones realizadas en el país, donde “no se han encontrado pruebas que le resten méritos”.

Refirió que hasta el momento “no existe ningún proceso judicial en su contra”, precisamente porque “la legitimidad con la que cuenta el poder electoral venezolano se la ha dado el pueblo, incluyendo los sectores que no votan a favor de la revolución”.

Destacó, por otra parte, que la incorporación de mujeres y hombres de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana a los procesos comiciales también ha garantizado la efectividad y confianza en el sistema electoral venezolano.

“La participación de los militares en la defensa integral de la patria es innegable en todos los países y en Venezuela, donde las armas de los distintos componentes están unidas en una misma fuerza, es mayor la responsabilidad de garantizar el orden y la seguridad”, esgrimió.

El analista político recordó que la Fuerza Armada juega un papel constitucional y basado en ese planteamiento asegura que sus integrantes “tienen el deber de llevar a cabo la protección de este proceso electoral”, acción que es apoyada por el pueblo.

GRANDES PASOS PARA EL AVANCE

A su juicio, el sistema electoral ha dado un paso muy grande al abrir nuevos centros de votación en las barriadas y acercar el organismo a las zonas populares. Sin embargo, estima que para fortalecer y prolongar los avances, sería prudente ampliar el programa formativo dentro de la población.

En ese sentido, consideró que el Consejo Nacional Electoral pudiera desarrollar un programa con los liceos, a fin de ir preparando a las y los jóvenes para la vida ciudadana. “La idea es profundizar el deber de cada venezolano de ir a expresar su opinión” en las urnas de votación, manifestó.

Wong no avizora conflictos por parte de la población durante la ejecución del proceso electoral y posterior al anuncio de los resultados, ya que confía plenamente en que “el pueblo está muy claro y sabe que la violencia no conduce a nada”, no obstante, insta a las y los ciudadanos a “estar alerta” ante cualquier situación anormal que pudiese presentarse.

PROCESO CONFIABLE PARA CARTER

Con una visión más externa, el politólogo argentino Juan Manuel Karg hizo alusión a la imagen de confiabilidad que ha proyectado fuera de nuestras fronteras el sistema electoral venezolano. En entrevista con el Correo del Orinoco, indicó que este ha sido elogiado numerosas veces, tanto por las y los simpatizantes de la Revolución Bolivariana como por algunos de sus detractores, “que sin embargo han verificado la confiabilidad de estos procesos”.

Mencionó que el año pasado, antes de los comicios que otorgaron el triunfo presidencial a Hugo Chávez para el periodo 2013-2019, Jimmy Carter, expresidente de los Estados Unidos y fundador del Centro Carter, manifestó durante una conferencia en Atlanta que de las 92 elecciones que el organismo ha monitoreado, “el proceso electoral en Venezuela es el mejor del mundo”.

Como es bien sabido, aclara el analista, “Carter no es adepto a la política de la Revolución Bolivariana, pero puede lúcidamente manifestar su apoyo al sistema electoral por considerarlo confiable”. De hecho, recordó que él ha estado como observador internacional en Caracas y por tanto puede dar fe de ello.

GALEANO LO RATIFICA

Otro reconocido observador internacional de estos procesos ha sido el periodista y escritor Eduardo Galeano, añadió el experto. “Cuando tuve la suerte de entrevistarlo en Montevideo, hace dos años atrás, él también manifestó su confianza en el sistema electoral venezolano”, adujo.

Rememoró que Galeano, parodiando a algunos medios masivos de comunicación a escala global, llamó a Chávez “extraño dictador”, al decir que había ganado “limpiamente” todas las elecciones en las cuales había participado. “Solo perdió el referéndum en 2007, y reconoció rápidamente los resultados”, manifestó, citando al intelectual uruguayo.

El politólogo considera que una de las bondades del sistema electoral venezolano es la automatización del proceso, lo cual facilita la verificación de los resultados. “La automatización hace más fidedigna la recolección de los datos en cada lugar de votación, y tiene un soporte físico -compuesto por una urna con sus respectivas boletas/papeletas- que le da un mayor control”, precisó.

A su juicio, la conjunción de todos estos elementos da mayor seguridad a la hora de contar los votos, permitiendo de esta manera dar cuenta del proceso electoral como un procedimiento estructurado en varias partes.

GPP Y LA MUD SE ENFRENTAN

Para Karg en los comicios que se efectúan este domingo en Venezuela no está en juego la “sobrevida” de la Revolución Bolivariana, dado que “efectivamente son elecciones municipales y hay que entenderlas en ese contexto”.

No obstante, reconoce que en las mismas “se juega mucho”, ya que nuevamente “se vuelven a enfrentar dos proyectos antagónicos”: el del Gran Polo Patriótico (GPP) y el de la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

“Dicho en términos más concretos, se trata de la profundización de un proceso de cambios, inclusivo y con horizontes socialistas, por un lado, y el volver atrás -en términos políticos, económicos, sociales y culturales- por el otro, con políticas de liberalización de la economía, desatención de lo público y de la inversión social estatal”, sintetizó.

ALTA PARTICIPACIÓN DEMOCRÁTICA

La participación democrática en Venezuela, según el politólogo argentino, es verdaderamente una de las más altas del continente y quizá del mundo entero. “La grandilocuente cifra de 19 procesos electorales en los últimos 14 años da cuenta de esto, pero hay que ir más allá en el análisis para dar cuenta del nacimiento de otros fenómenos democráticos”, asintió.

Al profundizar sobre este aspecto, dijo que no solo pone en consideración lo relativo a la democracia representativa, “es decir, la elección de cargos ejecutivos/legislativos”, sino también a los intentos de avanzar hacia una democracia participativa y protagónica, “a través de la conformación de Consejos Comunales y Comunas, reimpulsados luego del golpe de timón exigido por Chávez en octubre de 2012”.

Ante esta situación, no duda en afirmar que en Venezuela hay un avance democrático integral, que tiene que ver con una ampliación en los sufragios, con más de una elección por año, en promedio, pero que también toma en cuenta otros procesos de “empoderación” popular, aún más cotidianos.

POLITIZACIÓN DE LA POBLACIÓN

Juan Manuel Karg asegura que durante todas sus visitas a Venezuela ha advertido sobre la constante politización de su población. A su criterio, “este es un rasgo nodal” para entender el proceso de cambio social que vive Venezuela desde hace 14 años.

Al respecto, hizo hincapié en que después de 1999, con la llegada de la Revolución, “la gente de a pie hace política, discute política y vive la política en los barrios, en las plazas, en sus lugares de trabajo o estudio, y en sus momentos de ocio”.

Ese extendido proceso de politización y la participación notable de la sociedad en el intento de resolver sus problemáticas cotidianas puede constituir, en su opinión, una de las variables fundamentales para entender por qué hubo un aumento de la participación electoral en los últimos años.

Recalcó que adicionalmente hubo una reforma constitucional que amplió los derechos democráticos, permitiendo, por ejemplo, la posibilidad de revocar cargos ante la posible ineficiencia en la gestión estatal.

“Esto también es inédito a escala mundial, y es omitido permanentemente por aquellos analistas internacionales -o medios masivos de comunicación- que intentan esmerilar el proceso político que vive Venezuela, tildándolo de autoritario o antidemocrático”, acentuó.