Caracas, 14 Sep. ABN. (Mariaemilia Reyes).- El analista político internacional Gerónimo Carrera Damas aseguró que la Organización de Naciones Unidas (ONU) está seria y directamente amenazada por el Gobierno de Estados Unidos.
"La ONU está en una situación sumamente difícil, en un escenario de defensa frente a la agresión que sufre por parte de Estados Unidos y frente a la pretensión de que una mayoría mercenaria predetermine el curso de los asuntos que se deben o no discutir en el seno de la organización", explicó.
Desde la Casa Amarilla, el analista señaló que el Gobierno estadounidense considera a los países que integran a la ONU como pueblos que deben estar bajo su control hegemónico, lo cual representa una grave agresión contra la misma organización.
Aseveró que las reformas para democratizar a la ONU constituyen una serie de violaciones del principio fundamental de esa institución multilateral en torno al respecto a la soberanía de los países.
Según Carrera Damas, los gobernantes de Estados Unidos nunca han sido partidarios de una organización de esta naturaleza.
Recordó que a raíz de la Primera Guerra Mundial, el presidente estadounidense Thomas Woodrow Wilson propuso la creación de la Sociedad de Naciones, iniciativa que fue rechazada por el Senado, el cual reprobó la participación de Estados Unidos en esta organización.
La Sociedad de Naciones fue un organismo internacional creado por el Tratado de Versalles, en el año 1919, con la finalidad de promover la cooperación internacional, el arbitraje de los conflictos y la seguridad colectiva. Fue disuelta con la creación de la ONU.
Carrera señaló que en Estados Unidos siempre ha existido una corriente, llamada aislacionista, que realmente es una tendencia de que esa nación se convierta en la potencia dominante y hegemónica en Latinoamérica y el mundo.
"Las intervenciones de Estados Unidos en otros continentes se remontan a las invasiones de Japón, Filipinas y Liberia en el siglo XIX, por lo cual podemos decir que la hegemonía es algo tradicional en ellos", subrayó.
A su juicio, lo mejor que podría pasar en la etapa actual de las reformas de la ONU es que entren en una fase de congelamiento, de no hacer cambios y de no introducir supuestas mejoras.
"Lo más recomendable es estudiar los tópicos de las reformas con mayor detenimiento, dando oportunidad a los pueblos a expresar su opinión", manifestó.