Comienzan los ejercicios cívico-militares Independencia2018 y nuestra doctrina militar, en la República Bolivariana de Venezuela, nos convoca para la Defensa Integral de La Patria. Es un concepto inscrito en la visión de totalidad real que debe tener todo revolucionario al asumirse dentro de una epistemología para la sociedad nueva, la llamada a superar y trascender al capitalismo, con nuevas relaciones de producción entre los individuos.
El concepto de Defensa Integral de la Patria, nos compromete a todas y todos por igual. La Patria, que nos pertenece a todas y todos, somos nosotr@s, somos raíces de Abya Yala, somos Caribes, Guaicaipuro, Apacuana, José Leonardo Chirino, Ezequiel Zamora, Francisco de MIranda, Samuel Robinson, Juana La Avanzadora, Simón Bolívar, Fabricio Ojeda, Alberto Lovera, Argimiro Gabaldón… somos Chávez. Es decir, somos amor, revolución, resistencia, creatividad y culturas de subversión permanente.
Las culturas de lo que hemos sido, reúnen un inalienable patrimonio que contribuye a perfilar nuestra identidad, no como producto acabado ni estructurado, sino como adarga en manos de Quijote soñador de revoluciones y mañanas.
Conocerlas, defenderlas y divulgarlas es un compromiso de obligación patriótica irrenunciable. Por eso, cuando entendemos, en su justo sentido, el concepto de totalidad como cosmovisión revolucionaria de la realidad venezolana, Defensa INTEGRAL de la Patria y Defensa CULTURAL de la Patria, son lo mismo: una misma estrategia y un mismo fin.
Por ello es que el capitalismo teme a los pueblos que se hacen conscientes del valor de su memoria, de sus raíces, de sus orígenes, de sus identidad y sus patrimonios. Por ello es que la burguesía y el imperialismo yanqui temen a Venezuela, a su Revolución Bolivariana y Chavista, a su conquista cotidiana de la independencia definitiva y la construcción de la Patria socialista.
Vamos, confiados y seguros a los ejercicios Independencia2018. Más que un entrenamiento, es la oportunidad de demostrar cuán afinadas tenemos la puntería de nuestras armas. Pero, sobre todo, cuán afinadas tenemos nuestras almas, nuestra conciencia, nuestro amor por la Patria.
