27 de octubre de 2016.- 51 años han transcurrido desde que fue hallado el cadáver del dirigente comunista y revolucionario, Alberto Lovera, en la costa de playa Mansa, municipio Diego Bautista Urbaneja, estado Anzoátegui, por pescadores de la zona.
Al momento del hallazgo en el mar, su cuerpo estaba desnudo, hinchado, pies y manos destrozados y tenía alrededor del cuello una cadena con candado.
De acuerdo a labores de inteligencia e investigaciones, realizadas por oficiales de la Policía Técnica Judicial (PTJ), se determinó que el cuerpo de Lovera registraba signos de haber sido golpeado salvajemente.
Fueron nueve días de tortura propiciadas por miembros de la Dirección General de la Policía (Digepol), quienes interceptaron a Lovera el 18 de octubre de 1965, a la altura de la plaza Las Tres Gracias, en Caracas, pasadas las 6:00 de la tarde y lo trasladaron hacia la policía en Los Chaguaramos.
Para el 23 de octubre, fue trasladado hacia el retén Planchart, localizado en Puente Mohedano y posteriormente, miembros de la Digepol decidieron llevarlo al sector Cachipo, estado Monagas, donde se ubicaba un campo antiguerrillero, donde no lo aceptaron por las graves condiciones físicas en las que se hallaba Lovera.
El dirigente político era oriundo de la población de Juan Griego, estado Nueva Esparta. Desde muy joven estuvo vinculado a las luchas sociales en el oriente venezolano y posteriormente, se movilizó al estado Zulia, donde se incorporó a las filas del Partido Comunista de Venezuela, con apenas 17 años de edad.
Lovera se trasladó luego al estado Lara y finalmente se radicó en Caracas, ciudad en la que se entregó plenamente a la lucha por la libertad y la justicia.
Para el año 1.952 resultó electo como parlamentario al Congreso Nacional, cargo que rechazó a consecuencia del fraude cometido en dichos comicios y que llevaron a la presidencia a Marcos Pérez Jiménez.
En 1957 constituyó la Junta Patriótica y formó parte de ella, en representación del PCV.
Al año siguiente de su muerte, específicamente para el mes de marzo, el cadáver de Lovera fue exhumado y los exámenes determinaron que las yemas de los dedos habían sido rebanadas y tenía vértebras de la cervical desprendidas.
Para honrar al dirigente revolucionario, Alberto Lovera, las autoridades del estado Anzoátegui programan el desarrollo de una sesión especial del Consejo Legislativo estadal para este viernes, en las inmediaciones del lugar donde fue hallado el cadáver, en el municipio Diego Bautista Urbaneja.
Nigel Barrolleta, dirigente regional del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), indicó que se estima que un promedio de 1.000 personas de la zona norte se movilicen al lugar de la actividad solemne.
