Ya nos habíamos preguntado insistentemente, si es que acaso la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (SUNDDE) o la Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario (SUDEBAN) no estaban enteradas de la "progresista modalidad" del avance en efectivo practicada en estas tierras, tal vez sin precedentes alguno en el planeta. Una suerte de "favor" que los comerciantes de cualquier tipo, aseguran hacer a la banca pública y privada ante su desempeño ineficiente.
Ancestral casi ya es, esa perversa relación indirecta-directa entre banca-comercios, compatriotas de la SUNDDE. Es evidente que tienen muchas cosas que atender en este marasmo económico que atravesamos, pero a ese medular problema había que ponerle el ojo mucho tiempo atrás y no esperar a que esa práctica contribuyera al acabose temprano de los quince, último y de los aguinaldos.
Ya existen avanzadores de efectivo ambulantes con puntos de venta inalámbricos que se suman a esa red integrada por pequeñas tiendas y grandes negocios. Y como cosa increíble "garantizan" la entrega de billetes de cien a diferencia de los bancos donde siempre dan billetes de baja denominación a los usuarios de nóminas. ¿A qué se debe esto? ¡Ah…! A vox populi se dice que los gerentes de bancos otorgan billetes de alta denominación a los comerciantes para que efectúen sus avances en efectivo, pero… ¿A cambio de qué? Ahí está el detalle. Eso hay que averiguarlo compatriotas de la SUNDDE, seguro saldrán muchas cosas si se va a la raíz, que pudiera abrir ese hueco oscuro donde se juega con los dineros del pueblo.
Ojalá que el anuncio reciente de la SUNDDE de desplegar 2.040 funcionarios para realizar fiscalizaciones en establecimientos, con la finalidad de sancionar a los comercios que adelanten efectivo sin autorización se cumpla yendo a la raíz y no a reeditar acciones que no pasan de ser un saludo más a la bandera con bombos y platillos, en definitiva, eventos que deberían ser profundamente revolucionarios, se convierten en un actos mediáticos y burocráticos…Y al día siguiente, todo sigue igual.
Bien aleccionador sería, compatriotas de la SUNDDE, utilizar a esos 2.040 funcionarios que suponemos de alta probidad, vincularlos con gente noble del Poder Popular, para ubicar a los estafadores de los ciudadanos y ciudadanas y citarlos ante la Fiscalía y luego monitorear esos procesos.
Hay que mantener a esos funcionarios continuamente en la calle; hay que atacar consistente las causas que diezman el salario. El pueblo no aguanta más ya tantas reacciones tardías en pro de la protección y defensa de sus derechos económicos.